🦈 La guía de Rowoon [ km; au ]

03

Miré a la cámara y solté un suspiro. Hoseok en definitiva no estaba ayudando.

—¿Entonces me van a entregar el guión allí adentro? Yo pensé que iba a tener que improvisar— solté con angustia.

—Jimin, de la única manera que consigues un guión con anticipación es estando en una empresa— explicó mi amigo a través del teléfono— y adivina...tú no tienes ninguna.

—Te llamo luego, me estás poniendo nervioso— confesé con angustia.

Así que luego de despedir a mi mejor amigo, me concentré en lo que debía hacer.

Delante de mí no había mucha gente, curiosamente este casting era bastante privado por ende no cualquiera iba a venir. Hoseok consiguió la primicia por parte de su amigo, pero obviamente él no debía decirme.

Así que estoy aquí de contrabando.

Todo lo hacemos en contrabando, no me sorprendería si un día acabamos en prisión.

Ahg, que negativo.

Esta mañana cuando salí de la casa, incluso Namjoon se sorprendió de verme despierto tan temprano. Incluso me deseó suerte y me dio dinero para que me compre un desayuno al salir del casting.

Eso me animó, por ende venía dispuesto a triunfar.

¿Me gusta actuar? Y si. Si soy honesto no es como que sea espectacular, pero siempre me dijeron que soy dramático por naturaleza así que supongo que no debo actuar tan mal.

Vamos a pasar una vergüenza allí adentro.

—¡Siguiente!

La chica que está delante mío respiró profundamente y entró a la habitación a la cual todos estábamos esperando a ser llamados.

Ni siquiera sabía para qué era la serie. Tenía que entrar con confianza allí adentro y pensar en cómo manejar la situación.

Estoy seguro que si soy yo, voy a poder obtener algún papel al menos como extra. Ya saben, esos que andan en el fondo.

¡O podemos llorar y pedirle al productor que al menos nos de trabajo de cafeteros! Creo que esa es la idea más factible.

Por favor, no me pongas más nervioso de lo que ya estoy.

Respiré profundamente y la puerta se abrió dejando salir a la chica que ingresó anteriormente.

Sus ojos estaban llenos de lágrimas y parecía estar furiosa.

—¡Siguiente!— gritó el chico de cabellos rubios.

Tragué saliva y simplemente entré a la habitación.

Dentro de esta había una mesa donde estaban tres personas hablando mientras señalaban la cámara.

La mujer se veía dulce, tenía el cabello rubio y los ojos tan azules como el cielo. También había un colorado, el cual se veía carismático.

Pero él terror me lo provocó el que estaba sentado en medio de esos dos. Un alfa bastante amenazante. Su cabello era negro azabache y tenía una mirada filosa.

Su vista estaba en unos papeles que habían sobre la mesa, los cuales supuse que eran mi informe.

Mierda, no debería haber mentido tanto.

¿Mierda no deberías haber mentido tanto? ¡¡Mierda nos deberíamos haber bañado!! Ese alfa está que arde.

¿Qué?

Ojalá la película o serie de mierda sea 50 sombras y él sea Christian Gray.

La mujer rubia habló.