14. Oscuridad

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                                                                    ¡EDITADO!

                                          ***                                      ***                                        ***  

PVO PAUL

¿Como le estaría yendo la fiesta a Soniia?

Se suponía que esta noche a las ocho de la tarde comenzaría la fiesta que Soniia se había visto obligada a preparar por capricho de los nobles. Como me gustaría estar a su lado.

Pero por desgracia hacia dos días que me encontraba de viaje. Había recibido una llamada en la que me comunicaban que tenía que viajar de inmediato, ya que en una de mis empresas había ocurrido un serio problema.

Y a pesar de que le había dicho a Soniia que el quedarme con ella no seria ningún problema, ella me había contestado que no quería molestar y que no me preocupase por ellas, que estarían bien.

Y al final consiguió convencerme. Aun que no me quedaba tranquilo al dejarla sola con esos nobles. No me daban buena espina...

En fin... Nada malo poda ocurrir ¿no?

A la mañana siguiente, a primera hora mi móvil sonó.

-Al habla Paul Tomson. ¿Quien habla?- se escuchaban sollozos. Y al parecer era una mujer. Y yo sabía quien era.

-¿María, eres tu? ¿Que paso María? Habla y dime que paso por favor.- después de unos minutos que se me hicieron eternos, María consiguió serenarse, a medias, y contestarme.

-Señor... ayer la pequeña Lili sufrió un accidente. Soniia se la llevo a urgencias, acompañada de un noble.- me levante de golpe de la silla tirándola de espaldas.

-Se suponía que Soniia me tenía que haber avisado, pero no se ha puesto en contacto conmigo. Y temo que le halla pasado algo.- ¿como era posible que esto haya pasado?- No se que hacer.- escuché como María se echaba a llorar de nuevo.

-No se preocupe María. Esta misma noche saldré de aquí, y mañana a primera hora estaré allí.- después de eso se despidió y yo me quede pensando.

¿Que es lo que había pasado en mi ausencia?

No tenía pensado esperar mucho para descubrirlo. Me puse a solucionar el problema que me había traído aquí y que me había alejado de ella. Sabia que no podía dejarla sola. Me tendría que haber quedado con ella...

Esa misma noche cogí un vuelo, dirección a Barcelona. Lo que me llevaría unas cuantas horas. Por lo tanto no llegaría antes del mediodía. Mientras duraba el vuelo, me entretuve buscando la localización de Soniia.

Tarde un rato en encontrarla. Al parecer Lili se encontraba hospitalizada en el hospital que se encontraba a unos veinte minutos de su casa.

Al saber donde se encontraba, intente llamar a Soniia incontables veces, pero nunca me cogió el móvil.

Y yo por cada minuto que pasaba me desesperaba más. Ya al medio día el avión aterrizo. En cuanto abrieron las puertas salí de el como alma que lleva el diablo.

En la puerta me encontré a cuatro guardaespaldas. A uno le ordene quedarse a recoger todas mis cosas. Mientras que los otros me acompañarían a buscar a Soniia.

Estuve dentro del coche cerca de dos horas. No paraba de pensar en que es lo que podía haber pasado, pero no era capaz de imaginar nada coherente.

Tras la Mascara (Editada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora