capítulo único

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Después de tantos años, se había acostumbrado a esas palabras de Levi, a esas miradas que le decían los sentimientos que su boca no podía expresar. Y es por eso que ahora mismo estaba seguro de que no quería decir lo que dijo con ese tono, sabía que solamente mantenía su semblante como Capitán de la Legión, y no le recriminaba en absoluto, ni estaba molesto por ello.

Ese día en específico, se sentía más como Erwin Smith, y no como el Comandante, incluso si estaba en lo que probablemente era la misión más importante de toda su vida; y aún así, no podía pensar en algo más, o en alguien más. Veía al resto de sus soldados, quizás ninguno de ellos estaba listo para llevar a cabo la orden que les dió, no los culpaba; pero incluso eso no le provocaba la mismo culpa de siempre. Estaba completamente desconectado.

Tampoco podía concentrarse en su sueño, en su padre, en la razón que lo había llevado a enlistarse en la milicia en primer lugar, lo que lo había mantenido vivo por tanto tiempo. Nada de eso estaba en su mente tampoco, no podía ni siquiera pretender que lo estaba intentando. De cierta forma, se sentía culpable por ignorar todo aquello, incluso a sus viejos remordimientos de la infancia.

No estaba completamente seguro de que este fuera su último día, no había nada que se lo pudiera asegurar, pero algo en él le decía que iba a morir una vez que se acercara al Titán Bestia. Le pesaba haberle ordenado a Levi que acabara con esa amenaza y además confiarle la decisión de cómo usar la inyección, pero no confiaba en nadie más para algo tan importante, esperaba que pudiera perdonarlo después por ello, quizás fue demasiado excesivo, y lo sentía tanto.

No le importaba cómo o con quién la usara, eso lo dejaba a su juicio, y sabía que él tomaba las decisiones correctas incluso en los peores momentos, o al menos no dejaba que sus sentimientos interfirieran en su deber, y eso lo calmaba. Probablemente moriría aquí y ahora, y probablemente no iba a resucitar con el poder del titán, pero no le importaba, no tendría rencor sobre ello, porque lo que sí tenía por seguro era que él no sería la única baja importante, ya habían muchas. Pero sabía que el soldado más fuerte de la humanidad sabría qué sería mejor para el futuro.

Eso era todo en lo que podía pensar, todo estaba pasado demasiado rápido, excepto las memorias que tenía de ese pelinegro con ojos metálicos. La vez que lo conoció, jamás podría borrar ese día de su memoria; aún si no se llevaron del todo bien de buenas a primeras y su relación al inicio fue un poco tensa, una vez que aprendieron a confiar el uno en el otro y comenzaron a entenderse, todo fue muchísimo mejor de lo que esperaba.

Era algo que quizás nunca le dijo a Levi, no podía recordarlo en este momento, pero sabe que se prometió nunca casarse porque sabía lo peligroso que era estar en la Legión de Reconocimiento y no quería dejar a nadie esperando por él y causarle ese dolor, pero había roto esa promesa al enamorarse de uno de sus subordinados, del menos expresivo de ellos, y, sin embargo, el más sentimental de todos y el que le proporcionó el mayor y mejor amor que nadie le hubiera podido dar nunca.

Y ahora lo dejaba atrás, estaba fallando todas y cada una de las promesas que hizo en su vida, estaba fallándole a su querido amante y comenzaba a arrepentirse de ello. Aún quería dar marcha atrás y volver con él, al menos para decirle algo más apropiado que un simple "gracias", él se merecía mucho más que eso y no pudo decirlo. Entre más avanzaba, peor se sentía; quería regresar y decirle que huyeran, solamente ellos dos, incluso si eso significaba traicionar a la humanidad y a su deseo de saber lo que había en ese sótano, aún si tomaban más allá de la Muralla María, pero no podía hacer eso.

Quería decirle y repetirle que lo amaba, que todos esos años juntos, confiando, peleando a su lado, y aceptando cada avance o cada derrota, habían sido los mejores de su vida. Tal vez él le había dado una nueva oportunidad y un nuevo significado a la vida de Levi, pero ese hombre le había enseñado a sentir, a confiar, le trajo felicidad y cariño en un mundo tan devastado como el suyo.

Enchanted || Eruri OSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora