Diario de sueños

El Heladero

Bien, este sueño es un tanto simple, está basado en hechos reales, y lo soñé casi en la mismo día en que pasó. Este sueño se basa en un recuerdo de cuando caminé por varias calles para comprarle al heladero, en sí, empezó con esto: salí de casa con mi primo y ambos fuimos con el dinero en mano; el camino aún era de tierra en ese entonces, cruzamos por una calle que se estrechaba hasta hacerse un sendero en el que sólo podían pasar personas, ese "callejón" seguía hasta llegar a una calle ya pavimentada, era una rampa que se curvaba a la izquierda. La bajamos mientras que escuchamos a lo lejos la bocina; antes en la curva de esa calle había una tienda, sólo es un detalle que menciono porque ya no está.

Nos encontramos con una calle bien hecha y adornada con luces blancas que iban de casa en casa, esta vista contrastó mucho con la realidad porque esa calle no era tan limpia y bonita, en este momento tal vez estuve a punto de tener un sueño lucido, pero por alguna razón no sucedió. En fin, me dispuse a explorar esta calle cambiada, miraba como hasta había unos cuantos puestos vendiendo no se qué, unas cuantas personas paseaban por el camino, y también atardeció, esto último resaltaba las luces colgantes, era algo digno de apreciar, y de hecho eso hice: lo recorrí con toda la calma y miré a detalle, una lástima que no recuerde bien todas las cosas que formaban parte de la calle. Bien miré varios de los puestos, algunos creo que eran de ropa, me detuve en una acera a descansar, entonces escuché que alguien familiar me llamaba, no mi primo, sólo alguien más, no pude ni levantarme cuando el entorno cambió, la calle se hizo más inclinada hacia el lado de donde venía la voz, no tuve de dómde sostenerme.

Y desperté, este sueño es muy viejo, de cuando iba en primaria, esa vez mi primo y yo sólo compramos helado y un Banana Split.