Say that you love me, novela Dietini (Completada)

Capítulo 15, Love me like you do (hot)

Martina se dirigió rápidamente a el asiento que estaba a lado de Diego, justo cuando iba a sentarse Diego la detuvo.
-Martina, está ocupado este asiento- aclaró Diego
-No quieres que me siente con vos?- preguntó nerviosa
-Está ocupado, Josi siéntate- gritó Diego haciéndole señas a la bailarina
Martina indignada, bajó la cabeza y furiosa se sentó lo más lejos posible de Diego.
-Sucede algo? - preguntó Samu, el compañero de asiento de Martina
-No, pero este mundo está lleno de idiotas- bufó
-Lo dices por alguien en especial?- preguntó Samu sin comprender
-Sí pero no quiero hablar de eso Samu, mejor contame cómo te sentís en la gira- sugirió Martina
-Excelente, me encanta conocer lugares nuevos- rió Samu
Los Violettos aterrizaron en Suiza, emocionados bajaron del avión por la tarde.
Diego había estado llamando por su celular en el hotel, Martina indignada fue con su amiga Mercedes.
-Vos sabes que le sucede a Diego?- preguntó en voz baja
-A qué te refieres Tini- preguntó aguantando la risa
-Está muy raro-señaló a Diego
-Así son los hombres, voy a registrarnos - sonrió Mechi
Martina resignada acompañó a Mercedes a registrarse, Diego le sonrió pero ella lo ignoró. Las chicas subieron a su habitación.
-Tini, espérame un momento iré con Jorge- exclamó Mercedes
-Dale amiga, desempacaré mis cosas- sonrió Martina
Mercedes salió del cuarto y se dirigió con Diego, quien la esperaba en el lobby.
-Qué pretendes Chachi, Martina está furiosa con vos- preguntó inquieta Mercedes
-Estaba arreglando todo, conseguí rentar un boliche para nosotros, necesito que la lleves a esta dirección en 15 minutos- explicó Diego
-Perfecto- sonrió Mercedes
-Le dije a Jorge que metiera mis cosas al cuarto de Martina, así que toma la llave de nuestra habitación para que cambies tu valija de una vez - se despidió Diego
Mercedes subió rápido al cuarto con Martina, entró y cerró la puerta muy fuerte, asustando a Martina.
-Epa! Qué pasa?- preguntó alarmada
-Jorge! Es un idiota- gritó
-Qué te hizo Mechi!- exclamó asustada Martina
-Estaba hablando con Stephie, le dijo que la extrañaba- mintió Mercedes
-Me va a escuchar ese mexicano!- exclamó Martina
-No vale la pena, mejor acompáñame a dar una vuelta para distraerme- pidió Mercedes
-Con gusto amiga, esos dos no nos merecen!- afirmó Martina pensando en Diego
Martina y Mercedes salieron del hotel, Mercedes recibió un mensaje de Diego, el cual decía que ya estaba en el boliche así que apresuro el paso.
-Espera Mechi vas muy rápido - suplicó Martina
-Lo siento Tini, cuando estoy molesta suelo caminar rápido - aclaró nerviosa
Llegaron a un boliche, Martina no entendía nada.
-Qué hacemos aquí?- preguntó confundida
-Quería jugar boliche, es mejor imaginar que los pinos tienen la cara de Jorge- mintió nuevamente
-Como digas- respondió Martina
Ambas entraron al lugar, Martina no podía creer lo que veía, ahí estaba Diego sosteniendo un hermoso ramo de rosas blancas, rosas y rojas.
Martina volteo a ver a Mercedes.
-Vos lo sabias!- gritó de la emoción
-También yo!- salió Jorge riendo, tomando de la cintura a Mercedes
-Sos lo peor Dominguez- corrió a abrazarlo
-Antes que comiencen a besarse nos vamos, suerte Chachi- rió Jorge y salió del boliche con Mercedes
Martina y Diego compartieron un abrazo, Diego tocó la nariz de Martina y comenzó a reír
-Muy gracioso vos, hiciste que te odiara- negó Martina con la cabeza
-No quería que sospecharas nada, mañana es tu cumpleaños y sé que no podremos pasarla juntos, estarás ocupada y yo no podré fingir que te quiero como amiga- tomó las manos de Martina
-Diego yo- intentó hablar Martina
-Quiero pasar lo que queda de este día contigo, celebrando tu cumpleaños enana- interrumpió Diego
-Es el mejor regalo del mundo-exclamó emocionada
Los dos se miraron, el tiempo se detuvo y sus bocas comenzaron a acercarse lentamente, Diego acarició cuidadosamente la mejilla de Martina, sus manos se detuvieron en su cuello y sus labios encontraron los de ella. Este beso era muy diferente a los que ya estaban acostumbrados a recibir, éste fue con ternura y con amor. Al finalizar sus narices se rozaron cariñosamente.
-yo si que te quiero Martina- susurró sobre sus labios
-Yo también te quiero - sonrió
Diego tomó de la mano a Martina, fueron por zapatos para comenzar el juego de boliche. Martina era realmente buena en el juego así que Diego la distraía al tirar, pues la abrazaba, le besaba el cuello y soplaba en su oído. Martina hacía lo mismo con Diego, ambos estaban muertos de risa y parecían unos niños.
El juego termino con la victoria de Martina, Diego únicamente reía por la manera en que Martina bailaba festejando su victoria.
-Enana nos tenemos que ir ya!- exclamó Diego viendo la hora
-Pensé que querías la revancha- bufó Martina
-No arruines tu próxima sorpresa - caminó hacia ella depositándole un beso en los labios
Martina asintió, tomó su ramo de rosas y salió del boliche guiada por la mano de Diego.
-Iremos al hotel verdad?- preguntó Martina
-Shh!- la intentó callar Diego
-Este es el camino hacia el hotel, creo que ya sé lo que quieres Diego, también yo lo deseo- se sonrojó Martina
-Shhh- volvió a callarla , aguantando la risa
Llegaron al hotel, entraron al elevador pero Diego oprimió el botón que llevaba a la terraza.
-A dónde vamos?- preguntó Martina curiosa
-Aguarda y verás - respondió Diego tomando su cadera
-Claro que puedo esperar- rió Martina y comenzó a apretar todos los botones del elevador
-Sabes, los elevadores tienen algo excitante no lo crees- exclamó con la vos ronca Diego
Martina no pudo responder el comentario de Diego, pues él se abalanzó contra ella, pegándola en un rincón del elevador, devorando su boca. Martina sintió el corazón palpitar velozmente, devolviendo los mordiscos que Diego le daba a sus labios. Martina tomó del cuello a Diego, Diego pegó su cadera con la de ella, rozando suavemente sus partes, ambos soltaban jadeos sin parar. Martina acariciaba el cabello de Diego mientras él repartía besos por todo su cuello.
Sonó la campanilla del ascensor interrumpiendo el ambiente, las puertas se abrieron ambos se miraron y comenzaron a reír. Diego tomó a Martina de la mano y ambos salieron del ascensor.
-Buenas noches- los saludó un mesero
-Buenas noches, tenemos reservación - exclamó Diego roncamente
-A qué nombre?- preguntó el mesero
-Diego Dominguez- bufó , intentado controlarse
-Bienvenidos, acompáñenme por aquí- indicó amablemente
Diego y Martina acompañaron al joven hasta al final del restaurante, donde una mesa estaba separada de todas, decorada especialmente para ellos. Martina miró a Diego tiernamente pues no podía creer esos pequeños detalles que tenía con ella.
-En un momento estaré con ustedes- se marchó el joven
Diego retiró la silla, Martina se sentó y Diego la acerco a la mesa. Tomó su lugar junto a ella.
-Espero que te guste la cena- le dedicó una sonrisa
-No tenías porque haberte molestado Diego, con tu presencia me basta- sonrió Martina
-Yo quería hacerlo- afirmó tomando sus manos
-Es precioso el lugar- exclamó Martina, contemplando las estrellas
-No, tu eres preciosa- se ruborizó Diego
-Sos lo mejor que me ha pasado- dijo tiernamente Martina, robándole un beso a sus labios
La cena transcurrió perfectamente, Martina y Diego entre ratos se robaban besos y caricias. Diego ordenó el postre.
-Estás loco, no puedo comer más- exclamó Martina
-Después tendrás un enorme apetito- guiñó el ojo Diego
El mesero llegó con un pedazo de torta de chocolate, con una vela encendida.
-Sé que aún no es tu cumpleaños, pero felicidades princesa- exclamó Diego y comenzó a cantar el feliz cumple a Martina -pide un deseo enana- rió Diego
Martina pensó en su deseo, cerró los ojos y sopló la vela con entusiasmo deseando que se hiciera realidad.
Martina y Diego abandonaron el restaurante, ambos se dirigían al cuarto de Martina, ella aún no sabia que Diego dormiría en su habitación.
-Gracias por la velada, estuvo increíble- susurró Martina
-Aún no termina- exclamó Diego
-A qué te refieres?- preguntó Martina
-Abre la puerta o pueden descubrirnos - susurró Diego
Martina abrió la puerta con cuidado, buscando con la mirada a Mercedes, sin embargo lo único que encontró fue una nota en su cama:
>Qué te diviertas amiga
Martina comenzó a reír -Lo planeaste todo - entornó los ojos
-No me culpes por querer estar contigo- alzó los hombros Diego
-Ponete cómodo - exclamó Martina y se metió en el baño
Diego se sentó en el borde de la cama y retiró su remera, esperando a que Martina saliera del baño. Había transcurrido 20 minutos, Diego ya se encontraba acostado viendo Tv, la puerta del baño se abrió.
Martina salió caminando lentamente, portando una bata entre abierta color rojo carmesí, unas bragas delgadas negras y un corpiño del mismo color. Diego apagó la televisión rápidamente, se sentó nuevamente en el borde de la cama.
Martina comenzó a cantar en un susurro la canción de Love me like you do, Diego no podía quitarle la vista de encima, Martina se acomodó frente a él. Las manos de Diego se colocaron en la cintura de Martina, se levantó de la cama pegando su cuerpo al de ella.
-Porqué estás vestida así preciosa?- preguntó con ternura
Martina suspiró- no te parece sexy?- preguntó avergonzada
- Me parece tierno- susurró Diego y comenzó un beso lento
La temperatura fue subiendo, las manos de Diego retiraron la bata de Martina, sus manos se colocaron en sus glúteos y la pegó hacia él.
-Esto es tan extraño- susurró Diego riendo sobre sus labios
-Por qué decís que me veo tierna?- preguntó entre risas Martina
-La idea de que te pusieras esto para mí me parece tierna, no algo erótico- exclamó Diego en un susurro
Martina sin comprender las palabras de Diego agachó la cabeza algo avergonzada
-Serás una nena, pero eres mi nena , princesa- susurró Diego
Martina levantó la cabeza, encontrando los ojos esmeralda clavados en ella
-Enserio me gustas mucho Diego- confesó Martina
-Tu también me gustas, más bien me encantas preciosas- confesó Diego tomando con sus manos las mejillas de Martina tiernamente
Sus labios volvieron a unirse, está vez en un beso desesperado con mucha pasión , Diego fue recostando a Martina con suavidad en la cama, Diego quedó encima de ella, fue retirándole lentamente la ropa interior, Martina desabrocho el pantalón de Diego y retiró sus bóxers, ambos quedaron desnudos.
El besó se volvió aún más salvaje, Diego frotó su cadera contra la de Martina haciendo contacto con su feminidad, Martina soltó un gemido.
La alarma de Diego sonó, indicando que era el cumpleaños de Martina, frenó el movimiento y comenzó a besar el rostro de ella.
-Feliz- depositó un beso en sus labios
-Cumple- nuevamente besó sus labios
- Preciosa- besó su cuello
-Te-volvió a robarle un beso a sus labios
-Quiero- finalizó con un beso más
Comenzaron nuevamente a besarse, Diego colocó un preservativo y comenzó a besar su cuello.
-Estás lista princesa?- preguntó susurrando
Martina asintió, se aferró a la espalda de Diego, con mucho cuidado y lentamente Diego entró en ella, ambos soltaron suspiros. Comenzaron a moverse lentamente, la velocidad iba aumentando al igual que los jadeos de ambos, perdidos por el deseo, la pasión y el amor que ambos compartían. Ambos alcanzaron un orgasmo y cayeron rendidos en la cama, con las pocas fuerzas que quedaban en el cuerpo de Diego logró abrazar a Martina, luchando con sus párpados que le pesaban contempló su rostro.
-Buenas noches preciosa- exclamó en un bostezo
-Buenas noches mi amor- suspiró Martina y cayó dormida
A la mañana siguiente, ambos se encontraban dormidos aferrados el uno al otro. La alarma de Diego sonó pero fue imposible despertarlos, la puerta de su habitación se abrió.
-Oh Dios mío!- gritó Mercedes
Diego abrió perezosamente sus ojos, mientras Martina aún seguía dormida
-Joder! se nos ha hecho tarde!- exclamó apunto de levantarse
-Si queres que te vea desnudo levántate, si no ponte esto- rió Mercedes aventándole una toalla
Diego se la colocó rápidamente en la cintura, se moría por darle un beso de buenos días a Martina y estaba apunto de hacerlo pero Mercedes lo fulminó con la mirada obligándolo a irse rápidamente para no levantar sospechas
-Buenos días Mechi- rió Diego y salió de ahí
-Martina, levántate en este momento! - la sacudió bruscamente
-Qué sucede- se quejó
-Tenemos show, los chicos ya están desayunando y van a levantar sospechas- exclamó alterada
-Joder- exclamó Martina levantándose
-Anda al baño Tini- río Mercedes -por cierto Diego está muy bueno- se ruborizó la rubia y Martina la fulminó con su mirada
Diego entró rápidamente en su habitación, tomó su celular sonrió y escribió un tweet para Martina, se bañó y al salir de la ducha encontró varias notificaciones mencionándolo con el hashtag #Dietini, rió y bajó a desayunar.
Martina bajó a desayunar, todos cantaron el feliz cumple, Diego estaba ya sentado con el resto de los chicos, observándola con una sonrisa.
El show empezó más temprano pues los chicos le habían organizado una fiesta sorpresa a Martina en el hotel con sus amigas. En el show el público le cantó el feliz cumple, Martina se emociono aún más cuando sus mejores amigas de Buenos Aires pasaron al escenario, éste sin duda era el mejor cumpleaños para ella.
Al finalizar el show Mercedes se encargó de llevar a Martina al salón de eventos, las luces se encontraban apagadas, al momento de abrir la puerta todos le cantaron el feliz cumple. Mercedes abrazó con ternura a Martina, el DJ comenzó a tocar.
Había un fotógrafo privado en la fiesta, Jorge y Mercedes aprovecharon para sacarse fotos riendo, Diego se quedó observándolos deseando que pudiera estar así con Martina.
La buscó con la mirada, la encontró con sus amigas bebiendo cerveza, deseaba tanto estar con ella pero como le había dicho a Mercedes, el sabía que estaría ocupada.
Martina se encontraba festejando con sus amigas la estaba pasando de maravilla sin embargo extrañaba a Diego, también se la había hecho raro el que Peter no le había mandado algún texto.
-Chicas regresó en un momento iré al tocador - exclamó alegre
Martina se dirigía al baño pero interrumpieron su camino jalando su brazo
-Vos? no puedes vivir alejado de mí?- preguntó riendo Martina
-No, después de todo lo que sucedió anoche- susurró Diego
-Fue muy especial- admitió Martina
-Muero de ganas por darte un beso- susurró en su oído
-También yo Diego pero acá nos pueden ver- bufó Martina
-Eso se puede arreglar preciosa- tomó la mano de Martina y se ocultaron atrás de un pilar
-Esto es arriesgado Chachi- suplicó Martina
-Felic cumpleaños princesa- tomó la mejilla de Martina y besó sus labios
Ambos se robaban besos, estaban disfrutando del pequeño momento que estaban teniendo pues ya todos se encontraban algo borrachos y en la pista de baile, muy lejos de ellos.
- Acepta que extrañabas mis besos- depositó un beso en sus labios Diego
-Tú morís por los míos- exclamó Martina robándole un beso a Diego
El coreógrafo de los Violettos no podía creer lo que veía, Diego y Martina estaban haciéndose mimos y besándose, se dirigió enojado a la puerta del salón dispuesto a abandonar la fiesta pues no entendía el porque Martina estaba traicionando a Peter y Diego a Clara.
-Sergio, has visto a mi novia?- preguntó una voz conocida
-Yo, escucha- tartamudeo Sergio, pensando en delatar a Martina
-Todo bien amigo?- preguntó Peter
-Está detrás del pilar cerca de la barra- bufó Sergio y salió de ahí
-Gracias- gritó Peter
Peter saludó a las amigas de Martina primero pues ellas lo habían invitado, dejó el regalo de Martina sobre la mesa y se dirigió hacia el lugar que Sergio le había dicho para saludar a su novia.
Se llevó una gran sorpresa al ver como Diego tomaba el rostro de Martina y comenzaba a besarla, Peter apretó los puños de la furia que comenzaba a sentir, sin pensar se dirigió hacia ellos y derribo a Diego de un puñetazo en la mejilla
-Suelta a mi novia pendejo- gritó Peter
-No Peter detente- sollozó Martina al ver como Peter se abalanzaba contra Diego
Diego estaba en el suelo, Peter se encontraba arriba de él no podía liberarse pues Peter repartía golpes por todo su cuerpo, sentía el estomago arder por los golpes, el ojo izquierdo comenzaba a cerrarse , sentía un pequeño liquido recorrer sus labios.
-Peter lo vas a matar por favor- gritaba Martina desesperada
Diego giró la cabeza hacia Martina le dedicó una sonrisa, sintió nuevamente el puño de Peter chocar contra su barbilla y comenzaba a sentir un gran cansancio
-Suéltalo!- gritó Jorge abalanzándose contra Peter
Martina se dirigió con Diego, aterrorizada por lo que contemplaba, su rostro estaba muy lastimado
-Perdóname mi amor perdóname- sollozó
Peter se levantó, empujó a Jorge y jaló a Martina bruscamente del brazo
-Crees que soy idiota acaso?- preguntó furioso
-No pero un salvaje si- limpió sus lágrimas
-No puedo creer que ese imbécil te besara Martina, por qué no lo empujaste- gritó
-Yo quiero a Diego, perdóname Peter- sollozó
-Terminamos- fulminó Peter con lágrimas apunto de salir

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Hola! Les dejo la canción en el capítulo que estaba cantando Tini en este capítulo, también recomiendo una novela Jorcedes llamada sientes lo mismo, si son Jorcedes léanla :) . Las novelas de la diosa de Vicky también son lo mejor fcodieletta ;) así está en wattpad