Atún

Capítulo 44🐟

El lunes de madrugada dejaron el castillo para dirigirse a la mansión. Ambos lo miraron antes de partir con un poco de nostalgia.

- ¿Cómo haré ahora atún?, quiero estar siempre a tu lado- se quejó infantilmente Jimin.

- ¡ Pero sí siempre estamos juntos- respondió Jungkook divertido.

-  Sí, es cierto, pero...- Jimin se puso coloradito.

- ¿Qué Humamin?¿qué te preocupa?- le preguntó con ternura Jungkook tomando su manito con la que tenía libre al conducir.

- Es que con todos presentes ya no podremos estar dándonos besitos a cada rato- Jimin hizo un puchero.

Ahora sí atún se puso a reír a carcajadas.

-  ¡No te rías!- dijo Jimin.

- Disculpa bebé,  te prometo que encontraré la forma de darte tu ración de besitos diaria...además...siempre tenemos la noche, nuestra habitación,  solitos tú y yo.

- ¿ Me lo prometes Atún?- dijo Jimin mordiendo su boquita y mirándolo con sus ojitos brillando.

- Promesa,  ¿crees que después de éste fin de semana podré mantenerme lejos?- Atún le pellizco la nariz.

Jimin soltó una risita complacido y besó la manito de Atún.

Cuando llegaron eran las cinco de la mañana, entraron calladitos y se dirigieron a la habitación de Jungkook,  la casa estaba silenciosa,  todos dormían aún,  así que aprovecharon de asearse a conciencia y luego durmieron otro rato antes de bajar a desayunar.

Cinco pares de ojos se los quedaron viendo cuando entraron.

Jimin se puso a espaldas de Jungkook mirando a hurtadillas sobre su hombro.

- ¿ De verdad te vas a poner tímido ahora humano descarado?- fue el saludo de bienvenida que le dio Yoongi con una sonrisa picarona bailando en su boca- ¿y cómo estuvo?

Jungkook se puso rojo y Jimin se rió bajito.

- ¿Cómo iba a estar? ¡ On Fire!- dijo Nam-joon también riéndose.

Hana ocultó su sonrisa para no incomodarlos más.

- ¡Ya, ya!, basta niños,  déjenlos en paz- les dijo Hana sonriendo- ¿no será qué están un poquito envidiosos?

Nam y Yoongi la miraron asombrados,  tae y Moon se rieron bajito al ver que ahora ellos se sonrojaron.

- Traidora...- masculló Yoongi bajito.

Hana igual lo escuchó y se largó a reír.

- Desayunemos,  hoy tienen mucho por hacer- les dijo Hana sentándose a la mesa.

El desayuno transcurrió de forma tranquila,  con una que otra broma respecto a la parejita.

- El plato está en la mesa Jimin,  Jungkook no es comida- Yoongi no se aguantó y Tae lo pateó por debajo de la mesa.

- ¡Ya verás gato pulgoso!- le dijo Jimin sacándole la lengua como antaño- no te dejaré en paz cuando Tae tenga su celo.

Yoongi se atoró con el trozo de manzana que estaba comiendo.
Nam-joon se quedó callado,  no quería ser blanco de la lengua afilada de Jimin.

- Bien hecho bebé- Jungkook le sonrió orgulloso y le dio un piquito delante de todos.

- ¡Que lindo!- exclamó Tae mirándolos con ternura- deberías aprender de ellos copito,  un poco de romance no me vendría mal,  ¿ verdad Moon?

Moon se puso coloradita y miró de reojo a Nam...ella y Nam habían avanzado un poquito también en ese fin de semana.

- Miren- Jimin se bajó el cuello de su chaleco y les mostró su marquita sonriendo- ¿ no es bonita?

- Sí pequeño,  es hermosa,  y más lo que ella significa- le dijo Hana con cariño.

Jungkook lo miraba con tanto amor y orgullo,  su Humamin mostraba con tanto orgullo su marca, eso lo emocionaba demasiado .

- Tienes razón Hana,  ahora nos pertenecemos en cuerpo y alma, Humamin me dio el más hermoso e invaluable regalo al dejarme marcarlo- ahora miró a sus amigos- soy feliz como no se imaginan,  y deseo que esta felicidad que me embarga también ustedes la compartan,  porque son nuestra familia y los amo con todo mi corazón.

Yoongi trató de contener la emoción pero no pudo, levantándose corrió a abrazarlos,  los quería demasiado.

Al final terminó siendo un abrazo colectivo,  donde todos lagrimearon felices de pertenecer a esta especial familia,  una familia creada única y exclusivamente con lazos de amor y amistad.

Después se fueron a seguir con sus indagaciones,  Jungkook presentía que hoy sería un día con suerte.

- ¿ Jimin?, mira esos hombres están entrando en la casa,  ¿son ellos?- preguntó Jungkook.

- Creo...están un poco lejos,  pero sí,  creo que son ellos- dijo Jimin retorciendo sus deditos.

Jungkook lo envolvió con sus brazos.

- Estoy aquí,  nadie te hará nunca más daño ¿ me crees?- Jimin asintió y le dio una pequeña sonrisa.

- ¿Y ahora?¿ qué hacemos?- preguntó Yoongi mirándolos.

- Ahora me encargo yo- dijo Nam-joon.

- No. Lo haremos juntos,  todos juntos- dijo Jimin y apretó la mano de Jungkook.

- ¿ Estás seguro bebé?¿ estarás bien?- Jungkook lo miró angustiado.

- Lo estaré,  ahora los tengo a todos ustedes conmigo,  hagámoslo de una vez- Jimin empezó a caminar hacia la casa con la mano de Jungkook aferrada a la suya, Jungkook era su fuerza.

Nam-joon tocó a la puerta y se escucharon pasos acercándose.  Un hombre de alrededor de unos cincuenta  años abrió la puerta, mirándolos extrañados.

- ¿ Qué quieren?- preguntó groseramente.

- ¿ Te acuerdas de mí?- Jimin salió adelantándose para que el hombre lo viera.

El sujeto abrió la boca y los ojos y trató de cerrar la puerta,  pero Nam-joon lo impidió empujándolo hacia adentro.

- Ni lo intentes- Nam-joon sacó su arma y lo apuntó- ahora adentro.

Todos entraron cerrando la puerta.

- ¿ Quién era?- otro hombre largo y flaco,  lleno de cicatrices en el rostro apareció y se quedó paralizado al ver a Nam-joon apuntando a su compañero.

- ¿ Qué mierda...?- balbuceo el hombre caminando hacia atrás.

- Quieto- Nam-joon le señaló con la pistola que se acercara a su compañero- por el momento sólo hablaremos...depende de ustedes y sus respuestas si seguimos hablando- Nam-joon les dedicó una sonrisa feroz.

El hombre obedeció y se sentó al lado del otro, y fue ahí donde lo vio y se puso pálido.

- ¿Jimin?¿ eres tú?- sus voz era apenas un murmullo agudo.

Jimin sonrió.  Ya no les tenía miedo,  ya no era un niño desvalido,  ya nunca más podrían hacerle daño.

- Sí,  soy Jimin...Park Jimin.