Las realidades del amor.

Capítulo 7.

El siglo XXI ha distorsionado la idea sobre el amor.
No existe.
Es una pérdida de tiempo.
Es mentiroso y te engaña.
Te hace débil ante la otra persona.

Algunos dicen que lo más conveniente es tener relaciones, pero sin las "ataduras".

¿Ataduras?
¿Qué?
Si estas con la persona que vos quieres las ataduras no existen.
El amor no te cierra, la persona no te aísla.
Vos lo haces.
No se confundan.
Si son personas que viven teniendo relaciones con otras, ni conviene entrar en una relación a menos que involucren sentimientos.

Porque no todas las personas piensan solo en tener sexo.

El otro día charlando con unas amigas quedaron anonadadas ante mi forma de amar.

Entonces se puede decir que ellas son de la "LA NUEVA ESCUELA".
Donde los hombres te usan para tener relaciones.
A las mujeres no les importa que sea por un rato.
El amor no existe.
Simplemente hay un par de risas, intereses físicos entre ambos y eso es suficiente.
Hombres y mujeres son objetos sexuales.
Porque a veces los hombres creen que usan a las mujeres y las mujeres, en realidad también se aprovechan de los hombres.
Ambos sexos tienen esa estúpida idea en su cabeza.

Y yo obviamente soy de "LA VIEJA ESCUELA".
Amo el amor.
Creo en el amor y sé que existe.
Soy del tipo de persona que puede dar cariño y roses calientes.
No tendrás mi cuerpo a menos que tengas una confianza plena.
Porque, aunque no lo crean.
La confianza.
Sentirse bien y cómoda, es saber que es tu lugar.

Te hace sentir especial.
Te hace sentir único y totalmente real.
Antes de tener relaciones sexuales hay que escuchar y hablar lo que más se pueda.
Mientras más conozcas a una personas más ganas, y más tiempo esperaras para que ese momento ocurra.
Las personas de la vieja escuela, queremos saber que el otro realmente te ama, te quiere o aunque sea te adora.
No necesariamente tiene que decirlo.
Las demostraciones dicen mucho más que una palabra.

¿Y cómo hace eso?
Mira cada cosa de la persona.
Observa lo que hace.
Y lo que no.
Como se expresa, y que es lo dice primero.
Si te conoce.
Si sabe lo que te gusta.
Si siempre está encima tuyo porque quiere mimarte o simplemente ese humano quiere calor.

Una persona de la vieja escuela.
No desea algo pasajero.
Ni tampoco de unos meses a pura relación sexual.
La verdad.
Si uno quiere eso te lo da cualquiera.
El hecho de estar a tu lado porque le gustas y se siente acompañado.
Esa es una idea totalmente distinta

Aunque existe la combinación de ambos.
Y eso se convierte en algo totalmente especial.

Al amor no hay que acomodarlo para hacer el menor esfuerzo de parte de uno.
Porque eso es lo que hacen.
Lo moldean a su comodidad.
Vivas más la vida o menos, no hay que desmoralizar al amor.
Hay una forma de amar, y no tiene sentido hacer ideas que no son.

Vieja escuela o nueva escuela. El sexo tiene que estar.
¿Saben por qué?
Es el último y el primero, pero siempre el más importante.
Llega el punto que cuando encuentras a esa persona indicada, los de la NUEVA ESCUELA comienzan a soñar y los de la VIEJA ESCUELA empiezan a gozar del mismísimo acto sexual.
Es legal.
Es la realidad.

El sexo nos puede a todo el mundo, cuando aquella persona llega.
Con un simple toque te desarma.
Y ahí es donde tienes que quedarte.
Seas de la escuela que seas.