Quiero otra oportunidad | MaiTake / Takemikey |

I

Se siente irreal. Todo a su alrededor se siente tan imaginario que no sabe si es un sueño o no, su mente flota entre todos los recuerdos que atesora y rememora en su cabeza. Su vista se fija en la habitación muy bien decorada, con colores pasteles cubriendo las paredes y las pequeñas flores ambientando el lugar. Tan de ensueño.

No puede evitar soltar unas lágrimas de dicha ante la felicidad que se presenta en su corazón de oro, tan sensible en estos instantes que de seguro dejarían una huella en su vida. El azabache se admira en el gran espejo y sonríe para sí mismo, asegurándose que desde este día todo cambiaría.

Y claro que lo haría, no faltaban minutos para que lo llamaran y la ceremonia de inicio por fin. Los viajes en el tiempo terminaron, ya no había perdidas y la alegría inundaba en los cuerpos de sus amigos. Sus preciados amigos.

No sabe que haría si todos no estuvieran con él, ellos se volvieron parte de su mundo tan pequeño que solo les ofrecía felicidad. Cuando supieron que se iba a casar, celebraron su despedida de soltero y comieron tanto como para decir que ya no querían más.

Se la paso muy bien entre tragos y platicas.

Ahora, con su traje blanco y sus rizos negros bien peinados, se enorgullecía de sus logros y todo lo que hizo solo para que pudieran cumplir sus sueños. El pasado se veía tan lejano e imposible que ya no había manera de que todo volviera a salir mal.

Su poder para viajar en el tiempo todavía funcionaba, pero ya no existía una persona con la cual poder estrechar su mano, porque todo había acabado. El sufrimiento constante de no ser capaz de salvar a sus seres queridos ceso, las lágrimas derramas se secaron y las muecas se convirtieron en pequeñas sonrisas.

Este es un día muy importante para Takemichi, solo para Takemichi. Hoy es 13 de agosto, el día en el que Shinichiro debió de haber muerto trágicamente a manos de una llave inglesa. El pudo evitarlo gracias a su gran viaje en el tiempo, hizo eso y más. Kazutora nunca cayo en la obsesión por querer culpar a Mikey sobre algo que no hizo, Takemichi estuvo con el repitiéndole constantemente que solo fue algo para hacer feliz a Mikey.

Kazutora solo se dejó hacer entre las palabras que contenían verdad y calidad, pudo avanzar gracias al Hanagaki y por eso, siempre le estaría en deuda. Taiju ya no golpeaba a Yuzuha y Hakkai, también intervino en eso.

Unas pequeñas gotas saladas cayeron de sus parpados y delicadamente se las retiro de la cara, ahora ya no había motivos para derramarlas. Todos tenían sus finales felices, incluyéndolo en ese círculo.

Después de todo, estaba a nada de casarse con el amor de su vida, que sorprendentemente no era Tachibana Hinata. Sano Manjiro ahora era quien ocupaba su corazón y mente. No sabe lo que sucedió realmente en estos 18 años en los que estuvo en el pasado, luego de agarrar la mano de Mikey y volver al futuro, se vio en un traje blanco y en una iglesia.

Al haber estado en su edad de 8 años, hizo todo lo que estuvo a su alcance para lograr un felices para siempre. En todo ese intervalo hasta los 15, desarrollo sentimientos por Mikey que jamás pensó que podría tener si no con Hinata. Ahora, con 26 años edad, se casaría con su amor jovial.

Esta era una de las mejores líneas que pudo haber deseado. Todos los futuros de sus amigos fueron protegidos por el desde una temprana edad. Se prometió a si mismo a la edad de 9 que jamás les diría sobre esto, no había una razón por la cual hacerlo si estos estaban bien.

Hanagaki Takemichi tuvo que superar obstáculo tras obstáculo, la ansiedad y la presión lo acompaño en el pasado en todos sus momentos. A pesar de ser feliz ahora, algunas cadenas todavía lo tenían preso a causa de los últimos alientos y palabras que le dedicaron sus amigos antes de morir. Es como una maldición.