Creo en ti - Carlos Acevedo

21.

MARIAN

Torpemente intentaba desabotonar la camisa que portaba Alessio.
Un beso en mis labios,otro más por mi erizado cuello; sentí como ambos nos separábamos abruptamente.
La imagen de Carlos apareció en mi mente.

Alessio negaba seguidamente.

-No podemos hacer esto.

Sus palabras me cayeron como un balde de agua congelada.

Me hicieron recapacitar aún más.

-En tú mente y corazón solo existe él—resopló-
No quiero tener sexo con la chica que más quiero,admiro y respeto.—El pudo descifrar mis expresiones,en cambio yo las de él no;siempre tan frío y calculador— Ambos nos tenemos un cariño de amistad,un cariño sincero y eso lo aprecio,no quiero arruinar esto solo por una noche de unas cuantas copas y errores.

-Yo.... Lo siento—La vergüenza reinaba el ambiente— No tengo idea de que estoy haciendo con mi vida,estoy siendo muy inmadura,no puedo tomar una decisión correcta,no puedo seguir sin él.
—dije estrellando la copa de champagne contra el azulejo— es muy jodido depender emocionalmente de una persona que muy probablemente te está olvidando.

Alessio no habló.
Sólo se acercó y me abrazó.
Me obsequió un abrazo que tanto necesitaba.
Un abrazo cálido y sincero, me sentía protegida,querida y escuchada.

Alessio era una gran amistad.
Era un gran hombre.

[...]

-Tengo que irme—hablé encendiendo la pantalla de mi celular para ver la hora— Ya es muy tarde.

-No dejaré que te vayas sola,ambos no estamos en condiciones de salir o manejar.—Habló Alessio con los ojos entrecerrados a causa del sueño— Quédate aquí.

-No quiero causar más molestias. —dije tímida—

Timidez que no era válida ya que hace menos de dos horas estábamos a punto de tener relaciones.

¡Patética,Marian!

-No eres ninguna molestia—habló con sinceridad— dormiré en el sillón para que duermas cómoda.

-De ninguna manera,dormirás conmigo en el colchón— pausé viendo cómo se negaría— He dicho.

Asintió riendo.

-Te quiero Marian,si Carlos te deja ir,será el hombre más idiota que exista.

Negué en repetidas ocasiones,de una u otra forma pensaba lo mismo,aunque me doliera.

[...]

-Buenos días Mar.

Escuché a Alessio decir a un lado mío.

Sonreí ampliamente—Buenos días.

-Faltan cinco minutos para que sean las dos de la tarde.

Dijo burlón mientras yo me levantaba rápidamente acomodando mi cabello y lavando mi rostro.

-¡Es tardísimo! —hablé mientras miraba las llamadas perdidas de Ethel.

[...]

-¿Dónde te habías metido mujer? nadie sabía dónde estabas,Carlos estaba muy preocupado

algo dentro de mi se removió,le seguía importando a Carlos -Estaba con Alessio,pasé la noche.

-¿Pasaste la noche con Alessio? —resonó a suave voz de Carlos por el departamento de Ethel—

-No,dormí en su departamento solo por qué me pasé de copas,solo eso.

—El asintió mientras Esthela se removía incómoda en la silla—