𝒀𝒐𝒖 𝑴𝒖𝒔𝒕 𝑳𝒊𝒗𝒆 || Chaennie

17. Stay with me

10-11-2022

22:54 P.M

— ¡Rápido, no podemos permitir que siga libre!.

— ¡Si señor!—, respondió el acólito.

—Tiene que estar aquí... no pudo haber ido lejos. ¡Sigan buscando!

Nadie era capaz de entrar en el parque de Seongdong-gu por la medianoche, solo miembros de la seguridad de Seúl como los policías, investigadores, uno que otro ciudadano borracho y también... cazadores de criaturas sobrenaturales. Un grupo de 8 hombres se encontraban vagando en cualquier rincón de aquel amplio sitio acompañados de sus linternas con sus armas de fuego. Algunos caminaban por medio del riesgoso bosque, otros por las praderas, y otros simplemente accedían buscar por el sendero del parque. Todos tenían un mismo objetivo; encontrar un lobo estepario solitario que había sido ubicado por el gremio general.

— Señor...—, comunicó uno de ellos al líder del grupo a través de la intercomunicación de sus cascos. — Ya hemos estado rondando por todo el bosque y el parque por más de 3 horas, es muy probable que no se encuentre aquí.

— Usaron los altavoces con aullidos de lobo?—, respondió el joven ajetreado de esa inservible búsqueda.

—... ¿Altavoces?...Se refiere a...

— ¡ESTÚPIDOS!—, vociferó fuertemente en el casco, aventando su linterna contra el suelo cegado de la frustración de sus novatos compañeros. — ¿¡Acaso tienen mierda en la cabeza!? ¿¡Cuantas putas horas estuvimos buscando a un insignificante omega para que ni siquiera hayan puesto un solo artefacto por todo el jodido parque!? Si ellos escuchan esos aullidos, pensarán que hay una manada cerca y no dudarán de buscarlo, ¡Así es como los engañamos! ¡Pero esto solo me puede pasar a mi con un grupo de simios idiotas!

— Disculpe señor... nosotros no... no teníamos idea...—, vergonzosos, uno por uno interrumpió la llamada para disculparse. El líder no tuvo más alternativa que tomar una postura más comprensiva, después de todo... liderar a un grupo de nuevos había sido su castigo por dejar escapar ese omega que estuvieron buscando hace un mes y medio.

— Miren, será mejor que encontremos pronto a esa perra. No quiero tener que lidiar por otro castigo del Señor Kim y la Señorita Jennie. ¡Sigan buscando y dejen altavoces en cada rincón!

—... ¡SI SEÑOR!

Mientras el desorganizado grupo se desesperaba, corriendo y buscando por cada zona abierta del parque, una silueta femenina observaba todo el espectáculo a través de una ventana y desde lo más alto de un edificio.

—... Idiotas...— murmuró la joven de forma cáustico entre dientes y un chasquido con su lengua. Satisfecha de su pequeña contemplación, se sentó nuevamente en su escritorio a beber de un vaso de su delicioso whisky. La noche era hermosa, una preciosa luna llena iluminaba fuertemente la ciudad, brindándole una de las mejores imágenes nocturnas dignas de admirar.

Mientras bebía complaciente su bebida escocés, un golpe en su puerta llamó su atención. Antes de que golpeara, ella ya había auspiciado de quién se trataba.

— Adelante, puede entrar—, permitió el permiso mientras se echaba en su más grande sillón de lujo.

Una mujer de uniforme había entrado a la habitación trayendo en una mesa pulcra de 4 ruedas, una variada muestra de deliciosos aperitivos en una charola.

— Buenas noches, aquí traigo su orden de Room Service.

— Muchas gracias, puedes dejarlo y retirarte—, le respondió de mala gana a la mesera.