En qué instante falló el mecanismo que tira,
Con el nudo innegable que no deja hablar,
La certeza, la repetición de conceptos
Que todos parecen captar menos tú.El candado puesto en el pecho es inamovible
La calma de la nada, el cáos inminente.
Ducha de aguas turbias, no, el goteo cae y perfora.Cae y perfora.
Cae.
De rodillas incapaz de formar palabras
Inequívoco karma de quién pensó saberlo todo
Cae el discurso, la armadura oxidada,
¿Qué está mal?Décadas enteras agarradas con desespero al hilo coherente,
Metáforas vacías e inconscientes elocuentes,
Acostumbrado a tragar el cuerpo arde, pero jamás vomita antes de tiempo.Incontrolable sed, dolor del palpitante quiere ser despojado de su constancia,
¿Hay algo más vacío que una palabra que se repite? El eco del tiempo contradice, pesado, hueco, indolente.¿Qué está mal?
El término apaga todo, arrastrando el zumbido de la existencia en cabeza de otros, mientras ya no sientes nada.Y en la nada ya no duele,
y en la nada que no existo,
sólo entonces irrelevante será preguntar
qué está mal.