𝔽𝕒𝕔𝕚𝕟𝕒𝕔𝕚𝕠𝕟 𝕡𝕖𝕝𝕚𝕘𝕣𝕠𝕤𝕒

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A la mañana siguiente comenzó la caminata.

Sin lugar a dudas era lo que había esperado, plantas, animales, insectos, simplemente un mundo totalmente distinto uno al que no estaba acostumbrada quizá haya sido está fascinación que envolvió mi mente pues, perdí la noción del tiempo y poco a poco me fui alejando del grupo.

Confiando en que Roxana o alguno de mis compañeros e incluso el mismo profesor me llamaría si me dejaba demás, pero no fue así, me aleje tanto que nadie se percató y mucho menos me llamo. ¿Cómo me di cuenta? Muy fácil llegué a un punto específico y comencé a llamar a Roxana pero no obtuve respuesta alguna, desesperada y asustada corrigiendo mis propios pasos pero todo intento fue en vano entre más corriente y taba más perdida me sentía seguí dando vueltas pero lo único que conseguí fue perderme aún más.

Así fue como cayó la noche y con ella todas mis energías por lo que no me queda más remedio qué acurrucarme a los pies de un árbol me agaché y abrace mis piernas y en un momento dado las lágrimas comenzaron a salir de mis ojos.

-¿Nadie vendrá a buscarme acaso?-

Pensé en ese momento Y es que de verdad parecía que sería así Y una vez más la conciencia me resigno levante la cabeza y nadie estaba alrededor por lo que decidí tratar de dormir en las raíces del árbol que me acogio.

De repente sentí una mano en mi hombro, con las pocas fuerzas que me quedaban levante la vista y ante me había un chico claramente más grande que yo pero la verdad es que no me importaba porque realmente había alguien conmigo, realmente alguien había ido a buscarme y por fin me había encontrado o al menos eso era lo que yo podía sentir.

-¿Qué haces aquí? Estás fuera de los límites del campamento-

Me preguntó con una voz fría ¿me asusté? un poco la verdad pero en ese momento ¿que más podía hacer? él era mi única esperanza de salir de ese bosque.

-yo he estaba caminando con los otros.... Me alejé.... pero-

El hecho de pensar que nadie había ido por mí y que sabían que no estaba en los límites del campamento me angustiaba mucho y me ponía realmente triste por lo que no pude terminar mi frase.

-así que te dejaron a tu suerte vaya compañeros que tienes-

Lo miré a los ojos y fuera de encontrar una cara inexpresiva me miraba con ternura Cómo si el supiera exactamente como me sentía.

-¿C-cómo lo supiste?-

Le respondí únicamente y él me tendió la mano sin decir una palabra pero no necesitaba decir nada, entendía perfectamente que no era la primera vez que pasaba Y que había corrido con la suerte de encontrarme con él.

-te llevaré de regreso aunque quizá quieras descansar... sí eso pasa por favor avísame-

Me dijo una vez que empezamos a caminar, y sin soltar mi mano seguimos un camino así pasa aproximadamente un cuarto de hora la verdad es que me sentía bastante bien por alguna extraña razón sabía que no me pasaría nada con él siempre y cuando no le soltara la mano.

Llegamos a un claro y de repente se detuvo, miro al cielo y soltó una pequeña risa.

-creo que esto te gustará-

Me dijo y después me señaló que mirara hacia el cielo en el cielo estaba la luna rodeada por estrellas se veían perfectamente las constelaciones y de repente pasó una estrella fugaz,

-después de todo no ha sido tan malo perderme-
Le dije y en ese momento me percaté que seguimos tomados de las manos pero por alguna extraña razón no me importó me sentía bien y eso era lo único que me importaba en este momento.

-creo que es hora de seguir No creo que quieras pasar la noche en el bosque-

Dijo con un tono más alegre, asentí con la cabeza y seguimos caminando. Aprecio este momento y lo apreciaré siempre lastimosamente no duró demasiado porque casi enseguida llegamos al campamento y también en ese momento me soltó la mano.

-llegamos, que pases buena noche-

Me dijo a modo de despedida pero creo que tanto tú como yo sabemos que no podíamos dejar pasar esta oportunidad no cualquiera te salva la vida quería compensarte de alguna forma pero no sabía cómo así que nuevamente me arme de valor y le tome la mano.

-M-muchas gracias no sé qué hubiera pasado si no me hubieras encontrado-

Dije tratando de no parecer tan incómoda, esperaba la verdad que quitará mi mano en cualquier momento, pero no lo hizo al contrario la tomo bien y me dio un apretón de manos.

-también me alegra haberte encontrado Emmm...-

Qué forma tan extraña de preguntar un nombre pensé en ese momento pero yo tampoco le había preguntado el suyo así que pensé que era justo.

-Katerine así me llamo y tú ¿cuál es tu nombre?-

De repente pasó algo creo que no me había percatado con la mano que tenía libre el chico se quitó la capucha llevaba encima también una bufanda que le cubría hasta la nariz y solo se podía apreciar sus ojos, en ese momento no pude no pude creer A quién tenía frente a mí pero a diferencia de las historias yo sí puedo escuchar su nombre.

-Sebastían, un gusto conocerte Kate ¿Así puedo llamarte?-

A pesar de estar impactada no pude evitar emocionarme porque sinceramente no la hace Y puede que nunca lo sepa pero creo que él se quedó igual de impactado cuando le respondí.

-C-claro espero verte pronto Sebastían-

Al mencionar esto no sé si fue porque nadie le había respondido no sé si fue por la emoción del momento pero en ese momento me abrazó y me dio las gracias.

-nos veremos más pronto de lo que crees-

Y dicho esto desapareció entre el bosque yo no pude hacer más que regresar al campamento dónde me recibió Roxana claramente preocupada pues resulta qué los chicos del campamento si habían visto que me estaba alejando pero querían hacerme una broma Y decidieron no avisarme pero nunca pensaron que sería capaz de salir de los límites del campamento los profesores también pidieron perdón y prometieron que me cuidaría en mejor yo simplemente le respondía que no había problema que lo importante es que estaba ahí estaba a salvo.

Pero lo que nadie supo nunca es que había visto hasta antasma no no solo lo había visto me había salvado había hablado con él y hasta lo había tocado pero eso era algo que nadie podía saber ¿porque? no lo sé simplemente era algo que sentía y algo a lo que hice caso.

Entre el cielo y la TierraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora