I N V A D I D O S [Matsuoka Rin] AU

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-¡Te dije que era mejor regresar aún cuando había luz!-regañó Ryugazaki a su capitán.

-Silencio, no tiene sentido que nos pongamos a discutir ahora-bramó Yamazaki.

Capitán chasqueó la lengua y vio a Uozumi dormido sobre la espalda del más alto. Sentía que era su culpa haberse retrasado más de lo normal, a pesar de que le habían pedido ayuda a Mikoshiba y a Shigino aún estaban algo lejos de la base.

Tanto el chico de ojos violáceos, Shigino, y el de cabello anaranjado, Mikoshiba, se encontraban escondidos en los túneles que había debajo de la calle.

-¿Estás seguro de que por aquí no viene nadie?-preguntó Shigino, un poco desconfiado.

-Sí, nunca he visto gente por aquí, además siempre que quiero encontrar un escarabajo nuevo vengo por aquí-sonrió, completamente entusiasmado.

-¡Qué! ¿P-Por aquí hay escarabajos? ¡¿Por qué no lo dijiste antes?! S-soy alérgico a los insectos...-el chico más alto comenzó a ver a su alrededor y a rascarse los brazos con rapidez, como si realmente los insectos lo estuvieran picando.

-No seas idiota, por aquí no hay más insectos que moscas... ¡ah, también hay ratas! No son insectos así que no deberías tener problemas con ellas ¿verdad?-Mikoshiba siguió avanzando mientras miraba las tuberías, algunas tenían marcas numéricas que había hecho él mismo para no perderse allí dentro.

Shigino se había quedado petrificado, sin duda prefería la picadura de un insecto a que una rata lo mordiera o algo. Comenzó a caminar rápido cuando vio que el otro chico ya estaba demasiado lejos y que había doblado a la derecha.

Ryugazaki le avisó a su capitán cuando vio a Mikoshiba salir debajo de una de las alcantarillas. Primero bajaron Capitán y Nitori quienes ayudaron a bajar a Yamazaki que todavía llevaba a Uozumi en su espalda.

-¿Cómo está?-preguntó Shigino, mirando al chico inconsciente.

-Estará bien, pero tenemos que apresurarnos-respondió Nitori.

Esa noche estuvo muy tranquila y pudieron llegar a la base sin problemas pero esa tranquilidad que había en las calles era lo que más inquietaba a Capitán.

-¡¿Qué le pasó?!-chilló la pelirroja, Gou, asombrada al ver a Uozumi en un estado deplorable.

-No importa eso ahora, despejen el área de Nitori que tenemos mucho trabajo que hacer-Capitán cargó a su compañero y Nitori preparó el alcohol etílico y las gasas, tendrían que asegurarse de que Uozumi no tuviera nada grave.