"Ryan" Josh Hutcherson & Tú

«Mayday»

-¿Por qué traes comida como si fuéramos a quedarnos un mes en el bosque?- pregunto Ryan al verme subir una caja entera enorme de comida a su auto.

-Escuchame muy bien Fightmaster- entrecerre mis ojos. -Nunca juzgues la capacidad que tengo para llevar comida, la comida es sagrada para mí- dije en un tono medio amenazantes medio divertido.

-Ok, no debí preguntar- Reímos, a esta altura no podíamos enojarnos por nada. -Ademas como si no supiera que comes como si no hubiera un mañana-

-Es que nunca sabes cuándo será tu último día, por eso como todo lo que me sea posible- reí.

-Buen punto- admitió. -Bueno, parece que es todo- cerro la cajuela del auto.

-Si, parece que sí- dije.

-Bien entonces vámonos- respondió.

-Claro solo deja me despido de mi mamá - entre a mi casa para despedirme de mi mamá, era raro porque usualmente ella es la que sale y yo me quedo aquí encerrada, no estar en mi casa será algo raro pero supongo que en algún momento esto iba a pasar.

-Cuidate mucho- mamá me abrazo. -Y mucho éxito- me guiñó pues ya le había comentado de mis planes.

-¡Mayday! ¡Mayday!- oí gritar a Ryan afuera, entro corriendo.

-¿Que pasa?- pregunté asustada. -Parece que viste a un demonio-

-No solo uno, ví a 3, Alejandra, Ana y Giselle vienen para acá- dijo en un tono de nerviosismo pero a la vez algo divertido.

-Ay no- dijimos mi mamá y yo al unisono.

-Mamá necesito que las distraigas, sino no son capaces de llevarnos a la fiesta arrastrando, pero ante todo no digas a dónde vamos a ir- pedí encarecidamente a mi mamá.

-Si hija, yo las distraigo ustedes vayanse ya- respondió.

*Ryan y yo salimos casi volando, encendimos el auto lo más rápido posible y arrancamos pero en el susto tiramos el bote de basura de mi vecino*

-¡Perdón!- grito Ryan al vecino que era un señor de 80 años quien sacudía su mano diciendo "Jóven grosero" lo cual siendo sincera fue muy chistoso.

-Vamonos- dije apresurandolo y riendo al mismo tiempo

*Salimos a la carretera y hasta ese punto me sentí más segura, después del susto no podía parar de reír sobretodo porque Ryan tenía cara de preocupación y culpa por haberle tirado el bote al pobre señor*

-No te rías, me siento mal- dijo con un puchero que estoy segura lo hizo involuntariamente pero que me causo mucha ternura.

-Es que el señor se veía muy chistoso y tú más con tu cara de preocupación- reí.

-Ok, si fue chistoso pero eso no quita mi culpa- respondió un poco más relajado.

-Me encanta que seas tan buena persona- lo mire. -Tu corazón es muy noble- Esas palabras provocaron un sonrojo en sus mejillas.

-Supongo... Solo trato de ser amable con todos, no me gusta hacer sentir mal a los demás, bueno, supongo que a nadie le gusta que lo traten mal- dijo.

-Hay personas que se lo ganan- respondí.

-Aun así, bueno... Tal vez haya excepciones. Ya no quiero hablar más de esos temas, haces que me sienta peor por lo del viejito, ¿Cuáles son los planes?- preguntó.

-Primero, debemos apagar los celulares por lo menos hasta en la noche seguramente las chicas estarán llamandonos- comenté, acto seguido apagamos los celulares. -Y lo segundo es que no hay plan, solo dejemos que las cosas pasen-

-Me parece genial- me miró.

*El día estaba frío ya que pronto sería invierno y aquí eso es extremo, aún así amaba este tiempo por un rato ninguno de los dos hablamos pero no era un silencio incómodo al contrario era tranquilo me encanta ir en la ventana viendo los hermosos paisajes, aunque amo estar con Ryan algo que adoro es el silencio y Ryan lo sabía, amo que me de mi espacio aunque sin dejarme en soledad completamente creo que nadie había entendido eso de mí solo él lo hace*

Muchas gracias por el apoyo realmente no puedo creer que sigan leyendo esto, me doy cuenta que no solo es una persona sino varias 🥺 GRACIAS!