LA VALENTÍA DEL POLICÍA - EJERCICIOS DE ESTILO

Arco iris

Había una vez un hombre no muy joven que trabajaba con los azules. Un día su jefe le pidió de manera un poco verde que dejara de ir, ya que no mostraba un trabajo activo. Juan, que es el nombre del policía despedido, no se quejó, cogió sus cosas y con una cara de pocos amigos se fue de allí. Días después al medio día, Juan caminaba tranquilamente por un camino rojo hacia una tienda de ropa. Entró y se puso a mirar partes de ropa inferiores amarillas, ya que le faltaban. Unos minutos después, en la tienda entró un tipo con una máscara marrón puesta y una pistola dorada en la mano. Era un chico no muy alto y con voz de camionero. El enmascarado apuntó al dependiente y le obligó a que le diera todo el dinero que tenía. El expolicía no se quedó quieto y sigilosamente caminó un par de metros, lo cogió por detrás y lo inmovilizó. Poco después llegaron los azules, vieron a Juan haciendo ese gran acto y lo readmitieron.