Capítulo 1: Bienvenido al instituto.

467 25 22
                                    

Suena "Run to the hills" en los auriculares del moreno al momento de cruzar las puertas de su nuevo colegio, y tal vez si hubiese puesto atención a la letra de la canción hubiera evitado ser golpeado en la cara, pero si Peter escapaba a su primer día de clases tal vez esta historia fuera diferente.


Los pasillos de la escuela eran helados, parecía que la calefacción del edificio tenía su límite en la puerta de cada aula, Patrick y Joe estaban de pie, frente a sus respectivos casilleros, ya que disponían de algo de tiempo entre clases, Patrick estaba de espaldas al pasillo, terminando de acomodar algunos libros mientras que Joe estaba recargado sobre la puerta del suyo, con la vista puesta sobre ese chico con la cresta color rosada.

-Ese chico nuevo -habló de repente Joe, captando vagamente la atención de Patrick -estoy seguro de que está metido en cosas oscuras.

Patrick se detuvo y le dirigió una mirada de confusión -¿De qué hablas Joe? ¿Qué chico?

-Ese que se mudó la semana pasada, el que tiene cara de asiático. -Tenía unas inmensas ganas de señalarlo pero sería demasiado obvio.

Patrick se volvió y lo vio ahí parado, junto a la puerta de su salón -¿Josh? -Preguntó enarcando una ceja.

-Ese. -Afirmó su amigo, mientras asentía, haciendo que su cabello siguiera el movimiento de su cabeza.

Patrick se mordió los labios y lo miró completamente serio -Joe, -comenzó -sólo porque sea gay y le guste... teñir su cabello de colores amm... llamativos no significa que este metido en nada raro.

-Estás ciego Patrick, ese chico es más que extraño.

-Detesto cuando te pones así.

Joe bufó y se cruzó de brazos, fue entonces cuando una chica castaña muy atractiva pasó junto a ellos, y Joe salió detrás de ella, como todo buen chico caliente que es, y Patrick no pudo más que cerrar la puerta y recargarse contra su propio casillero, resignado a que debería quedarse solo hasta su próxima clase, ya que Joe estaría demasiado ocupado acosando a esa chica como para prestarle atención a su mejor amigo. Pero tal vez eso no fuese tan malo después de todo, Joe tenía la costumbre de elaborar complicados rumores sobre los demás estudiantes.

Fue entonces cuando notó a un extraño chico que nunca antes había visto. Era bastante raro, porque casi estaban a fin del trimestre y además era viernes, digamos que no era el mejor momento para cambiarse de escuela, pero no era imposible tampoco. En fin, el chico caminaba por el pasillo, cabizbajo y con un largo flequillo negro que cubrían gran parte de su cara, parecía más concentrado en sus auriculares que en que en lo que ocurría a su alrededor. Buena primera impresión, parecía una persona agradable, entonces uno de esos idiotas deportistas se paró delante de él y quitándole los auriculares hizo un comentario acerca de que lucía como una mujer o algo así cuando alzó la vista para verlo, y pudo entonces, ver su rostro, su piel morena, sus ojos oscuros y brillantes, resaltados con una gruesa capa de delineador negro, que, en su opinión no se veía nada mal, y bueno no sólo su aspecto era genial, la forma en la que reaccionó, diablos, a diferencia de lo que Patrick hubiera hecho, ese chico no sólo lo ignoró, volvió a colocarse sus auriculares y siguió con su camino, evitando los problemas, sino que sacó su lengua muy vulgarmente y apoyó su dedo medio encima sin dejar de ver al deportista a los ojos y antes de que este pudiera decir algo pasó ese mismo dedo por su rostro, oh diablos, debieron haber visto la cara de es sujeto, el tipo se debatía entre si sentirse increíblemente humillado o iracundo y el rubio desde su lugar contemplaba la escena haciendo un esfuerzo increíble por no dejar escapar sus carcajadas, aunque eso fue todo, el tipo le propinó un puñetazo en la cara y el chico nuevo quedó tendido en el suelo. Con una mueca de dolor, Patrick lo arrastró a la enfermería, también tuvo que recoger sus cosas que se habían desparramado por el suelo, pero aunque le hubiese gustado no pudo quedarse esperando a que despertara porque tenía que asistir a clases.

Como Patrick rescató al raro chico nuevo de su propia casa.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora