¡Evitando al protagonista! [1]

Capítulo 161. La existencia del mundo (2)

"Oh nada." Mientras decía esto, se acercó para abrazar sus brazos. Ella sonrió y se acercó a él. Ella preguntó: "Entonces, ¿podemos concentrarnos en preparar nuestra boda ahora?"

"Siempre hemos estado preparando la boda. Solo que no habías puesto esto en tu corazón".

"¿No te tengo todavía? Ya que estás manejando esto, naturalmente no necesito preocuparme por eso. ¿Verdad?"

"Bueno, eres genial hablando dulcemente".

"Mhm, tienes que atesorar estos momentos. No consuelo a alguien fácilmente".

"¿Oh? Entonces, ¿debería agradecer a Señora Chen por este honor?

"¡Por supuesto!"

En su camino, charlaron sobre cosas al azar. Después de comer, Chen Sinan la llevó a mirar muebles. Después de que Xin Siyue lo miró detenidamente, finalmente se conformó con unos pocos.

"¿Por qué compramos muebles nuevos?" Ella preguntó.

"Claramente necesitamos comprar cosas nuevas para nuestra boda".

Xin Siyue parpadeó. Oh, ella entendió.

A su regreso, Chen Sinan fue a contestar una llamada. Xin Siyue miró la hora y notó que ya eran las 10 pm.

Chen Sinan tenía el bluetooth encendido y se concentró en escuchar lo que la otra persona decía durante todo el camino. De vez en cuando respondía con unas pocas palabras. Antes de colgar, dijo: "Cuando tengas tiempo un día, almorcemos juntos. Ok, esto es todo por ahora".

Xin Siyue miró hacia adelante y no planeaba preguntarle quién llamó. Sin embargo, Chen Sinan lo mencionó primero. "Mi amigo llamó y dijo que la interrogó durante unas horas. Shi Shi ya se declaró culpable pero hizo una solicitud. Quería verte por última vez".

Cuando Chen Sinan dijo esto, miró su expresión. "Si no quieres verla, yo..."

Antes de que Chen Sinan terminara sus palabras, Xin Siyue continuó: "Iré a verla". Ella sonrió levemente. "Tengo algunas preguntas que hacerle de todos modos".

Xin Siyue fue a la comisaría de policía el segundo día después de salir del trabajo. El líder personalmente la llevó a visitar a Shi Shi. No esperaba que dentro de un día, el cabello de Shi Shi estuviera desparramado y sus ojos estaban en blanco y vacíos. Cuando vio a Xin Siyue, sus ojos se iluminaron. La luz parpadeó y luego disminuyó.

Shi Shi se burló, "Chen Sinan era más poderoso de lo que esperaba. Pero no seas demasiado feliz. A pesar de que él me derrotó, ustedes todavía tienen a Sheng Wenyang en su relación".

Xin Siyue se burló de ella, "¿No puedes contar la situación en este momento? ¿Crees que Sheng Wenyang podría seguir siendo un obstáculo entre nosotros dos? O estás subestimando a Chen Sinan o crees que me intimidan fácilmente".

"¡¿Te intimidan fácilmente?! Xin Siyue, ¿no te parece gracioso? Si no fuera por ti, ¿cómo terminaría siendo tan miserable y trágico? ¡Todo es tu culpa! ¡Todo esto fue culpa tuya! "

"¿¡Qué odio tienes contra mí!?"

"No te lo diré. ¡Puedes vivir con este rompecabezas para siempre! En cuanto a mí, en el momento en que muera, finalmente podré regresar a ese mundo. ¡En cuanto a ti, puedes morir con este mundo virtual! ¡Jaja! "Cuando Shi Shi dijo esto, se rió a carcajadas y sin restricciones. Ella dijo: "¡En este mundo virtual, solo tú, un tonto, te tomarías todo tan en serio! ¡Ja! ¡Jajaja! ¡Eres tan tonto!

Xin Siyue tenía un rostro sombrío. Luego continuó escuchándola: "Hay una manera de que sigas viviendo. ¿Quieres intentar?"

Xin Siyue la miró profundamente y dijo: "No voy a creer lo que estás diciendo".

"¡Está bien si no lo cree! ¡Quien se preocupe por este mundo virtual es un tonto! Si estás dispuesto a matar personalmente a tu hijo y al de Chen Sinan, usar su sangre como sacrificio, tal vez puedas conseguir tu deseo. Xin Siyue, solo hay una posibilidad. En el momento en que nace el niño, depende de ti si eliges matarlo o no".

Xin Siyue la miró fijamente y luego dijo: "Lunática".

"¡Jaja! ¡Ja ja!"

Cuando Xin Siyue salió de la comisaría, estaba aturdida.

Las palabras de Shi Shi no se pueden creer. No importa qué, ¡ella no lo creerá!

Caminó unos pasos y vio el Mercedes plateado junto a la puerta de la comisaría. La ventanilla del automóvil descendió hasta la mitad y Chen Sinan tenía los ojos fijos en su teléfono.

Tal vez había detectado su mirada, pero Chen Sinan guardó su teléfono. Él miró ligeramente hacia arriba y en dirección a ella. Luego le sonrió.

Xin Siyue estaba atónito pero luego le sonrió también. Caminó hacia él rápidamente y le preguntó: "¿Por qué viniste?"

Chen Sinan salió del coche y le abrió la puerta. "Vine a recogerte".

"¿Estás fuera del trabajo tan temprano hoy?"

"No importa lo importante que sea el trabajo, mi esposa es más importante".

Xin Siyue, que estaba a punto de subir al coche, hizo una pausa. Luego miró hacia arriba y lo besó en la cara. Ella sonrió y dijo: "Lamento molestar al presidente Chen".

Chen Sinan se tocó las mejillas que ella acababa de besar. No pudo evitar reír. "¿Eres tacaño? ¿Solo vas a besarme la cara?

Xin Siyue, que estaba abrochando sus cinturones de seguridad, se detuvo y luego miró hacia arriba. Ella sonrió y respondió: "Presidente Chen, deje de ser codicioso y de pedir más".

Chen Sinan sonrió y caminó alrededor, subiendo al auto.