somos hermanastros (EN PROCESO Y EDICIÓN)

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Hoy íbamos a mudarnos a la nueva casa, la verdad es que yo no había visto esa casa, ni Tom ni Paddy. Solo sabíamos que tenía el espacio suficiente para todos nosotros y dos bebés.

Estaba volviendo a empacar mis cosas en la maleta que había traído aquí. Tom me había comprado cosas en estos días, cómo ropa más ancha, en una tienda que habíamos visto cerca de aquí, entonces tenia que ver la manera de empacar todo.

Nikki ayer se había quedado conmigo, empacado los platos, tazas y cosas delicadas para poder llevarlas hoy. Menos mal que ellas tenían un carro no tan grande pero tampoco tan pequeño, por lo que entraban estás cajas en la maletera y como somos pocos cada uno puede llevar una maleta en sus piernas. El punto es que todos nos íbamos a acomodar para poder llevar todas las cosas de una vez y no demorar más.

Paddy llevaba dos maletas, con su ropa y sus juguetes y cosas demás, Nikki había ido con Marie hace unos días y habían llevado unas maletas de ellas dos, por lo que, ya no tenían mucho que llevar, solo llevaban una maleta por cada una. Tom y yo llevábamos dos maletas y lo demás eran cajas.

Al acomodarnos nos demoramos un siglo pero por fin pudimos. Eran en total siete cajas para llevar, entonces, pudimos meter 4 cajas en la maletera y nuestras tres maletas, de Paddy, Tom y mía; iban a nuestros pies y las cajas en nuestras piernas, Marie adelante llevaba las dos maletas de ellas dos, y así nos fuimos a la nueva casa.

Al llegar era en una residencia muy tranquila por lo que habían comentado Ellas, eran cuadras con casas muy lindas y muy grandes, los árboles estaban muy bien cuidados y, en sí, todo se veía muy lindo y tranquilo.

Nikki paro el carro en frente de una casa de color blanco y negro con un pequeño jardín en frente, tenía tres pisos y una terraza muy amplia. Bajamos y decidimos primero entrar a ver para luego bajar las cosas.

Al entrar, vi que la sala era muy grande y amplia también, eran cuatro sofás que apuntaban a un gran televisor, los sofás eran blancos, se veían muy elegantes. Justo frente a la puerta había una puerta corrediza de cristal que daba a un jardín muy lindo con trampolín y una piscina con jacuzzi, al otro lado de la sala estaba la cocina que tenía una barra de color negro y los reposteros eran blancos frente a esta cocina había una mesa pequeña.

Las escaleras estaban a la mano izquierda y eran de color madera al subir habían tres puertas y un pasadizo cerrado con cuadros. Nikki nos dijo que ahí estaba la habitación de ellas y de Paddy, la otra puerta era un baño. Las escaleras seguían llegando al tercer piso, habían ahí tres puertas igual. Un baño y dos habitaciones que sería una de Tom y mía y otra para los bebés. Llegamos a la terraza y tenía unos sillones muy lindos, de color negro, habían plantitas y se podía ver el atardecer desde ahí. También tenían un aparato que era como para simular una fogata y una parrilla.

La casa era muy linda y amplia, tenía un aire de tranquilidad y relajante.

Al final bajamos todo y dejamos todo en la sala, antes de ir a acomodar nuestras habitaciones Nikki quiso hablar con nosotros.

—a ver chicos, quiero que entiendan que aquí es su casa, no están por un momento nada más, aquí van a vivir ¿Si?

—Gracias Nikki, de verdad que la casa es muy linda.

—Lo se, y es muy tranquila y grande, por eso la elegí. Ahora, ese tercer piso es solo de ustedes ¿Me dejó entender?

—¿A qué te refieres, mamá?

—Que el tercer piso es completamente de ustedes, tiene un baño y la habitación para los bebés, lo único es la cocina y la sala que están aquí abajo

—Gracias mamá por haber pensado en nosotros al comprar está casa —se abrazaron

—No es nada, está casa la elegí hace unos meses y se hizo más perfecta al saber que venían con nosotros. Desde el principio yo tenía pensado traerlos a vivir aquí a ti y a tus hermanos, para que tu padre este tranquilo con Isabella pero bueno, las cosas se dieron así por una razón. Ahora vayan a desempacar para ir de compras

Y así fue, subimos a desempacar y al entrar quedé enamorada de esa habitación, era una cama de dos plazas, super grande, con un balcón que daba al patio, unas mesitas de noche y una armario súper grande al otro lado.

Empezamos a sacar las cosas, la ropa principalmente y acomodamos nuestras cosas en el baño también.

Entramos a la siguiente habitación y era casi igual solo que está tenía una cama más pequeña y en vez de un balcón era solo un ventanal.

Pues era tan amplia para que entrara todo para dos bebés.

Al terminar de empacar bajamos y Marie dió la idea de ir a comprar comida y algunas cosas para la casa todos juntos. Fuimos al supermercado que estaba súper cerca de la residencia.

—Bueno vamos a separarnos, Marie y Pad, vayan por comida y Tom, Liv y yo vamos a ver algunas cosas para la casa.

Fuimos al área de electrodomésticos, compramos una waflera, licuadora y algunas cosas más.

Al ir viendo llegamos al área de cosas para bebés. Nikki se acercó rápidamente al encargado del área.

—Buenas tardes, de casualidad ¿Tienen cambiadores de bebes aquí?

—Buenas tarde, bienvenidos. Si, aquí tenemos, vengan.

Lo seguimos y llegamos al área de los cambiadores y las cunas, tenían desde cambiadores super grandes y caros hasta los más baratos.

—Por aquí pueden ver qué tenemos este, es un cambiador con cajones incluidos para las cosas del bebé. Y tenemos este que es para poner encima, se podría decir que portátil.

—estan muy lindos —pense en voz alta

—¿Te gustan? —pregunto Tom

—Si, pero son muy caros.

—ese no es el problema, disculpa ¿Tienen cambiadores para dos bebés?

—si, por aquí están los que son para dos bebés, tienen un espacio un poco más grande, ya que, hay ocasiones donde los bebés necesitan estar juntos. Mucha gente que viene aquí lo encuentra como una tontería porque dicen "puedo cambiar a uno primero y el otro luego" pero en realidad no es solo por eso, también es mayor comodidad.

—tiene razón, tienen modelos ¿Verdad? —Nikki era la que preguntaba y Tom y yo solo escuchábamos

—tengo igualmente, con cajones y el portátil

Obviamente estos eran mucho más costosos que los otros. Yo de verdad que iba a necesitar eso pero no quería gastar y más si están comprando una casa recién

—¿Podemos hablar por allá?

—si dígame —y se alejaron un poco

—¿Que sucede, linda?

—No quiero que tú mamá compré eso, es muy costoso Tom. No podremos pagarlo

—Tranquila, seguro es un obsequio de ella. No te preocupes por eso

—es que no quiero que sean una carga para ellas, no quiero que vean necesario comprarnos todo.

—Estoy seguro que no es así, ya hablaré con mamá, no te preocupes ahora ¿Si?

—Esta bien