40 días y 40 noches.

Día 14: Gaara.

Horas antes...

Karito miraba con reprobación a Firem, nuevamente había gastado un Hp para estar con ella.

- Me quedan 30, Sarutobi.- se defendió Firem.- así que no alegues.

El Saisho comenzó a cambiarle el vendaje ya que Itachi y Choji los habían dejado solos un momento.

Karito observaba a Firem, quién estaba concentrado en su hazaña. Cuando estaba volviendo a vendar su brazo se sintió observado.

- Qué ocurre?- le dijo mirándola de reojo.

- Nada...- dijo la chica sin más. - Es solo que... te ves mino de perfil 🥰.

Firem siguió en lo suyo, pero no pudo evitar sonrojarse por el piropo. Karito solo tuvo que aguantar la risa.

- Gracias Fi.- le dijo la muchacha mientras el Saisho terminaba de vendarla. - gracias por preocuparte por mí.

Firem se acercó a su rostro para depositar un dulce beso en los labios de ella.

- No me lo agradezcas, yo siempre voy a protegerte, y sabes que es así.- le dijo con ternura mientras acariciaba su rostro.

- Ok mi caballero en armadura, si querías excitar a tu doncella, déjame decirte que lo has logrado.- le dijo la castaña con tono coqueto.

- Olvídalo Sarutobi, tú hoy te vas a acostar temprano y a descansar, me oíste?- le dijo el Saisho con firmeza.

- *Sigh* Tsumaranai 🙄.

Firem la miró con cariño, pero de todas formas estaba preocupado.

- Qué fue lo que te ocurrió?- preguntó el castaño sin poder evitar la preocupación.- En la mañana estabas bien. No entiendo cómo pudiste desmayarte así como así.

Karito lo miró fijamente para luego mirar hacia otro lado.

- No lo sé...- por inercia tomó su brazo vendado.- fue como si un montón de imágenes comenzaran a venir a mi cabeza de golpe y... creo que no lo soporté y me desmayé.

La chica se quedó pensativa cosa que notó Firem.

- Viste alguna cosa?- preguntó intrigado el castaño.

Karito miró de soslayo a su hombre, ni ella entendía qué rayos era lo que tenía dentro de su cabeza.

- Una habitación... cómo de aislamiento... un montón de agujas... un techo blanco... auch!- en ese momento la castaña sintió una punzada.

- Ya tranquila. No debí preguntar.- expresó Firem preocupado.

- Descuida, yo también quiero saber qué me pasó Firem, pero... creo que lo analizaré mañana, aún me duele la cabeza.

Firem acarició su cabeza y besó su frente justo en el momento en que Itachi volvió a la habitación.

- Cómo te sientes?- preguntó el Uchiha.

- Bien, gracias Itachi.- dijo la chica un poco más tranquila.

- Debo irme ahora, ten, analgésicos. Si vuelves a tener un evento como éste no dudes en llamarme o que alguien te traiga conmigo. - le recomendó el pelinegro.

- De acuerdo.- dijo la muchacha mientras el Uchiha se despedía de ellos.

- Cuídate Karito.- dijo el Uchiha antes de atravesar la puerta.

Firem miró su reloj, ya faltaban 30 minutos.

- Cuánto tiempo te queda?- preguntó curiosa la castaña.