Autistic | Jenlisa

Capítulo 5

— ¡Jen! ¡Jen! A Lisa le duele... — lloraba la rubia tocando su mano en el asiento de copiloto mientras Jennie conducía nerviosa.

Oír los lamentos de la rubia la hacían sentir peor, aparcó el auto en un lugar seguro y quitó el saco de su traje de abogada al ver como la sangre de Lisa empezaba a manchar la ropa de esta.

Lisa no había entrado en pánico porque tenía a su abogada bonita al lado, ella solo lloraba por el inmenso dolor que sentía en su extremidad.

— Ven acá, linda — Jennie bajó y abrió la puerta de Lisa — Dame tu mano... — dijo con delicadeza tratando de que la rubia se calme.

— A L-Lisa le duele... A m-i me du-ele mucho.... — lloraba con un puchero escondiendo su mano lejos de la pelinaranja.

— Lo lamento, Lisa en serio lo siento, perdóname por dejar que esto suceda — empezó la coreana con ganas de llorar y hacerle compañía a la menor — Yo... Debo dejar de ser tan distraída, si tu no llegabas a tiempo, no se que pudo haber pasado — la menor había reducido su llanto y sorbia su nariz escuchando las sinceras palabras de Jennie mientras esta acariciaba el brazo de la menor con su pulgar — Por eso estoy tan agradecida contigo... Que quiero que estés bien, y si no me dejas amarrar esto a tu mano hasta que lleguemos a la clínica y así detener algo del sangrando, voy a sentirme muy mal y creo que e-mpezaré a ll-orar — sus últimas palabras se cortaron queriendo hacerlo.

Ella se sentía una mala persona y a Lisa le preocupó.

— N-no, no, no — Lisa de repente habló tomando el rostro de la mayor con su mano buena, esta también temblaba — Lisa perdona... G-atito no debe llorar, Lisa... Lisa... Yo soy la que está lastimada, Jennie debe poner eso sobre la mano de Lisa... Sobre mi mano — señaló el saco de Jennie.

La coreana veía a la menor sin ninguna reacción... ¿Cómo puede existir alguien así de puro en el mundo?

A Jennie se le aceleró el corazón por unos segundos al ver el rostro hinchado por las lágrimas pero ahora con un aire preocupado, ¿Lisa estaba preocupada por ella a pesar de que es la que está lastimada?

— D-déjame — carraspeó — Déjame ver tu mano ¿Sí? — empezó la pelinaranja y Lisa le dió su extremidad.

La mayor notó que había un pequeño corte en la palma de la rubia por donde brotaba cantidades de sangre, se preguntó porque sí no era muy grande el corte así que empezó a revisar.

— N-no, no Jen, duele — otra vez quiso llorar.

— No te lastimaré ¿Sí? Solo pondré esto delicadamente... — le regaló una pequeña sonrisa para tratar de calmarla, lograndolo

La coreana trató de amarrar su saco a la mano y ahí divisó un pequeño pedazo de algo dentro de la herida de Lisa lo que provocaba el gran sangrado, al parecer eso estaba tan profundo que aquella parte estaba tornándose morada.

— ¿Beso?

— ¿Qué? — aquella pregunta la sacó de sus pensamientos culpables, elevó su rostro y se encontró con el de Lisa a poco centímetros del suyo.

— Beso a Lisa... — esa confirmación la hizo poner nerviosa aún sabiendo que Lisa gustaba de ella.

— E-ehhh yo...

— ¿Gatito no dará beso a la manito de Lisa? Mamá lo hace cuando Lisa se lástima... — aclaró confundida aún sintiendo dolor pero ya más calmada.

— A-ah, eso — Jennie al fin pudo respirar ignorando los latidos de su acelerado corazón.

Dejó un pequeño beso sobre su saco sin lastimar la herida de la menor dejando a esta sonrojada.