Capítulo Único

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La expresión en el rostro de MinHo era completamente seria, manteniendo una dura mirada hacia el escenario donde se veía a TaeMin brindar todo un espectáculo al cantar 'Slave'. Y es que no había quitado sus ojos de él desde que lo vio en la plataforma iniciando con su presentación. MinHo estaba más que complacido puesto que ver al rubio bailar era todo un deleite y solo le recordaba lo mucho que lo admiraba así como lo orgulloso que se sentía de él por todo lo que había estado mejorando con el pasar de los años. Porque esos movimientos corporales requerían de mucha precisión y habilidad, y el hecho de que TaeMin los hiciera con tal fluidez, como si no le costara nada de trabajo, lo hacía todo aún más increíble.

Desde el inicio de la canción su atención se concentró justo en las caderas del rubio, las cuales había estado moviendo al compás de la melodía. Eran movimientos sutiles acompañados de su torso, piernas y brazos que, si bien, podrían pasar desapercibidos, pero al estar MinHo observándole con tal intensidad les brindaban una relevancia que su propia entrepierna podía corroborar.

TaeMin disfrutaba de la canción y se notaba, así como lo hacía el mayor, el cual apreciaba cada movimiento grácil realizado mientras que a su vez se dejaba envolver por la melodiosa voz. No importaba que hubieran dos bailarinas acompañándole en el escenario, las cuales realizaban pasos incluso un poco más sensuales de los que el mismo TaeMin hacía, la atención de MinHo estaba completamente a disposición de su novio. Porque con cada minuto que pasaba, MinHo solo podía visualizarse a sí mismo junto al contrario, reemplazando la estructura metálica en la que TaeMin estaba recargado.

Le ve regresar al centro para colocar su micrófono en la base para después levantar sus brazos y girar sus manos sobre su cabeza durante el coro. No se pierde cada detalle y aprecia con sumo cuidado la manera en la que TaeMin se encarga de seducir al público con solo el movimiento de sus benditas y sagradas manos. Las coloca en sus caderas mientras las menea de manera suave para después estirar su mano derecha y así luego ponerla en su torso, subiéndola al compás del "baby, I'm slave, slave for you" que estaba cantando.

Y como si no fuera suficiente dramatismo, se encarga de empujar levemente la base de su micrófono para darle paso a los "loving" de la canción.

Choi estaba fascinado, no había duda de ello, sin embargo, todo cambió cuando las bailarinas entraron en lo que parecía ser como una jaula en la que TaeMin se encontraba. Observó cómo él acercaba su rostro a la chica castaña mientras movía su mano haciendo ademán de tocarle la cara para después colocar su brazo encima del hombro de la otra bailarina de cabello rubio, manteniendo cierta proximidad. Le vio moverse con ella hasta la estructura de dicha jaula para ir bajando ambos de manera lenta mientras la tenía acorralada y con una mano en su cabeza. Fue entonces que la emoción en MinHo pasó a ser una oleada de celos que trató de controlar, pues el hecho de que los sintiera era sumamente ridículo ya que él bien sabía que eso solo era parte de la presentación de TaeMin y todo era meramente coreografiado.

Tenía que controlarse, lo sabía, pero eso no evitaba que se sintiera disgustado con cada cosa que el menor hacía con la bailarina, porque verle a ambos acercarse mientras ella le ponía una mano sobre una de sus rodillas para después medio recostarse juntos a un costado lo tenía con un mal sabor de boca. MinHo no era de los que celaban y odiaba mostrarse posesivo, pero todo aquello se iba por el caño cuando se trataba de TaeMin, porque solo él sacaba a relucir todos los lados que MinHo trataba de mantener a raya.

La presentación continuó con TaeMin y sus bailarinas bailando cada uno por su cuenta ya sin interactuar entre sí. MinHo le vio realizar los últimos pasos -porque sí, su mirada simplemente no se podía despegar de TaeMin, él era su único foco de atención-, amando la manera en la que el rubio descendía al suelo poco a poco, balanceando su cuerpo de izquierda a derecha. Una vez estando de rodillas, se empuja suavemente hacia adelante para luego ponerse de pie nuevamente. Levanta su pierna izquierda al momento que mueve su brazo derecho en dirección a ella, como si estuviera tomando propulsión para rematar con un movimiento que mostraba delicadeza al regresar el brazo por el mismo trayecto en el que lo había levantado, todo mientras inclina levemente su cuerpo hacia la derecha a la par de su cabeza, haciéndole lucir tan grácil solo como él sabía ser. Finalmente pasa a acostarse en el suelo mientras eleva su pelvis, terminando así con su presentación.

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Los fans no tardaron en aplaudir y gritar con emoción ante lo que habían visto. MinHo se les unió aplaudiendo con efusividad, ya luego se las cobraría con TaeMin, pues estaba más que seguro que parte de todo el espectáculo realizado lo había armado para fastidiarle, pues sabía lo celoso que MinHo podía llegar a ser con él. Si Lee estaba consciente de ello, entonces tendría que atenerse a las consecuencias.

~ * ~

—Hyung, ¿qué te pareció el concierto? —preguntó TaeMin mientras ambos entraban a su habitación en el hotel.

—Estuvo bien —respondió MinHo sin emoción alguna a la vez que se quitaba sus zapatos y su abrigo.

—¿Solo "bien", hyung? —volvió a preguntar incrédulo.

—Hmm —asintió con un murmullo, provocando risa en TaeMin.

—Eres un mentiroso.

—¿Entonces por qué preguntas si tal parece que ya sabes la respuesta?

—Porque me encanta escucharte dándome cumplidos y diciéndome lo mucho que me amas. Incluso hoy me esforcé aún más porque tú estabas aquí, pero si me vas a decir que solo lo hice "bien" entonces quizás ya no deba tratar de complacer a mi novio —dijo con un puchero, fingiendo indignación.

—Oh, ¿entonces también presentaste Slave teniéndome a mí en mente? Porque parecías estar pasándola muy bien con tus bailarinas, eh.

TaeMin sonrió ampliamente ante lo escuchado, pues aunque su intención no era hacer enojar a MinHo, debía admitir que disfrutaba de esos momentos en los que le dejaba ver que sí lo celaba a pesar de que muchas veces le dijera lo contrario.

—¿Estás celoso, hyung?

—No se trata de eso, TaeMin.

—¿Entonces? ¿Si hago más coreografías así no tendrás ningún problema?

—Lee TaeMin —pronunció como llamado de atención.

—Porque si no se trata de eso, entonces bien puedo elaborar coreografías más sensuales en las que incluso podría tener mayor contacto físico con las-

—¡Está bien! ¡Estoy celoso! ¿Feliz? —dijo sentándose en la orilla de la cama mientras pasaba una de sus manos por su cabello como señal de frustración.

TaeMin le observó divertido, por lo que se sentó a un lado de él. Colocó su mano sobre la rodilla del contrario para trazar pequeños círculos en ella.

—Hyung, a mí solo me gustas tú. Lo que viste fue solo una coreografía y lo sabes, pero como sé que también te gusta que yo te diga las cosas, entonces déjame contarte que, en mi mente, al estar bailando solo podía pensar en tí y en lo mucho que me gustaría estar tocándote de ese modo —comenzó a mover su mano de donde la tenía para ahora colocarla cerca de la entrepierna de MinHo.

—Solo tú puedes tenerme así, MinHo hyung. Soy tu esclavo.

Un recorrido de besos fueron dejados por el cuello de MinHo mientras TaeMin le metía la mano debajo de la blusa negra que traía puesta para ir quitándosela, dejándolo a torso desnudo.

—¿Por qué te encanta ponerme celoso, Lee TaeMin? —cuestionó con los ojos cerrados, dejándose hacer.

—Porque así te pones más caliente, hyung.

MinHo soltó un gruñido y se levantó junto con TaeMin para arrinconarlo en la pared. Entre besos, comenzó a desvestirlo, dejándole desnudo en cuestión de segundos mientras él aún tenía puesto su pantalón negro. TaeMin respondía a los besos con una sonrisa, de tanto en tanto le daba pequeños mordiscos juguetones. Sacó su lengua pidiendo permiso para entrar en la boca del azabache, mismo que le fue concedido. MinHo le besaba con desesperación, pero TaeMin no tardó en tomar las riendas y hacer que la velocidad bajara para poder disfrutar de su encuentro sin prisas.

Slave [2MIN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora