Amor ranchero, por Pedro Infante y Jorge Negrete

Sin Problemas

Desafortunadamente ya no podían verse tanto, debido a que Jorge estaba muy metido con la grabación de su película.

Se veían cada semana o cada dos y durante ese lapso, Pedro veía... diferente a Jorge.

Se veía realmente más cansado que antes y casi no estaba de ánimo para muchas cosas.

-¿Cómo cuánto queda de filmación?

-no pos quién sabe, a lo mejor otras dos semanas.

-¿Todavía? Pero la otra vez me dijo que ya iban a acabar. Como que ya duró mucho la grabación ¿No?

-pos si pero se está retrasando mucho la filmación.

-¿Y eso?

-pos ya sabes, cosas de producción y eso.

En realidad la causa del retraso de la película era otra, pero Jorge no quería decírselo a Pedro, pos para no preocuparlo.

-oye mano ¿E Irmita?

-se fue con una amiga o algo así. Yo creo llega en la nochecita.

-a pos bueno, osea que estamos solitos.

-por un ratito, si.

Pero nomás se quedaron ahí sentados en el sillón mientras charlaban acerca de la música y cosas así.

-oiga Jorge ¿Le puedo hacer una pregunta?

-si mano, pregunta.

-pos imagínese que no estuviéramos casados ¿No? Sin chiquillos ni nada.

-¿Si?

-¿Qué seríamos?

-lo que intentas preguntar es si hubiéramos podido estar juntos en otra situación ¿Cierto?

-ándele eso mero.

-¿Qué tú no?

-no, que diga, si. Claro que si Don Jorge. Ya sabe que yo a usted lo quiero mucho.

Jorge adoraba ver como aún Pedro se seguía poniendo nervioso con él.

-ay mijo, pero me sigues hablando de usted.

-pos diciéndome mijo no me ayuda mucho.

-pos ya te dije, yo ya estoy viejo. Tu todavía estás muchacho.

-ya ve, por eso mismo le hablo de usted.

-bueno, bueno. ¿Y tú como estás? Aveces siento que hablo más de mi de lo que debería.

-no, no se preocupe Don Jorge. Pos ahí mas o menos la mera verdad. Con mis achaques, ya sabe.

-ay mano. La mera verdad cuando te conocí no creí que fueras así en realidad.

-¿Cómo? Dígame en qué sentido que ya ve que luego se dicen un chorro de cosas.

-pos que siempre te veía sonriendo y viéndole lo bueno a las cosas.

-oh, pos es lo que uno hace para intentar sentirse mejor. Además, pos prefiero que me vean sonriendo y que me recuerden por eso. No quisiera que luego digan que era un gruñón.

-ora ora, no tires -indicó Jorge frunciendo el ceño pero riéndose a la vez.

-pos por ahí dicen, que si le queda el saco pos se lo ponga porque luego hace frío.

A Pedro de poco a poco le iba ganando el sueño y luego de un rato se quedó dormido.

Le sucedía algo muy lindo cuando estaba con Jorge y eso era que le daba mucho sueño.

De cierta forma sentía que a lado de este no podría pasar nada malo, y si pasaba pues mínimo estarían ambos juntos. Se sentía a salvo.

-ay mano, la verdad no te pude contestar bien tu pregunta porque pos sabes que no me expreso demasiado, pero pos si. Ya en serio si te quiero mucho y yo se que no podremos estar como quisiéramos pero habrá algún momento en el que podramos estar juntos. Ya sea en el cielo, o mero abajo hechando chispas los dos, o en el limbo. O si existe pos en otra vida -dijo Jorge susurrando aún sabiendo que Pedro estaba dormido y no lo escuchaba.

Cuando abrieron los ojos, vieron que ya eran como las 10 de la noche.

Vieron que traían una cobijita encima, posiblemente puesta ahí por Irma.

-nos quedamos bien dormidos mano.

-nosotros siempre nos andamos quedando dormidos la verdad -afirmó Pedro bostezando.

-pos creo que tengo que irme.

-pero 'ta re oscuro afuera.

-nah no pasa nada mano. Ahí me saludas a Irma.

Y llegaron a la puerta, donde se despidieron de un abrazo.

-ay, casi olvidaba mano. Después de la grabación voy a Los Angeles unos días, traigo unos proyectos por'ay.

-pos ni hablar, espero nos veamos pronto -le dijo Pedro mientras lo abrazaba.

-ay mano, todavía ni me voy y ya me extrañas -afirmó Jorge riendo.

-cuídese esa salud Don Jorge, no trabaje de más.

-estaré re bien, no te preocupes -le dijo mientras le daba un beso en la frente.

Yo se que dije que iba a publicar mañana, pero me inspiré muchísimo para este capítulo 😿💜.