Prólogo - Un Rayo de Esperanza

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2:27 ~ A.M.

El frio estaba presente y la oscuridad lo complementaba, el cielo despejado dejando brillar a la luna, cualquiera diría que esa es una escena súper romántica de película para disfrutar en pareja, pero no para alguien.

Los dormitorios de la UA, un lugar donde los estudiantes a prospectos a Héroe pasaban su estadía, todos descansaban en sus respectivas habitaciones, en pocas horas empezaba su fin de semana y la disfrutarían al máximo, claro que unos mas que otros, mientras otros dormían o en algunos casos roncaban, un peli-verde ya hacia sollozando sentado enfrente de la de su cuarto mientras la luna iluminaba su habitación.

Midoriya izuku, lloraba y en un intento de Consuelo abrazaba su almohada con fuerza, cumplía su función tapando la mayoría de sus sollozos salían de el.

El chico se veía claramente destrozado, las ojeras y los ojos rojos eran una clara señal, su cuarto estaba hecho un desastre, todas las cosas estaban tirada y algunas rotas. Lo único que daba una pista de el porque estaba en ese estado tan lamentable, posiblemente por la foto que estaba enmarcada, pero el cristal estaba roto y enmarco de la foto ya hacia clavada en la puerta con señales de haberla aventado fuerza.

La Foto tenía a el peli-verde a la izquierda, una peli-castaña en el centro y a una peli-azul a la derecha, estaban en la entrada de la UA y debajo las palabras escritas con tinta: 'LO LOGRAMOS'. Una foto muy bonita dirían algunos, si no fuera por el hecho de que esta enterrada en la puerta.

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En otra parte de los dormitorios, una peli-morada caminaba en los pasillos con una pereza notable y también estaba el hecho de que arrastraba los pies, Kyouka Jirou se dirigía a la cocina con intenciones de beber algo de agua, practicar canciones dejaba su garganta muy seca, con un vaso personalizado claramente de su propiedad regresaba su habitación. Llamo a el elevador, hubiera seguido su camino si no fuera por haber escuchado un fuerte golpe en una de las puertas, lo cual impidió que subiera a su destino. La curiosidad y preocupación aparecieron en ella, nadie más lo noto o despertó, pues ya era de madrugada y todos estaban agotados tanto física como mentalmente.

Aunque Kyouka también estaba agotada, pero eso fue remplazado por emoción, esa era la razón del porque ella practicaba su voz a estas horas, hace unos minutos atrás compro boletos de un concierto. Los cuales consiguió y su emoción se disparo en lo alto cuando leyó que eran en primera fila, hubiera gritado de felicidad demasiado fuerte, lo cual si hizo, pero su cuarto estaba insonorizado así que no hubo ningún problema.

Haciendo uso de su Quirk o Kosei para escuchar con mas claridad, se concentro lo mas que pudo, podría ser cualquiera de sus compañeros y estar en primer piso no ayudaba, supo de donde venia el ruido, lo que no espero fue escuchar los sollozos de la habitación de Midoriya Izuku, logro identificar la habitación que se encontraba en el segundo piso ya que aun recordaba la tonta competencia de habitaciones, su compañero de clase mas alegre y de espíritu inquebrantable, claro que lo había visto llorar pero eran de emoción, solo una vez lloro por la desesperación y la culpa, el secuestro de Bakugo Katsuki, se acercaba cada vez al piso donde habitaba el peli-verde, los sollozos se hacían cada vez mas claros. Enfrente de su puerta estaba por entrar, ¿pero eso no seria invadir la privacidad de alguien?, podría, pero aun asi quería ayudarlo, Kyouka quería devolverle el favor cuando la ayudo en el Festival Cultural, con ese pequeño incentivo quiso entrar, pero otra vez se detuvo cuando escucho un susurro inaudible, aun así lo escucho claramente.

Izuku: Porque...Solo tenías... que decir un simple... no. - Susurraba entre sollozos, Kyouka se dio cuenta por el tono que hablo se oía...destrozado, oírlo tan negativo hacía que le se estrujara el corazón-

Al escuchar eso la cabeza de la peli-morada hizo una especie de "click" al recordar una escena algo...¿peculiar? que presenció, ver a Uraraka y Lida besarse fue sorprendente, su vista se fijo en la tercera persona que vio el suceso, Izuku, que solo los veía sonriendo, no le tomo mucho importancia a el peli-verde. Otro recuerdo vago llego, un día, Uraraka contó en una pijamada que el peli-verde se le declaró y ella lo rechazó, también contó que empezó a salir con Lida, los detalles no los recuerda bien, a ella no le interesaba ese tipo de cosas así que pensó la próxima letra de su nueva canción en ese entonces, maldecía internamente por no haber prestado suficiente atención.

Kyouka sospechaba lo que le pasaba, al recordar ambas cosas y unir las piezas vino la gran revelación, puede que sea un teoría, pero era una bastante solida, sin embargo aun no podía hacer un hecho con su teoría, primero tenia que confirmarla. Armada de valor que tomo por la euforia que obtuvo de la compra de boletos, abrió la puerta y vio algo que no esperaba, por lo menos no del chico que siempre sonríe, vio como estaba toda la habitación del peli-verde un desastre, además de la foto clavada en la puerta, eso hizo que sus sospechas se confirmarán, con cuidado cerro la puerta y se acercó a izuku, el al ver cómo ella entró se levantó, limpio sus lágrimas y trato de disimular, fallando en el proceso.

Izuku: Jirou-san, q-que haces aquí? Acaso n-necesitas algo?. - hizo lo posible para fingir una sonrisa y viendo a otro lado, lo suficiente para que solo notarán las sonrisa ya que su cabello cubría sus ojos. -

Kyouka: baje por un poco de agua y cuando estaba por subir escuché un fuerte golpe vine a revisar que era lo que sucedió... Midoriya, se que no hablamos mucho pero puedes confiar en mí, cuéntame qué pasa. - un tono amigable dichas palabras sorprendieron a el peli-verde que solo negó con la cabeza -

Izuku: N-no se de que hablas... e-estoy bien y p-perdón por preocuparte la foto se me resbaló y...- interrumpido por un pequeño abrazo de jirou, algo extraño, pero se sentía tan... reconfortante, estaba por derrumbarse, pero quería intentar aun mantenerse firme. -

Kyouka: No me mientas, eso no va contigo, por qué no me cuentas lo que pasa, puedes confiar en mi, ¿Entiendes?. - Esa sensación cálida que desprendía sentía tan reconfortante, el peli-verde solo correspondió el abrazo, no aguanto mas y comenzó desahogarse en el hombro de la chica, ella solo acariciaba su espalda y como si fuera una madre empezó arrullar a el chico con si fuera su bebe, eso era todo lo que necesitaba izuku en este momento-

Quien diría que este suceso cambiaria sus vidas dando le un giro de 180⁰, este solo era el inicio de una amistad un tanto especial o puede que resulte ser algo mas, dejemos que el destino dicte su curso.

Continuará .....

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