CAPITULO XIX

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Uno se dejo caer en el sofá después de colocar las bolsas de Darling en el piso, se recargo y dejo caer su cabeza en el borde.
- Voy a bañarme- dijo ella -vuelvo enseguida-.
Gamma tenia su vista clavada en el techo, en su mente resonaban una y otra vez las respuestas que la joven le había dado en la tarde:
-Físicamente no te cambiaría nada...desearía salir sin que nos juzgarán...-
Uno aun estaba sumido en sus memorias cuando la chica se dejo caer sobre el, esto lo hizo volver rápido al presente. Entonces, comenzó a observar a quien estaba en frente, tenia una toalla enredada en su cabello y otra cubría su cuerpo, sus piernas estaban alrededor de la cadera de Gamma, por lo tanto, sus pelvis se rozaban lo suficiente como para sentir los contornos de sus partes intimas.
-Perdon por la tardanza- se excuso la chica , mientras rodeaba con sus brazos el cuello de Uno -¿estas cansado?- pregunto refiriéndose a las compras.
-No- contesto -aun tengo mucha energia-
-Que bueno- agrego Darling para empezar a besarle en los labios. Al estar mas cerca, Uno pudo oler el agradable aroma que ella desprendía, pues había tallado su cuerpo en la ducha con un jabón liquido de flores y su saliva tenia sabor al helado de frambuesa que comio en el centro comercial. Uno deslizo su mano al gluteo de la chica, lo acaricio con los dedos, luego bajo despacio, siguiendo los bordes hasta llegar a los otros labios de la chica, los cuales estaban húmedos. Darling se levanto y tomo el brazo donde Gamma tenia puesto el reloj.
-¿Como funciona esto?- cuestiono. Uno no se había dado cuenta de que olvido cambiar su apariencia al estar dentro de la casa.
-Gira la perilla- indico el. Darling lo hizo y el recupero su apariencia habitual.
-¡Así es como me gustas!- enfatizo la chica. Después se acerco a el para quitarle el cinturón, estando la ropa mas floja sujeto el pantalón de las costuras, Uno se levanto un poco y así Darling lo deslizo hacia abajo, lo suficiente para dejar el descubierto las partes que quería. De nuevo ambos tomaron asiento, Gamma en el sofá y ella sobre el. Hicieron contacto visual, posteriormente reanudaron los besos, al cerrar los ojos Uno tuvo una sensación extraña, sin embargo no abrio los ojos, no lo necesitaba, una mano rodeo su miembro y otra a sus acompañantes. Primero apretó los labios, luego su compañera exhalo en su rostro.
-Mete tus dedos- ordeno -veamos quien lo hace mejor- susurro.
En cuanto el lo hizo la chica empezó a mover sus manos lentamente, Uno tuvo un espasmo que recorrió la parte posterior de su cuerpo, desde su cadera hasta sus pies. Entonces recordó que aquello era un reto, e intento cumplirlo, puso sus dedos en posición.
-¿Aquí es donde quieres que los meta?- pregunto señalando.
-Me agrada que te estés soltando-
-y a mi me gusta que seas espontanea-
Fueron las últimas frases para continuar masajeando, la chica hacia movimientos circulares con una mano y con la otra de arriba a abajo. El androide por su parte, metió dos dedos y los movía al unisono, suponía que lo estaba haciendo bien ya que de vez en cuando abría los ojos para ver a la chica, quien mordía su labio inferior con sus dientes. No paso mucho cuando el sintió que Darling estaba lo suficientemente húmeda, sin embargo, tenia el dilema de si seguir estimulandola o de penetrarla. Cuando volvió a abrir los ojos el descubrió que la chica estaba desnuda, la toalla que la cubría se había caído al suelo en algún momento. Darling puso su dedo indice en el mentón de Uno y levanto su rostro para que la viera a los ojos, luego con esa misma mano desabrocho cada boton de la camisa de Gamma, el termino de quitarse la prenda y la arrojo.
-¿Quieres que me quite todo?- pregunto el. La chica asintió con la cabeza.
-Ponte de pie- indico Gamma para retirarse el pantalón -¿como quieres hacerlo esta vez?-
-¿como quieres hacerlo tu?-
Uno se río, esas preguntas-respuestas de Darling le divertían en cierta forma.
-¿Recuerdas el último documental que vimos?- cuestiono el androide con cara seria. La chica intento recordarlo, pero aun así no logro hacerlo.
-Date vuelta...- ordeno Uno -ponte en cuatro-
-¿Que?- pregunto ella mientras su rostro se ponía rojo como un tomate.
-Ya me oiste- reafirmo Uno con tono serio -ponte en cuatro-
La chica sintió algo de miedo al escucharlo hablar de ese modo, pero al mismo tiempo le excito, pues hasta ese momento el había sido muy dócil.
-Esta bien...-dijo Darling en un tono casi tímido -solo apaga el foco-
-No...- respondió Gamma -quiero verte bien- continuo mientras se colocaba frente a ella -¿debo repetirlo?- pregunto mientras tomaba el rostro de la chica con su mano, quien no se atrevió a mirarlo directamente y solo agrego:
-No mi amor- dicho esto, la joven tomo la posición que el solicito. Uno tomo la cadera de la mujer con ambas manos, se hincó en el sofá y la acerco a el, al entrar la chica dio un pequeño salto y se quejo un poco, cuando Gamma empezó a embestirla ella empezó a hacer sonidos de placer. En esa posición el sentía como su miembro topaba con una especie de pared, se dio cuenta que había llegado mas profundo, además de que unos bellos cortos masajeaban la cabeza de su miembro. Como si eso no fuese suficiente la vista era asombrosa, el trasero de la chica lucia mas grande desde ese angulo y las embestidas hacían que se moviera cuando lo golpeaba contra su pelvis. Repentinamente Uno sintió un placer indescriptible en todo su cuerpo, tenia sus ojos cerrados cuando vio cierto tipo de chispas y perdió el control de su cuerpo unos segundos, se recargo sobre la chica ocultando su rostro en los cabellos de ella. Por su parte, la mujer estaba fatigada y satisfecha, se llevo la mano a su vientre algo sorprendida, pues por primera vez sintió como un fluido caliente recorría su interior. Ambos se acomodaron en el sofá para descansar un rato, el androide abrazo a la chica y sin decir nada dio a entender que no quería dejarla ir.

Uno se preparaba para volver a la corporación, ya estaba vestido y le había dejado escrito un mensaje a Darling avisandole que debía irse a trabajar. En cuanto salio de la casa Hedo lo llamo:
-Uno, cuando llegues no entres volando-
-¿Pasa algo doctor?-
-Atraparon a quien estaba saboteando la corporación y hay policías interrogando a los demás empleados. Cuando estés cerca usa el reloj y entra como un empleado normal, ¿entiendes?-
-Si, doctor-
Fin de la comunicación.
  Uno suspiro, sabia que seria un día largo.
 
  Al día siguiente, en cuanto estuvo libre Uno partió a la casa de Darling, aun era de tarde y la puerta estaba abierta, así que entro.
  -Estoy arriba- grito la chica sabiendo que era el.
  Cuando Gamma subió las escaleras lo primero que observo fue bolsas tiradas en el piso y algunas cajas vacías, la chica metía sacaba prendas de una maleta y en una tenia acomodados objetos para observación. El paso con cuidado sobre las bolsas y se acomodo en el sofá que era el único lugar que estaba libre.
  -¿Vas a alguna parte?- pregunto ya que ella no le explicaba nada.
  -¿No te lo había dicho?- respondió -Voy a ir a una reserva como ayudante de un investigador- explico emocionada - ¿no es genial? Quizá así sea mas fácil conseguir una beca para mi maestria-
  Como buena pareja, Uno mostró orgullo por su logro, estaba a punto de felicitarla cuando vio algo que le llamo la atención, un libro abierto, y en la contraportada estaba la foto de los escritores, entre ellos, un hombre con lentes, de cabello peinado hacia arriba que usaba una camisa blanca, Gamma sintió cierto desagrado al verlo y su mente ato cabos.
  -y...¿como es este investigador?- indagó Uno intentando no levantar sospechas.
  -Pues...es un entomologo reconocido internacionalmente...- explico Darling volteando a ver a Gamma, quien a juzgar por su expresión era claro que no había entendido.
  -Los entomologos estudian a los insectos- aclaro ella -no son mis favoritos pero no me desagradan-
  -¿Has hablado antes con este investigador?-
  -Solo una vez- respondió ella que seguía sin sospechar nada.
  -¿Es uno de los que aparece en el libro que compraste?-
  -Si- afirmo ella mientras doblaba un pantalón -¿por que lo preguntas?- pregunto mientras miraba a Uno. De repente lo comprendió y sonrió sorprendida.
  -¡Espera! ¿Conoces a Son Gohan?- grito emocionada. Gamma intento disimular, pero su boca torcida lo delató.

 

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