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Un fuerte mareo lo había atacado justo cuando estaba despertando, no tenía idea de la pésima sensación que estaba cargando. Con pesar abrió los ojos lentamente, tratando de acostumbrarse a la luz que estaba en el espacio, luz blanca y fuerte, la vista era simple una pantalla frente a una pared igualmente blanca. Sus ojos fueron hasta su costado donde vio a sus padres con rastro de lágrimas en los ojos, intentó hablar pero falló y fue cortado por su padre corriendo a la salida.

— ¡Doctor! ¡Jackson ha despertado! — escuchó los gritos y regresó la vista a su madre.

— Tranquilo, mi niño, tuviste un accidente ahora el doctor vendrá a ver que todo esté bien.

Asintió comprendiendo y apuntó la botella de agua que había a su lado, su garganta estaba seca y cada que intentaba hablar dolía. Estaba a punto de pronunciar palabra cuando el ruido de la puerta nuevamente interrumpió y no entró el doctor.

— Jackson... ¡despertaste, amor! — tal vez su rostro expresaba mucho porque el chico detuvo su marcha. — ¿Q-qué pasa?.

Aclaró su garganta y habló. — ¿Quién eres?.

Antes de que el chico pudiera contestar alguien más habló. — Tuvo una conmoción, tal vez no recuerda algunas cosas de su vida, necesito revisar que todo se encuentre bien... — dijo el doctor entrando por la puerta —. ¿Pueden salir, por favor? Les avisaré una vez Jackson pueda recibir visitas de nuevo.

Durante el chequeo médico estuvo atento a todo lo que él médico comentaba acerca de sus lesiones y posibles repercusiones, no fue hasta que preguntó su edad que ambos notaron la gran perdida de memoria que había sufrido.

— Entonces podemos confirmar que recuerdas tu nombre... ¿y tu edad? ¿Recuerdas cuantos años tienes? — el tono del médico era tranquilo; sin embargo, Jackson sabía que había algo mal, los ojos de este lo decían.

— 26 años. — no perdió el momento en el que el médico escribió algo y lo miró con cierta insistencia —. ¿Qué pasa?

— ¿26 años? — asintió —. Sr. Wang, usted tiene 29 años ¿qué es lo ultimo que recuerda?.

— Yo... iba a un restaurante a celebrar el aniversario número 34 de mis padres. — lo pensó un poco, buscando algo después de ese suceso, pero nada apareció.

— No fuerces nada, eso sólo te traerá dolores de cabeza, progresivamente irás recordando las cosas. No te preocupes, haremos todo lo posible para que recuperes tus memorias, sólo se paciente.

Y eso era todo lo que Jackson no era, paciente.

Remember Our Love // MarksonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora