Los 12

Buenos días.

Me desperté y Ragnar ya no estaba, pero sí había una nota sobre la cama.

"Buenos días princesita, ¿cómo durmió la princesita más hermosa del planeta? Yo espero que bien, me desperté y la verdad no quería despertarte, te ves tan linda dormida que de verdad no me animé, pero te traje el desayuno, te preparé unos hot cakes, los puse en la mesita que tienes a lado, ahí también te puse tus pastillas y un vaso de jugo, desayunas bien princesa, TE TOMAS TUS PASTILLAS..."

Yo sonreí y me senté, comencé a desayunar, el desayuno era realmente delicioso, casi podría apostar que lo hizo mi hermano, mi hermano tiene un don en la cocina, aunque él odia cocinar. Terminé de desayunar y me levanté, me bañé y me arreglé, agarré las cosas y bajé. Todos estaban en la sala, pero faltaba Laura y Dylan. Hunter se levantó y me tomó de la cintura.

—Debemos hablar —me llevó con él y nos encerró en un almacén.

—Wow,  ni siquiera he saludado —agregué.

—Saludas después, no es cómo que se vayan a ir. 

—Ja, ja, que gracioso —dije de forma sarcástica. 

—Lo sé —él sonrió y me guiñó el ojo. 

—Claro... ¿entonces, qué me quieres decir? —pregunté.

—No me gusta verte con Ragnar, él ocultó los archivos, ayer los vi cuando iba para mi habitación, estaban debajo de una mesa, era casi imposible de ver...

—JAJAJAJAJAJAJAJA —comencé a reírme.

—¿De qué te ries? Si la parte graciosa la conté hace rato y no te dió risa —agregó Hunter.

—Yo cambié los archivos, no quiero que nadie los vea hasta que los lea por completo. Quién sabe que puede haber ahí.

—Eso explica mucho, Ragnar no es lo suficientemente listo como para pensar tanto. Ah y otra cosa, Laura está embarazada —en cuanto esas últimas palabras salieron de su boca, quedé congelada.

—¡¿Qué?!

—Si, apenas tiene uno o dos meses, por eso es que Dylan dijo que quería a ambas, porque se refería a Lau y a su hijo o hija, yo que sé —salí corriendo del almacén pero Hunter me detuvo.

—No.

—¿No? Laura es de mis mejores amigas, está embarazada y está encerrada aquí, tengo que sacarla de aquí... ni siquiera debería de estar pasando por semejante estrés, no es bueno para su bebé —agregué.

—Yo sé que no bonita, pero no podemos hacer mucho por ella.

—¡Tenemos que! —comenzaba a molestarme, salí molesta a la cocina.

—Bonita, tranquila, no te enojes... —Hunter me siguió hasta la cocina y me detuvo. 

—¡Te dije que tenemos que hacer algo y lo haremos Hunter! —le grité.

—Estás así porque en el fondo sabes que no podemos hacer mucho por ella, dale, grítame, dime lo que necesites, pero sácalo... que si te quedas con ello es mucho peor —yo tomé aire, me duele admitirlo pero Hunter tenía razón, solo estaba molesta porque sabía que no podía hacer nada por mi amiga. 

Hunter me abrazó, yo en serio estaba furiosa, pero Hunter no se quitó hasta que me tranquilicé, si soy sincera jamás esperé que Hunter fuera a ser la persona que lograría ayudarme con esto.

(POV de Ragnar)

Fui a la habitación y mi princesa no estaba ahí, la busqué por todos lados, comenzaba a preocuparme ya que no tenía ni la menor idea de en donde se encontraba, no sé si algo le pasó y yo no estoy ahí con ella. Comencé a buscar por mil partes pero nada, no la encontraba, me regresé a la cocina y ahí la vi, en los brazos de Hunter, sentí como mi corazón se rompió... quería irme, pero simplemente no podía moverme, en el fondo esperaba a que ella se separara de él, pero eso no pasó, sabía que decirle lo que sentía solo alejaría más, sé que fui demasiado directo pero en serio dudo que yo salga de aquí con vida. Regresé con el resto a la sala, me senté y ahí me quedé, ambos entraron a la sala, ella tomó asiento a lado mío, sin decir nada me levanté y me senté en otro lado, podía sentir su mirada, pero no iba a voltear, me enojaría con ella cuando no tengo el derecho alguno de hacerlo.

—¡Ragnar! —Rita me tomó del hombro.

—Lo siento, ¿qué ocurre? —pregunté.

—Vamos al sótano, tenemos que jugar un juego ahí —ambos nos levantamos y fuimos con el resto. 

—Si, lo siento —llegamos y Hunter y mi Paola estaban juntos, Rita me tomó de la mano pero yo la quité. 

 —Ven, hay que sentarnos por aquí —dijo Rita, yo me senté a lado de Junior. 

Me senté y traté de concentrarme pero solo podía pensar en ese abrazo, no sé si se besaron, si solo fue un abrazo. Como siempre yo creando escenarios falsos.

—Bueno, comenzaremos con el juego, el día de hoy van a jugar uno de mis juegos favoritos, se llama "adivina de quien es el secreto",  seguramente se estarán pregunta como se juega, bueno, lo divertido de este juego es que su secreto más grande será revelado, espero que sean tan unidos cuando sepan los secretos de cada uno, ¿comenzamos? —las luces se apagaron y se volvieron a prender, en medio de nosotros habían 5 objetos, un auricular auditivo, una foto de mi Paola, un auto, una ficha de hospital y una foto que no estaba muy clara. 

—Okay esto es difícil, ¿qué tiene que ver esas cosas con el secreto de alguien? —preguntó Rita.

—Tienen solo 12 minutos para que adivinen de quién es el secreto, después de esos 12 minutos de que lo platiquen y saquen conclusiones tendrán que decir en voz alta de quien creen que es el secreto. Y para la persona de la que es el secreto, puedes mentir con tal de que no descubran tu secreto, o si eres muy valiente lo puedes confesar. Aclararé que si decides mentir y logras hacer que todos piensen que ese secreto es de alguno, menos tuyo, entonces cuando voten todos por alguien más que no seas tú, significará que tu secreto estará salvada para siempre... el tiempo corre.

—Rag-

—Ahora no Pao —me levanté y me alejé lo más que pude de los demás, pero solo por unos segundos, volví y me senté con ellos, el reloj corría, ya solo teníamos 7 minutos para adivinar de quien era el secreto, yo no podía concentrarme, mi cabeza seguía con los mismos pensamientos de hace rato.

—Okay, primero tenemos a Pao y hay un auto, ¿recuerdas haber visto este auto antes? —le preguntó el imbécil de Hunter.

—Si de hecho si, íbamos Ragnar y yo al cine... pero...pero no recuerdo nada de esa salida, lo último que recuerdo es que Ragnar y yo íbamos cruzando la calle, pero... per-

—¡¿Pero qué?! —gritó Illy.

—Pero no sé, ese día le marqué a Ragnar y resultó que si teníamos planeado ir al cine pero se canceló porque me sentía mal y él tuvo unos asuntos fuera de la ciudad... 

—¡Genial, acabas de quitarnos 3 malditos minutos con tu estúpida historia inservible! —le gritó molesta Illy, volteé a ver el reloj y solo teníamos 4 minutos.

—Lo siento, pero Hunter preguntó —agregó Paola.

—Ahhh claaaaro, Hunter —se quejó Illy.

—Cálmate Illy —agregó Efraín (también conocido como Junior).

—¿ME CALMO? ¡TENEMOS 3 PUTOS MINUTOS PARA RESOLVER ESTO O ESTAMOS TODOS JODIDOS! —gritó Illy.

—Es mío —dije en tono calmado.

—Genial ahora este imbécil va a quitarnos otro minuto —dijo Hunter.

—Hunter, déjalo hablar —le dijo mi princesa.

—Pues no le estoy tapando la boca , ¿o sí? —dijo Hunter molesto.

—En serio eres tan idiota Hunter, ahora solo tenemos un minuto gracias a tus estúpidas peleas, que por cierto, son innecesarias —agregó Dylan.

—¡Innecesario lo que este imbécil vaya a decir!

—Carajo Hunter cállate por un segundo. Es... es- ese es mi secreto...