Nuevo Amanecer[COMPLETA]✔️

×°~Capítulo 37~°×

Se hicieron las 11, me había puesto un vestido verde con brillantes y un buen escote, si, me lo había comprado a escondidas del sucio y avaro de Bruno pues si no se gastaba su dinero y el mío en alcohol.

Sí, yo trabajaba en una cafetería lunes, miércoles y viernes.

Salí de casa de puntitas tras asegurarme de que el repugnantito que vivía conmigo estuviese dormidito y me fui rumbo al hotel.

Cualquier cosa que les cuente quedaría corta, pequeña e insignificante ante aquella noche.

Al llegar Marcel me esperaba y entramos al hotel.

Pasión, lujuria, deseo, fogosidad, apasionamiento.

Todo mediante la simple unión de dos cuerpos.

La unión de dos cuerpos, pero no cualquieras, los dos cuerpos de dos asesinos.

Nos tocamos con las mismas manos que luego mancharíamos de sangre, nos besamos con los mismos labios que luego mandarían a matar personas.

Aquella noche marco el comienzo de una aventura prohibida, un amor entre dos seres que nunca debieron amar.

Una chica traumada con un pasado sangriento y que había visto el asesinato de su madre.

Y…

Un chico guapísimo pero totalmente misterioso y con un futuro oscuro y prometedor ante la maldad.

Una unión épica, romántica y monstruosa.

Esa noche fue seguida de más y más noches eróticas, apasionadas al lado de Marcel hasta que una noche luego de hacer el amor él me dijo:

—Deborah… Huye conmigo. ¡Vámonos de este pueblo!—Me pidió.

—Marcel, mi padre… él…—Tartamudee ante su petición.

Deseaba más que nada huir de allí, huir de mi padre, de la oscuridad de Victoria, de todo pero… sabía que mi padre no me lo permitiría.

—No le estoy pidiendo a tu padre huir, te lo pido a ti.—Me dijo.

—Yo quiero huir contigo pero…

—Entonces no importa nada mas, huyamos.—Me dijo exigente.

—Yo… no lo sé…

—¿Irías conmigo al infierno?—Pregunto de repente.

—SI.—Respondí sin titubear.

—¿Crearías el infierno conmigo?—Pregunto.

—SI.—Volví a responder sin duda.

—Entonces… si estas dispuesta a todo eso no importa quién se nos cruce en el camino. Yo mataría por ti, robaría por ti y, destruiría el tiempo-espacio por ti, provocaría el apocalipsis y de algún modo lograría que tú y yo nos quedásemos vivos.—Me dijo seguro.

Luego de esa noche todo se complicó.

Deje de ver a Marcel durante meses, todo lo teníamos planeado de tal modo para que nadie sospechara.

Me dedique a embriagar día tras día a Bruno, a complacerlo siempre tratando de no acostarme con él, de ganarme su confianza.

El futuro era indeciso.

Podríamos ser descubiertos en cualquier momento y esa era mi peor pesadilla durante todas las noches que deje de ver a Marcel.

Temía nunca volver a verlo.

Temía que por algún motivo el desapareciera.

Temía que Bruno me violara, no, no lo resistiría, no podría aguantarlo.