Hoy parecia ser otro dia mas en San javier. El sol comenzaba a esconderse, y con el, muchas personas comenzaron a pulular por las distintas calles.
Muchos 'Buenos tardes', 'Ya empezamos con la fiesta' y alguno que otro, 'Como esta hijo de la Choi?' se pudo escuchar de las personas que recorrian la calle.
Hoy la mayoría de los pobladores estaban de buen humor, pues el día de hoy, se celebraba el dia de los muertos!
Y los niños de San Javier, tenían la costumbre de armar barquitos de madera que cargaban con las fotos de sus seres queridos.
Esos barquitos eran soltados en el río del malecon, mientras se escuchaba la musica de banda y la gente se unia a pies del río para celebrar la vida.
Este dia de muertos sin embargo ... Fue ... Distinto.
No en el mal sentido, véase, si no que, habia una nube de leve incomodidad rondando por las cabezas de algunos de los pobladores, dado a las muchas caras nuevas y desconosidas de algunos extranjeros que decidieron unirse a la feliz fiesta.
Muchos de ellos fueron recibidos con las manos abiertas, los venezolanos, los argentinos, y algunos españoles fueron recibidos muy bien. Dado a que la gente siempre encontraba algo divertido escuchar sus acentos y probar las comidas exóticas probenientes de sus paises que estos traian.
"¡No mames! ¡Este Choripan esta de huevos!", Jesus, un hombre adulto de cabello corto oscuro y piel bronceada, exclamo mientras comia su choripan remojado en tantitos frijoles puercos. "Checa, prubalo Daisy! ¡Te va a pegar algo de lo bueno que esta!", el dijo empujando su choripan a su perra.
La perra de raza mesitiza lo olfateo un poco antes de darle una mordida. Y tras saborearlo por unos segundos, su cola comenzó a sacudirse y vio a su humano de forma alegre. "¡Wow! ¡Tienes razon! ¡Esta de huevos!", ella le dijo, "Donde puedo conseguir uno para mi?"
"Ahorita te lo traen- nomas dejame le doy el pitido", Jesus se llevo dos dedos a los labioz, antes de dejar escapar un fuerte chiflado en direccion al sujeto Argentino que estaba vendiendo los choripanes. Este escucho y volteo a ver en su direccion,
Jesus le sonrio y le hizo un gesto con su mano, "¡Eh Pinocho! ¡Pichame un choripan pa la perra!"
"¡En un segundo mi chango boludo! Acaso sos ciego!? ¡Che no ves que le estoy sirviendo a mi negrazo por aqui!", el dijo mientras le entregaba un choripan calientito a un cubano, que no hizo mas que reirse de los sobrenombres que se compartían de izquierda a derecha entre los muchos hispano hablantes. "Aqui tiene su choripan. Disfrutelo mi negrazo. Que es la receta de la abuela"
"Mucha gracias mi amigo", el cubano le dijo al argentino. "Acabo de mudarme pa a ca con la familia, y pense que la gente iba ser mas hostil por como escuche que iban las cosas con los turistas", el explico haciendo que el argentino dejara escapar un:
"No mi amigo. Lo llevas todo mal. El problema no es con nosotros, los argentinos, los cubanos, los españoles, los chinos o lo que sea ... El problema son los norte americanos ... Ellos son los que quieren venir para acá y cambiarlo todo para sentirse mas comodos ... Meten sus ideas de inclusión y boludeses de lo politicamente correcto- Nhaa. Puro sin sentidos", el argentino le explico al cubano. "El otro dia mi niña me conto que estan haciendo lo mismo en las escuelas!- pero dejaron de hacerlo cuando un montón de niños y chuchos se revolucionaron! Fijate nomas hasta donde tiene que llegar todo el quilombo, para que los encargados de las escuelas dejen de actuar como un montón de pelotudos?"
"¡Pinochoooo! ¡Y el choripan!?"
"Che si tanto quereis un choripan ven por el, orangutan. O que? Queres que te lo tire pa que lo atrapes con esas patas de orangután que tenes!?"
Jesus, al escuchar eso, no pudo evitar soltar la carcajada y negar con su cabeza, "Hehe- pinche pinocho. Te pasas de verga", el mencionó mientras, el y Daisy, se acercaban a su amigo de otro pais. Cuando ellos estuvieron cerca, el pregunto; "Ya pues. Cuanto por el Choripan, Raul?"
"Nadaaa. Che, ya sabes que va por la casa, hermano", Raul exclamo mientras le dia el choripan a Daisy, "Esto es un gracias por aceptar a mi familia en la zona residencial. Que la parte de turistas esta como perrera llena de perros rabiosos- sin ofender, claro", el dijo esa ultima parte viendo a Daisy.
"Nah. No me ofende", Daisy le dijo con una sonrisa y un gesto de su pata, "Eh estado ahi. No pasaron ni dos minutos sin que alguien intentara tocarme 'discretamente' la cola. Si sabes a lo que me refiero?"
Jesus resoplo y nego con la cabeza, "Que monton de descarados! Eso es lo que son. Te tratan como si no fueras una persona igual que yo, o que este orangután que tenemos aqui", el dijo haciendo un gesto a Jesús, que le levanto un dedo de enmedio, "Una rosa delicada como tu no se merece ese tipo de tratos"
Daisy se llevo una pata al pecho, y dejó escapar un; "Aww, que dulce. La caballerocidad aun existe entre los humanos"
Raul se encogio de hombros, "Existe para quien la quiere aceptar. Yo solo digo la verdad. Este Lugar y su gente se lo merecen. An sido buenos conmigo y mi niña al tratarnos como familia"
Jesús sonrió y negó con la cabeza, "Maaahh. No te pongas tan emotivo, pinocho. No es pa tanto. Tenemos un chingo de espacio pa gente chambeadora como tu. Mas aun con los mendigos turistas que no dejan de pedirnos nuevas cosas", el suspiro con algo de exasperacion, "Fuuff, habeces extraño cuando este lugar era mas tranquilo"
Daisy, Raul y Jesus siguieron platicando por un buen tiempo. En un punto, Raul le pregunto a Daisy si sus tres cachorros estaban bien, dado a que estos ahora mismo estaban jugando con su niña a pies del rio.
Ella, mientras comia su rico choripan, solo le dijo que gracias a dios todos estaban bien de salud, y ni uno de ellos se habia enfermado de nada.
La celebración a su alrededor siguió celebrándose con musica de banda de fondo a todo volumen.
En algun punto, un grupo de turistas no hispanohablantes se unieron a la celebración.
Pero estos no eran los tipicos turistas comunes y corrientes, no. Estos eran parte de un equipo de investigacion de Animal Planet, que venían muy seguido a la zona residencial a grabar como es la tipica convivencia entre perros y humanos en este día festivo.
Ellos se acercaron algunos grupos de perros y humanos para grabar sus interacciones. Las personas y perros estaban tan acostumbrados a ellos, que muchos simplemente actuaban como si no estuvieran ahí. Optando por simplemente ignorarlos y seguir disfrutando de la celebracion.
Uno de los grupos mas peculiares al que se acercaron, fue a un grupo de adolecentes conformado por dos perros machos gemelos sin pantalones, y dos humanos hombres que estaban platicando acerca de ... Tipicas cosas de San Javier.
La camara se enfoco en el rostro de uno de los adolecentes.
"Wey, no es por ser castroso ... Pero me pueden decir de nuevo por que no usan pantalones?"
"Es por que no tenemos verguenza de mostrar nuestros cuerpos", uno de los perros le dijo al humano pareciendo orgulloso.
"¡Si!", el otro perro complemento, "Ademas, hace calor y no es como si tuvieramos algo que ya no ayan visto", el dijo mientras señalaba a su entrepierna y su miembro enfundado. "Oh me equivoco?"
"Si carnal, ya dejales de preguntar lo mismo. Empiezas a pareces joto viendoles los huevos todo el rato"
"Perdon ..., es solo que aun es algo incomodo hablar con alguien sin pantalones", el adolecente dijo, "Mas aun cuando uno de ellos es el novio de mi hermana, sabes?"