La incomodidad parecía estarlo asfixiando muy lentamente, como si el tiempo se hubiese detenido a su alrededor haciendo que los minutos y segundos se convirtieran en horas eternas de las que no podía escapar, las miradas vigilantes y nada discretas estaban sobre él a cada momento. Cada paso dado por los pasillos de la hacienda eran constantemente vigilados por los empleados de la misma.
Cada persona que encontraba a su paso le miraba de manera inquietante, llena de curiosidad y al mismo tiempo con miedo o repulsión, evitando su cercanía o el dirigirse a él por mucho tiempo. Trataba de no darle importancia dado que estaría ahí un año, y uno muy largo y tedioso dadas las circunstancias y la poca aceptación que le daban los empleados de la hacienda. Tampoco quería ser querido en ese lugar por qué al final de todo se iría lejos, muy lejos de cualquier lugar del país, quizás al extranjero si tenía suerte y dinero para ello.
No salía de su habitación la mayor parte del día evitando encontrarse el hermano de su jefe o su mismo jefe; el desayuno, la comida y la cena la subían a su habitación sin problema alguno por lo que no tenía razón por la que bajar y ser visto despectivamente por los empleados, mismos que se alejaban cuando lo veían, rara vez salía de su habitación tratando de matar el aburrimiento que lo asfixiaban las cuatro paredes del cuarto.
Jamás salía a fuera, no visitaba los jardines, ni las caballerizas o los campos, evitaba ver más rostros de repulsión hacia su persona, los comprendía totalmente y estaba bien con ello dado el lugar en el que se encontraba y la ideología de la gente ahí, por eso mismo los evitaba, evitaba sentirse mal y juzgado por sus preferencias, no soportaría escuchar comentarios llenos de odio y repulsión en esos momentos. No cuando se encontraba preocupado por la salud de su familia.
Anhelando saber su estado de salud de su madre y de su pequeño hermano.
— ¡Taehyung! — detuvo sus pasos asustado al escuchar su nombre, el eco siguiendo la voz del hombre que no deseaba ver. — Ven, come conmigo.
Indeciso se acercó con lentitud a la mesa del comedor donde el señor Min se encontraba comiendo. La enorme mesa de comedor fácilmente podría ser compartida al menos por treinta personas, haciendo que la sola presencia de ese hombre se viera solitaria.
Al sentirse se sintió indefenso al estar frente aquel hombre que no se merecía las mentiras de su hermano. Las empleadas colocaron los platos con la comida no pidiendose negar al ver lo rápidas que fueran, dejándolo solo con el señor Min.
— Es agradable comer con alguien más en la mesa. — no tenía hambre, últimamente rara vez se sentía hambriento, tal vez se debía a la preocupación y todo lo que conlleva el estar ahí. — Es difícil que Yoongi de siente a comer conmigo, creí que contigo sería diferente, parece ser que no.
Picoteo lentamente la comida evitando mirar a la cara a ese inocente hombre que intentaba llenar el espacio silencio alrededor de ellos. No deseaba mentirle a la cara.
— Es por el trabajo.— comentó evitando explicar demás, llevaba pocos días ahí y la comida parecía ser diferente cada día, demasiado apetitosa y diferente a lo que solicita comer en la ciudad y apesar de ellos no se atrevía a comer demás por la preocupación.
— Parece ser que si, no hay que no deje los documentos de lado. — asintió después de un largo rato.
El silencio era incómodo pero al mismo tiempo familiar para su tranquilidad, de esa forma evitaba una plática de la que no tenía intención de interactuar. Se supone que no debía estar ahí; bajo solo con la intención de subir a su habitación una jarra de agua, nada más.
— No hablas mucho ¿Cierto?— dejo de la lado el tenedor no sabían que debía responder ante ello.
Naturalmente no se comportaba de esa manera; se recordaba alegre y amigable con todo el mundo, nada comparado a como se estaba comprando ahora mismo. El fingir ser algo que no es y presentar una fachada que no existía le cansaba y drenaba cada acción de su cuerpo.
Si habría la boca y entraba en confianza con ese hombre terminaría revelando la verdad de tras de todo ese circo y su jefe lo mataría.
— Tranquilo, no tienes que obligarte a ser algo que no quieres. Lo entiendo... Solo estaba tratando de conocerte más, mi hermano no hablo nunca de ti antes de casarse y me intriga conocerte, saber de ti y de tu familia, ahora somos familia y me gustaría ser cercano a ti. — la culpa inundó su pecho odiando lo malo que era para mentir y mal ser humano en en que se estaba convirtiendo por culpa de su jefe.
— Es está la primera vez en mucho tiempo en que nos presenta una pareja, un esposo ciertamente. No mentiré al decirte que la noticia me tomo por sorpresa, ¡Mi hermano casándose con un hombre! Fue sorprendente pero me tranquiliza y alegra saber que por fin tiene a alguien en su vida con el cual pueda ser feliz.
El remordimiento se instaló en su pecho conforme el tipo frente a él hablaba de toda la alegría y felicidad que sentía al ver a su hermano casado y ' enamorado' sin importar que fuera un hombre.
Al estar ahí debía fingir amor y felicidad por ese desalmado hombre que estaba convirtiendo su vida en un infierno.
— ... ¿Te gustan los caballos?
— Si, aunque nunca he visto uno en persona.—se ánimo a responder para dejar de sentirse culpable de mentirle a todo lo que le decía ese hombre.
— ¿En serio? — asintió en respuesta retomando su comida. — ¿Te gustaría verlos?
— Si, pero no quiero causar molestías..
— No será ninguna molestia, sino tienes planes podríamos ir a verlos a las caballerizas mañana. — propuso el hermano de su jefe tomándolo por sorpresa. —Esta tarde ya tengo planes.. el trabajo en la hacienda nunca termina, más ahora que se adquirieron nuevas tierras para las siembras.
ESTÁS LEYENDO
Contrato♥ Yoontae
FanfictionContrato: Es un acuerdo de voluntades, verbal o escrito, manifestado entre dos más personas con capacidad que se obligan en virtud del mismo. #Yoontae #Yoongi #Taehyung #Traición #Venganza #Amor %Historia original% %100% mía, prohibida su adaptación...