Lía Weasley

Capítulo 60 Poción para abortar

-Necesito un favor- Cristel entro al cuarto interrumpiendo la lectura de Lía.

-¿Qué pasa?- Lía marco donde iba y cerró el libro.

-Necesito que prepares algo para mi, lo pediría en la enfermería , pero le escribirían a mi madre y ella me mataría.

-¿Qué necesitas?

-Una poción para abortar.

-¿Estas embarazada? ¿de quien?

-Creo, tengo un atraso de 3 semanas, me he cuidado, pero si la poción no esta perfectamente preparada hay una posibilidad de quedar embarazada- Lía se volteo y miró el despertador junto a su cama.

-La cena esta por empezar la preparare después de eso, me tomara unas dos horas.

-¿Lo harás? Oh Lía eres la mejor amiga del mundo.

-Con una condición.

-Lo que quieras

-La prepararé, pero hablarás con tu mamá y le pedirás que te compre la poción en un lugar confiable, no voy a estar preparando la poción cada vez que pases un susto.

-Prefiero compartir celda con mi padre.

-Bien, apostare con Marcus cuando tiempo aguantas sin intentar matarlo- Lía se volvió a acostar despreocupada y tomó su libro para volver a su lectura.

-Esta bien, pero lo haré al salir de vacaciones quedan unas semanas.

-Esta bien-Lía guardó su libro de teoría de las pociones y sacó uno de pociones medicinales intermedio, para buscar los ingredientes de la poción- solo me falta el acónito, debería haber en el armario de Slughorn, la chica comenzó a buscar al fondo de su baúl y sacó una pequeña piedra.

-Polvo peruano, quise comprar en la ultima salida a Hogsmeade y ya no quedaban.

-Ventajas de ser la sobrina favorita de los gemelos, si algo sale mal este es nuestro as bajo la manga, espero que Slughorn no tenga hechizos difíciles para cerrar sus puertas.

-Hola chicas, ¿irán a cenar?- Shenna entro al cuarto, con su habitual sonrisa - yo me muero de hambre.

-Si, con Cristel íbamos al gran comedor.

-Genial, vamos juntas, solo vine por una chaqueta mas abrigada.

Las tres chicas se dirigieron al gran comedor y tomaron asiento al comienzo de la larga mesa, la pelirroja busco a su novio en la mesa de ravenclaw, lo encontró sentado junto a sus amigos riendo en medio de la mesa.

-Ya vuelvo- Cristel le lanzo una mirada para que no la dejara sola con la chica, no era muy difícil de saber que a Cristel no le agradaba mucho la chica.

-Hola linda, ¿qué pasa?

-Hola, ¿podemos hablar?

-Claro, hablamos afuera- la chica asintió y salieron del gran comedor -¿de qué quieres hablar?

-Me ha respondido la carta.

-¿Charlie?- Lía asintió -¿qué te ha dicho?

-Ha aceptado, vendrá a buscarme a la estación, pero tengo miedo, las cosas habían mejorado, nos estamos llevando bien y no quiero retroceder. No se como se lo tome, yo..yo no quiero estar sola de nuevo- Lía no sabia en que momento había comenzado a llorar.

-Hey linda, tranquila- Marcus tomo su rostro y comenzó a limpiar las lagrimas que caían -todo va salir bien, no vas a volver a estar sola, me lo has dicho a mi y no he ido a ningún lado, Charlie no te va a dejar -Marcus acercó a la chica a su pecho y la envolvió en sus brazos -vas a ver que todo va salir bien.

-Gracias.

-¿Porque me agradeces?

-Por quedarte a mi lado.

-Te dije que siempre iba a estar para salvarte.

(...)

-¿Estas lista?

-Si, usaremos el encantamiento desilusionador para que no nos vean entrar, si alguien nos descubre lanzamos los polvos y corremos por los pasillos, no corras hacia la sala común.

Cristel asintió y ambas chicas se dirigieron a la salida de su sala común, antes de salir del pasillo de las habitaciones Lía le lanzó el encantamiento desilusionador a Cristel.

-Si alguien pregunta tengo rondas -la chica cruzó la sala común, cuando Campbell la interrumpe.

-¿A donde vas Weasley?

-Tengo rondas- sin decir nada más la chica salió de la sala común, cuando sintió que Cristel tomaba su brazo se lanzó el encantamiento a ella misma y fueron al armario en el que solían usar como almacén para ingredientes no tan fáciles de encontrar.

-No se ve, ni se oye nadie.

-Alohomora- como esperaban el encantamiento no funcionó -aberto- esta vez el encantamiento si funcionó, y solo quedo una pequeña capa de polvo, Lía sopló y la manilla quedo como si nada.

-Brillante, ahora vamos antes de que nos descubran.

-Sube y ve si esta arriba, yo buscaré en los estante de abajo.

-Aquí hay de todo como vamos a encontrarlos.

-Lo tengo, vamos- justo en ese momento se escucharon pasos en el pasillo, Cristel estaba bajando las escaleras, cuando tropezó y derribó algunos frasco, cuando los pasos sonaron más rápido Lía abrió la puerta y lanzó los polvos peruanos, tomó la mano de su amiga y salió corriendo por los pasillos.

-¡¿Quién anda hay?!- de todos los profesores en hogwarts, habían corrido con la mala suerte de que fuera Mcgonagall quien recorriera los pasillos.

La pelirroja agradecía que nadie había descubierto como contrarrestar los polvos peruanos, los gemelos podían ser unos genios cuando querían. Se detuvieron en el pasillo fuera de las cocinas.

-Recuerda me no volver a hacerte favores.

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Espero les allá gustado el capitulo, el próximo va estar narrado del punto de vista de Charlie y veremos su ración.