3.2

847 88 22
                                    

—Bueno... Ellos necesitaban ayuda. —respondió el ojimiel y procedió a poner a la pelinegra al tanto de la circunstancias de los tres hermanos. 

—Así que... ¿Los vas a adoptar? —interrogó logrando que el rubio se atragantara con su propia saliva.

Kanao podia ver claramente la expresión de preocupación y empatia en el rostro de su amigo al contarle en las condiciones tan deplorables en las que habia encontrado a los niños, seguramente vio el reflejo de su triste pasado en ellos.

—¡Kanao-Chan! ¡¿Cómo se te ocurre!? —dijo de forma alterada, pero la ojivioleta noto ese toque de nerviosismo que delató que -en realidad- él ya habia pensado en eso con anterioridad —¡Yo no podria!

—¿Por qué no? —cuestionó —Kanae era mucho más joven que tú cuando me adopto.

—Lo sé, pero Kiyoshi ya tiene quince años, no creo que se sienta comodo siendo adoptado por alguien que solo es unos pocos años mayor que él. —analizó.

—Yo creo que eso no es importante. —declaró la de broche sonriendo tranquila —A parte por lo que me has dicho él tiene sangre especial y si aún quedan demonios ahí afuera es posible que busquen a personas con esta característica para poder sobrevivir.

Zenitsu guardo silencio, lo que decia Kanao tenia sentido, Kiyoshi necesitaba que lo protegieran y sus dos hermanos también, no podia dejarlos solos, pero...

—¿Crees que Tanjirō lo acepte? —preguntó inseguro.

—Es Tanjirō de quien estamos hablando, aceptara. —aseguró la de broche. 



Tanjirō platicaba alegremente con los niños, Teruko le recordaba mucho a su hermanita Hanako, tan curiosa y alegre; Soichi era una mezcla rara entre Shigeru y Takeo, queriendo parecer maduro para su edad, pero fallando en estallidos de admiración infantil; Kiyoshi era como verse a el mismo, tan dedicado y protector con sus hermanos. Se sentia un poco nostálgico, pero no de mala forma, atesoraba mucho los recuerdos felices junto a su gran familia y vivía cada día con una sonrisa por ellos.

—Tanjirō-San. —llamó la niña y el ojirubi asintió para que continuara —¿Cómo conociste a Zenitsu-San?

—El mismo día en que los ayudamos a ustedes. —respondió con una sonrisa.

—¡¿En verdad!? —dijo emocionada la de dos coletas.

—Pero en ese entonces no te gustaba, ¿no? —cuestionó Soichi con una ceja alzada.

—No, la vedad es que me desagradaba mucho su actitud. —confesó algo apenado, pues ahora amaba tanto a su rayito de luz que no podria imaginarse su vida sin los estridentes gritos y lloriqueos de su novio, así como también su canto dulce y su olor a duraznos.

—¿Y cómo fue que tú y él terminaron juntos? —preguntó el hermano mayor con duda.

—Pues... Creo que ambos nos fuimos acercando poco a poco con pequeñas acciones. —dijo —Zenitsu en realidad es la persona más amable y bondadosa que he conocido. —confesó con un suspiro para luego sonreír de manera deslumbrante y decidida —¡Es por eso que quiero que siempre estemos juntos!

—¡Aww! ¡Que lindos! —exclamó la menor.

Soichi y Kiyoshi asintieron en acuerdo con su hermanita y en ese momento ingreso el rubio acompañado de la pelinegra. Inosuke y Aoi pararon su discusión al notar a la ojivioleta en el lugar y se acomodaron de manera correcta en la mesa.

—Bienvenidos, soy Kanao Tsuyuri y es un gusto recibirlos en mi hogar. —saludó Kanao con una sonrisa tranquila mirando a sus invitados —Zenitsu me hablo de ustedes y creo que seria correcto que luego de que coman me acompañen a mi consultorio a realizarles una evaluación medica.

Los niños asintieron y Zenitsu tomo asiento al lado de Tanjirō mientras que Kanao se coloco al costado de la Kamado menor.

Inosuke volvio a su discusión con Aoi, pero de manera un poco más tranquila, ya que Kanao era similar a Shinobu y podia fácilmente patearlos a todos.



Tanjirō y Zenitsu estaban dando un pequeño paseo por el jardín de la finca en lo que Kanao hacia su evaluación medica a los tres menores. Era una tranquilidad agradable, poder disfrutar de la vida sin preocuparse demasiado por tener que ser enviados a misiones riesgosas constantemente, sin embargo tener tanto tiempo daba la posibilidad de pensar en el futuro, de plantearse posibilidades y de desear cosas.

Esto era algo en lo que el ojimiel habia estado pensando desde que hablo con la de broche mariposa y este era un buen momento para compartirlo con su pareja, necesitaba conocer su opinión respecto al tema para poder tomar una decisión o buscar otra solución para los niños, quizás tratar de darle algún trabajo a Kiyoshi con el que pueda mantener a sus hermanos...

No, ese chico en especifico tenia que cuidarse, pues si bien habian acabado con la mayoría de los demonios aún no estaban seguros de cuantos más quedaban.

Otro tema era la herencia de la familia Kamado, Tanjirō tenia que buscar a quien pasarle sus pendientes y la danza del Dios sol, cosa que ya habian discutido con anterioridad y que no habia terminado muy bien, pues a veces se sentia un obstáculo en la vida de su amado, pero aún así Tanjirō seguia repitiendole una y otra vez que no queria a nadie más a su lado.

—Tanjirō... —llamó de manera nerviosa a su novio y este solo lo miro sonriente —Hay algo importante que quiero preguntarte.

Zenitsu no sabia porque, pero la sonrisa del burdeo se borro de su rostro y de manera rapida el ojirubi lo agarro de los hombros.

—¡Espera Zen! ¡No digas nada! —pidió de manera alterada y con las mejillas rojas logrando espantar al susodicho con su grito —¡Se supone que yo lo haga! —agregó decidido.

—¡¿EH!? —Zenitsu no estaba entendiendo nada, pero cuando vio al de aretes hunafuda arrodillarse sobre una de sus piernas las lagrimas inevitablemente comenzaron a caer de sus ojos —Tan- ¡Tanji! ¡¿Qué!?

El burdeo lo ignoro y tomando una bocanada de aire intento controlar el temblor de sus manos para así sacar del bolsillo de su uniforme una pequeña caja de madera.

—¡AGATSUMA ZENITSU POR FAVOR SE MI ESPOSO! —gritó quizás más fuerte de lo que tenia planeado para luego abrir la caja y dejar ver un pequeño y sencillo anillo de compromiso.

Zenitsu se cubrió la boca, en verdad, en verdad estaba pasando, Tanjirō le estaba proponiendo matrimonio, queria gritar, pero no podia.

Esto lo habia dejado sin palabras...



Espero disfrutarán de su lectura :3

Ya nos queda un capitulo más para terminar con esta sección, ¿qué les a parecido?

¿Tienen alguna sugerencia para la sección 4?

One-shot's. 2 [TanZen] Where stories live. Discover now