El emperador de Kou, manipulado por la emperatriz Gyokuen Ren, puso sus ojos en la tierra de Joseon, un país rico en muchos términos, desde cultural hasta en oro y plata, pero también en conquistadores de mazmorras, lo que llevo a declararse imperio y mandar al diablo al imperio Kou, considerándose su igual y dejando de pagar impuestos. Un imperio no debía pagarle impuestos a otro imperio.
— Esto no se puede tolerar, el rey de Joseon se pasó de la raya – dijo Gyokuen
— Tienes razón, mi querida emperatriz, Joseon pertenece al imperio Kou y volverá al imperio Kou – dijo Koutoku Ren
— Pero primero hay que eliminar a la familia Yi
— ¿La familia Yi?
— Ese infeliz de Sihoom y su fulana de Kina, y toda su ingrata familia, los Yi, no dejaran el poder tan fácilmente, no soltaran el trono así que hay que eliminarlos
— ¿Y cómo lo planeas?
— Un incidente en su palacio, mandaremos soldados a matar a cada príncipe y sirviente, sobre todo a los príncipes varones
— ¿Los...príncipes varones?
— Hay 3 príncipes que pueden heredar el trono y 1 es un bebé, las princesas no cuentan
Gyokuen manipulo al tonto emperador Koutoku para mandar asesinos al palacio del loto, el hogar de la familia Yi, gobernantes de Joseon, pero cometieron 2 errores: la primera subestimar a los joseonicos y la segunda que Sinbad, el rey del nuevo reino de Sindria, estaba de visita diplomática.
Hace poco la emperatriz Mizuko, dio a luz a mellizos, una niña a la que llamaron Yoo-Na y un niño al que llamaron Tae-Wa. Con ellos los emperadores de Joseon ya tenían 8 hijos, muy bonitos, pero Sinbad quedo impresionado con una vivaz y dulce princesa, la princesa Cheo-Rin, la cual era solo 3 años menor que Sinbad y lo ignoraba, ya que le habían contado que Sinbad era un mujeriego y podría deshonrarla.
— Hola princesa – dijo Sinbad
— Rey Sinbad – dijo Cheo-Rin a modo de saludo
— Tu país es fascinante, te felicito
— ¿Por qué?
— Quiero conversar contigo, princesa, creo que tenemos mucho en común
Antes que la princesa Cheo-Rin lo rechazara o que Ja'far lo regañara, los sirvientes y guardias llegaron, mal heridos diciendo que habia asesinos en el palacio. A pesar de los intentos de salvarse los asesinos mataron a 2 de los príncipes, y estuvieron a punto de matar al principito Tae-Wa, pero el general Park Ao lo inpidio, la emperatriz Mizuko le entregó al bebé al general Park Ao, el mal humorado general del ejército de Joseon.
— Por favor, cuídalo y tráelo a Joseon cuando sea el momento a decuado, no dejes que esas hienas de Kou lo toquen – dijo la emperatriz Mizuko
— No se preocupe mi emperatriz, lo protegeré con mi vida y lo traeré a Joseon cuando cumpla los 18 años – dijo Park Ao
— Gracias...
Luego la emperatriz le puso un colgante de jade y se dirigió a su hijo.
— Adiós mi cachorro de tigre, conviértete en un joven fuerte y sabio, tu eres el futuro de nuestro imperio – dijo la emperatriz Mizuko
— Emperatriz...
— Te confió mi corazón, protégelo
Ao huyo con el bebé y subió a un barco rumbo al Reino de Cartago. Por otra parte, los 12 asesinos fueron atrapados y ejecutados, y sus cabezas fueron exhibidas en las murallas de la ciudad, mientras sus narices y orejas fueron mandadas al imperio Kou, con una carta que decía que el emperador y la emperatriz de Kou son, desde ahora, personas non-gratas en el imperio Joseon, aun así, no era el momento de una guerra.
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La guerra de Joseon, un amor cruel
FanfictionKouen jamás creyó en los amores imposibles, para él eran solo cobardes e idiotas que no sabían pelear por su ser amado, pero se tendrá que comer sus palabras cuando conozca a su enemiga, la princesa Yu-Rim Yi de Joseon, de la cual se enamora, pero e...