Capitulo 4

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-Alo?-contestó Joseph, así sin más.

-Emm, Con quien hablo?-era la voz de Ian, quien más iba ser.

-Disculpa, nina esta en el baño... Algún recado?-contesta Joseph naturalmente.

Que intenta hacer? Ponerlo celoso? No se pondrá celoso! A no ser que me llame Nikki.
"Cabeza hueca por algo sigue llamando, aún le importas!"
Pero eso no significa que no la quiera mas a ella.

-Y tu eres...?

-Un amigo

-ella no tiene amigos

Como se atreve a revelar esa información! Que vergüenza, qué pensará joseph...

-No que tu conozcas, quizá.

-la llamaré luego...- y cortó.

-Que hicistee!?- le pregunto indignada a joseph arrebatándole el celular. - Apenas nos conocimos y te crees en el derecho de meterte en mis asuntos?

-Nos conocimos hace años!
Y no me hables así, soy mayor que tu yo debería estar furioso por no despedirte del que pudo haber sido tu mejor amigo, ya que no tienes...- dijo riéndose de mi, en mi cara.

-dejate de payasadas quieres?- le digo volviendo la vista a mi celular.- ni siquiera nos hablábamos.

-Cuando yo te hablaba tu salias corriendo- me reprocha.

-me intimidaba hablar contigo

-Y ahora no?- Dice dejando el volante a un lado y acercándose a mi tratando de intimidarme.

Reconozco que me provocó una sensación su perfume, el vapor de su boca en la mía... Pero no me intimidaba.

-Para que te haces... Ahora yo te intimido a ti- ahora yo me río de él- eso está claro.

-Que?- se pone nervioso y vuelve al volante.-estas loca? Porque me intimidaria una niña? Jaja

-Tengo 21 años, sabes perfectamente que ya no soy una niña.- le dije- y si no me equivoco, tu solo tienes 25-le guiño el ojo para intimidarlo aún más.

Comenzó a toser irónicamente.

-No le sale su lado intimidante señorita... Solo yo causo ese efecto en ti.

Me frustra su actitud.

-dejame aquí- le pido.

-aun no llegamos a tu casa.

-da igual, para! ahora mismo.

-esta bien- estaciona el auto y se baja junto a mi.

-no tienes porque seguirme, dejame sola.

-eso haré- me dice, saca las llaves y se dirige a una casa en frente.

-No dijiste que vivías aquí!

-Yo no vivo aquí

Me quedo boquiabierta. De la casa sale una curvilínea y se lanza a sus brazos. No me quedo para ver lo que sigue.
Ya a una distancia me giro un poco, disimuladamente, y Joseph me está mirando, pero gira rapidamente la cabeza cuando encuentra mis ojos.

Suspiro y suspiro, no podía ser de otra manera: Tiene novia, como todo hombre guapo. Bueno no todos deben tener una. Y no es que yo lo quisiera para mi es solo que quería tener un amigo que me distragera del dolor que estaba sintiendo, y que aún siento, creo que tendre que arreglar esto o quitarlo de raíz.
Llamaré a Ian. Pero primero descansaré todo el día, me daré un largo baño y antes de dormir lo llamare.

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Saliendo del largo baño suena una notificación desde mi celular que está en la cama, me tiro sobre esta y agarro mi celular para ver lo que era: un correo.

Los fantasmas de mi ExDonde viven las historias. Descúbrelo ahora