Transmigré al cuerpo del maestro villano y mi discípulo me odia

Capítulo 164

Transformación

Kaká abrió los ojos y sintió su cuerpo lleno de fuerza. Trató de mover la cola, pero descubrió que algo andaba mal.

Miró sus garras y descubrió que habían tomado la forma de manos humanas.

Kaká tocó sus orejas y descubrió que habían sido reemplazadas por suave cabello humano.

Kaká miró a su alrededor y descubrió que Zhuo Hua todavía estaba tirado en el suelo.

No estaba acostumbrado a la nueva forma de caminar después de convertirse en humano, por lo que tropezó hacía Zhuo Hua.

"¿Maestro?" Kaká sacudió a Zhuo Hua.

Zhuo Hua abrió los ojos y vio a un joven que parecía tener diecisiete o dieciocho años. Un joven desnudo.

"Kaká", Zhuo Hua no estaba confundido. Sabía que se trataba de Kaká.

Kaká era hermoso, aunque no era apropiado describir a un adolescente como hermoso, pero era la única palabra que podía describir a Kaká.

Las orejas en la cabeza de Kaká y la cola detrás de su trasero saltaron. Kaká movió la cola con entusiasmo, "Maestro, ahora puedo transformarme".

"Ponte ropa primero". Zhuo Hua sacó su propia ropa del espacio y ayudó a Kaká a ponérsela. Kaká era pequeño y la ropa de Zhuo Hua era demasiado grande para él, los dobladillos de la ropa cayeron al suelo.

Esto fue lo mejor que pudieron hacer. Kaká no podía salir desnudo.

Kaká agitó su mano, él y Zhuo Hua desaparecieron. 
La plataforma de sacrificio se hundió lentamente bajo tierra, esperando la próxima victoria del tigon.

Al segundo siguiente, Zhuo Hua y Kaká aparecieron en la plaza del palacio. Huan Feng y el élder Huan Shui han estado esperando aquí durante mucho tiempo.

Después de que apareció Kaká, Huan Feng y Huan Shui se arrodillaron y se inclinaron ante Kaká. "Su Majestad, bienvenido".

Los soldados detrás de ellos también se arrodillaron. "Su Majestad, bienvenido".

Kaká dio un paso adelante y ayudó a Huan Feng y Huan Shui a levantarse. "Anciano, no tienes que inclinarte así".

Huan Feng y Huan Shui se pusieron de pie, al igual que los soldados detrás de ellos.

“Su Majestad, el clan ha estado esperando fuera del palacio durante mucho tiempo. Póngase la túnica de coronación y acepte el respeto del clan”, dijo Huan Feng.

"Maestro Zhuo Hua, por favor vaya a cambiarse de ropa".  Huan Shui estaba inusualmente serio, llevó a Zhuo Hua y a Kaká al vestuario.

El palacio fue construido de piedras. Aunque no era tan magnífico como un palacio dorado, su aire era intimidante.

Todos los tigones, transformados o no, se reunieron fuera del palacio, parados en ambos extremos de la calle y preparándose para dar la bienvenida al nuevo rey del clan.

La puerta del palacio se abrió lentamente y aparecieron dos figuras blancas.

En un instante, todos los tigones se arrodillaron ante Kaká, "Saludos al rey".

Kaká asintió levemente.  "Levantarse."

Solo entonces los tigones se pusieron de pie y miraron a su nuevo rey.

"Felicidades hermano." Una voz familiar de repente llamó la atención de Kaká.

Kaká miró hacía un lado y vio que había algunos adolescentes de su edad. El líder parecía familiar, era bien parecido con sus rasgos afilados. Si sus ojos no fueran tan sombríos, que estropeaban su rostro, sería admirado por las bestias hembras.

"¿Hermano?" Kaká adivinó quién era por la mirada y la voz familiares.