24
Una semana más tarde es sábado, y estoy dando vueltas en casa, porque me quitaron mi móvil (como cada finde) y pues, estoy aburrida.
Pero me sorprendo que caminando por frente al despacho de papá está...
—¿Them?— Frunzo el ceño.
El pega un brinco y mira a todos lados, podría decir que nervioso. Y capto que hay una mujer frente a él, que no veía antes por un muro.
Es una mujer con un cuerpo de puta madre, y mucho maquillaje, y mechas rosas, no parece alguien que a papá le agrade que esté en casa, pero más me sorprende que esté con Them.
—¿Quién...?
—Adelante linda— Abro los ojos como platos cuando mamá abre las puertas del despacho para que entre, y veo a papá dentro, sentado en su escritorio.
—¿Them?— Él se acerca a dejarme un beso en la mejilla— ¿Quién es ella?— Señalo el lugar por donde entró.
—No lo sé, vine a verte y ella estaba— Se pasa una mano por el cuello y le suda la frente.
¿Está mintiendo?
—Ok— Finjo creerle— ¿Y para qué querías verme?
—Pues eh...— Se frota las manos— Yo...
Alzo más la ceja, es un gesto que amo, porque da un porte intimidante capaz de transformar a alguien en un tartamudo sin valor, como el que tengo en frente.
—Pues...— Sigo esperando a ver qué se inventa y veo como le vuelve el alma al cuerpo cuando le suena el móvil. Lo saca de a poco y frunce el ceño viendo a la pantalla— Es... Danna.
Alzo las cejas quitándole el móvil y contestando.
—¿Danna?
—¿Lorraine?— Dice perpleja— Bueno, ya que eres tú, ¿por qué no me contestas el puto teléfono?
—¡No lo tengo!— Chillo— ¿Qué quieres?
—¡Monic y yo llevamos como cinco horas frente a tu casa, es... urgente!— Trago grueso.
—Mamá...
—¡A tu madre invéntale que vamos a estudiar o algo!— Me corta y antes de poder refutar cuelga— Te esperamos.
Dejo el móvil en la palma de Them. Si mamá y papá están reunidos en su despacho, lo mejor es no molestar. Así que solo voy al portón viendo a Monic con un paquete de gominolas, y a Danna abanicarse el rostro dramáticamente.
—Ustedes... están mal.
Hablo riendo y un rato más tarde estamos en mi habitación, mientras Rauw suena de fondo.
—¿Qué?— Soy directa y Danna suspira antes de hablar muy muy rápido.
—Te quieren quitar el novio, conmigo quieren algo más y Monic está más enamorada que nunca— Parpadeo.
—¿Qué?
—Te explico— Danna se acomoda— Sabes quien es Marina ¿no?— Asiento— Pues está que babea por Adrix, así que, cuidado.
Alzo las cejas para que continúe.
—Yo, Luka dice que valgo más que un polvo en un baño— Prosigue— Así que quiere algo más... serio. No un noviazgo, pero algo más.
—¿Y yo?— Se queja Monic.
—Y Monic ama el hecho de que su sexualidad con Fabio es totalmente nula, dice que eso fortalece su amor y bla bla— Rueda los ojos y Monic le hala el cabello.
—An...ja...— Digo lentamente— ¿Y qué es lo que...?
—¿¡Qué significa esto!?— Me interrumpe la estridente voz de mamá.
—Estamos estudiando y...
—¿¡Estudiando!?— Lanza los libros escolares que estaban sobre la cama— ¡¡Te dije, que no te quería con ellas!!
Abro los ojos como platos, mamá por muy enojada que esté, jamás ha tratado así a nadie.
—Creo que mejor nos vamos— Dice Danna recogiendo y llevándose a Monic.
—¡Eso! ¡Váyanse!— Sigue gritando mamá y se voltea a verme— ¡¡No sé qué mierda tengo que hacer para que me obedezcas!!
Me quedo perpleja, jamás ha sido de usar palabrotas, ni de gritar, ni de descortesía.
«¿Dónde mierda está mi mamá?»
—Te dije que era estudiando.
—¡Y una mierda!— Sigue— ¿Con música?— Señala el equipo—Y encima esa música.
—¿¡Y qué tiene esa música!?—Ya me tiene harta y solo me mira como si no se lo creyera.
—¡¡Es tan basura como los libros que te lees!!— Espeta— Pero claro, debí haber hecho lo mismo.
Me alarmo cuando va hacia el equipo sacando el CD con la música y lo lanza, haciéndose añicos en el suelo.
—Eso... es lo que se hace con las cosas inservibles— Me quedo atónita cuando toma el resto de los CD de mi mesita de noche, y los parte uno a uno— Y así aprendes a valorar las cosas buenas de la vida.
Continúa y siento que mis pies están pegados al suelo. Lanza incluso el equipo al suelo, con una fuerza indescriptible, haciendo que se abra llenando el suelo de tornillos.
—¿¡Entiendes Lorraine!?
Pero no le basta, arranca las cortinas y las sábanas, yo soy incapaz de moverme, y se detiene frente a mí.
—Te espero abajo para cenar— Jadea secándose el sudor, y yo solo me concentro en que dejó mi habitación hecho un total desastre.
***
Media hora más tarde estoy cenando, en total silencio, mamá, papá y yo.
Jamás había sentido odio, siempre esas cosas me dieron igual, pero ahora... Puedo decir con toda certeza que odio a mi madre, o mejor, al monstruo en el que se ha convertido.
No tardo más de dos segundos en subir a la habitación cuando acabamos la cena. Lo examino todo, los cristales en el suelo, las cortinas, las sábanas.
«necesito salir de aquí»
Camino en retroceso, horrorizándome con lo que veo.
Con la respiración agitada salgo de la habitación, cruzando pasillos oscuros, hasta llegar al jardín.
Vigilo las cámaras para no ser captada y voy hasta la pequeña casa que hay al fondo del jardín... la de Becky.
Irme de casa nunca fue una opción, planeaba hacer mi universidad en la prepa, y quedarme trabajando aquí, pero las circunstancias me han hecho cambiar de opinión.
—¿Señorita?— Dice Becky medio adormilada cuando me abre la puerta.
—¿Puedo quedarme aquí?
Digo con una sonrisa y asiente.
Me acuesto en la cama, solo es esperar a que apaguen las luces, entro, me llevo mi ropa y me largo. Sé que a casa de Danna puedo ir, podría incluso ponerme a trabajar y ayudarla a pagar las facturas de la casa.
Además es mi mejor amiga.
Cuando ya no viva bajo su techo no podrán decidir sobre mi vida, o decirme qué hacer.
Cierro los ojos con el corazón en la boca, pero los abro de golpe al escuchar la única voz que soy capaz de odiar...
—¡Lorraine Coleman! ¡Sal de ahí ahora mismo!
La de mi madre...
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Nota de la autora:
Y yo sigo sin encontrar al pajarito que le decía todo a mi mamá xD.*se aproxima una muerte...
Just kidding...o no...Kisses... Ly
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CAOS EMOCIONAL [EN EDICIÓN]
Teen FictionMi nombre es Lorraine Coleman... alias La hija del alcalde... Una chica atiborrada de normas y prohibiciones, que un día se escapó a una fiesta con su mejor amiga... Su nombre es Adrix Hopkins... alias El chico de los chupitos. Un chico inteligente...