Han pasado algunas semanas desde el encuentro de Naruto y la princesa Attea quien fue derrotada junto a toda su flota y ahora, el rubio se encontraba dirigiéndose hacia la Tierra en su nave personal de color rojo con líneas amarillas.
Y esto se debía a que ya había llegado el momento de presentarse ante el usuario del Omnitrix."Haaa…cuanto faltara para llegar a la Tierra" se preguntó Naruto estando sentado mientras le hacía modificaciones a una tabla.
Había cambiado y ahora se encontraba sin capucha y se podía ver como su pelo rubio había cambiado levemente con mechones y algunas puntas de color carmesí, vestía una polera manga corta de color negro y encima una chaqueta azul oscura que tenía dos diseños de remolino en su hombro de color rojo, pantalones negros y zapatillas blancas con ligeros toques negros en los bordes, además de llevar un cinturón donde sostenía una bolsa con un diseño de un rostro, pero con ojos de botones cocidos y una boca deforme.
"Creo que faltan una hora…toma…" contesto Kurama mientras utilizaba su cola y le pasaba un atornillador el cual Naruto acepto y la agarro para apretar un tornillo de su tabla aérea.
"Mmm…una hora…siempre es largo este viaje a la Tierra…aunque, vale la pena ir…y listo…creo que lo modifique" dijo Naruto con una sonrisa colocando la tabla encima del suelo y apretara un botón donde absorbió un poco de chakra y logro crear un poco de hielo para su felicidad.
"Funciono!...ahora podre crear un camino de hielo cuando yo quiera!" grito con alegría mientras colocaba un poco de chakra en la tabla.
"Creo que el núcleo de hielo más tu chakra funcionaron tal como pensaste y si el chakra se acaba puedes recargarlo con tu propio poder e incluso si no lo tienes, tiene una batería Galvano que posee energía residual de la luz solar en caso de emergencias...pensar que tu idea funcionaria" dijo Kurama bostezando mientras Naruto terminaba y agarraba la tabla.
"¡Oye, ofendes! ...cuando he fallado en algunas de mis ideas!" Pregunto Naruto bastante ofendido.
"Que hay de cuando intentaste crear una caja para guardar todo y termino casi creando un agujero negro" dijo Kurama con mirada aburrida.
"No seas tan exagerado…no fue un agujero negro, solo fue una explosión" dijo Naruto de manera defensiva.
"Y qué hay del incidente la tabla que destruyo el laboratorio de Azmuth" pregunto Kurama.
"Fue reconstruido y no era para tanto…solo destruí la mitad del laboratorio" dijo Naruto.
"Y qué hay de la modificación del piloto automático!" pregunto Kurama indicando a la nave misma que estaba en piloto automático.
"Funciona o no…olvídate de cuando nos quedamos varados…al final, sobrevivimos" dijo Naruto mientras golpeaba la bolsa y la boca que tenía la abría para que guarde su tabla.
"¡Y es por eso mismo es que temo que nos quedemos varados otra vez, idiota!" grito Kurama mientras Naruto se tapaba sus oídos por el grito del zorro gruñón.
"Tienes que gritar tan fuerte…contrólate, gruñón" dijo Naruto mientras veía a Kurama gruñirle, pero luego de unos segundos finalmente suspiro.
No había caso….
Ha pasado tres años desde que Naruto y el, de forma involuntaria, dejaron el planeta el cual Azmuth llamo Terra debido al gran parecido que tenía al planeta donde se dirigían llamado Tierra.
Las más grandes diferencias que tenían estos dos planetas es que la tecnología de Terra era muy precaria y que los humanos podían utilizar el chakra mientras que en la Tierra los humanos no podían utilizar chakra y poseían habilidades casi al nivel de un campesino, pero con tecnología mucha más avanzada, aunque comparada con la tecnología de otros planetas, igual era bastante "obsoleta" y "precaria".
Por eso, cuando Naruto se unió a Azmuth y se convirtió en su guardaespaldas y asistente fue bastante difícil mantenerlo controlado ya que veía muchas cosas nuevas que jamás había visto en su vida lo que hizo que Azmuth no tuviera más opción que tomarse su tiempo para enseñarle todo sobre la tecnología que jamás había visto en su vida.
Lentamente y gracias a sus clones, Naruto empezó a aprender sobre la tecnología que existía lo que hizo que poco a poco le empezara a gustar y un día, sin nada más que hacer en la nave con Azmuth, empezó a crear uno que otro objeto.
Aunque por su desconocimiento de varias cosas, fracaso espléndidamente.
Pero eso no quiere decir que se rindió…
Siguió intentándolo haciendo bastante desastre hasta que Azmuth decidió enseñarle sobre la Tecnología antes de que terminara destruyendo la nave en donde se encontraban por ese tiempo.
Resulto que Naruto tenía una capacidad de aprender rápidamente incluso sin los clones, aunque cuando se trataban de teorías era un desastre, pero eso no lo hacía menos inteligente, simplemente no podía mantenerse concentrado y era mucho mejor aprendiendo con la práctica.
Azmuth dijo que Naruto poseía problemas de atención y era muy hiperactivo, por lo que, al empezar a crear sus propios aparatos, concentro toda esa energía en esa actividad.
Al final y gracias a la guía de Azmuth, Naruto logro convertirse en un experto inventor que podía estar a la par de los Galvanos.
No era un completo idiota como todos pensaban en la aldea.
Su inteligencia era superior al promedio de los seres humanos, pero siempre sus primeras ideas terminan en un desastre total.
No sabía cuántas veces había oído las peleas entre Naruto y Azmuth.
Pero eso no importo demasiado ya que Naruto había encontrado un buen "pasatiempo" para pasar el tiempo en la nave con Azmuth y a medida que avanzaba y creaba, ese pasatiempo se convirtió en su profesión.
Tanto Azmuth como Kurama sabían que Naruto se había concentrado en la tecnología para pasar las penas de lo que le hicieron en su pueblo y la decisión de abandonar su propio planeta.
Al principio sonreía, pero era una sonrisa fingida, pero a medida que Azmuth le enseño sobre la tecnología, esa sonrisa fue más honesta hasta que al final, sus penas se fueron.
Con el tiempo, siguió aprendiendo no solo sobre la tecnología, sino que de los demás planetas y seres que viven en este gran universo hasta que un día, Azmuth, al ver cómo era Naruto y como siguió su vida después de todo, se decidió hacer algo y confiarle una tarea que solo Naruto podría realizar…
Ser el siguiente sucesor del Omnitrix en caso de que el actual portador fallara o ser el maestro del portador.
Azmuth convivio por mucho tiempo con Naruto y aunque admitió que era el chico más problemático e idiota que jamás había conocido, su personalidad de seguir adelante sin importarle nada, sin una pisca de querer vengarse contra su propia gente, por su gran alegría que transmitía y por encima de todo, su fuerte corazón, se decidió por entrenarlo y revelarle los secretos del Omnitrix y de paso, construirle el dispositivo que servía para entrenar al sucesor del Omnitrix en caso de que el original fallara, el Limitrix.
El Limitrix era un dispositivo muy parecido al Omnitrix ya que poseía la capacidad de transformar a su usuario en cualquier alienígena que encuentre disponible en el dispositivo.
Además, poseía funciones básicas como el traductor universal, algo muy esencial para viajar por el universo y siendo la razón principal por la que Azmuth pudo hablar con Naruto el día en el que se conocieron.