Emma Jones
— Entiendo...
— Lo siento, el seguro no cubre esas fallas — Lance mi móvil, acariciando mi cabello con fuerza.
— Mama — Liam, abrazo mis piernas con cariño.
— Buen día, amor — Me volteé colocándome de cuclillas — Deberías estar en la cama, es sábado —
— Hoy no hay colegio — Se contestó así mismo con una sonrisa — ¿Por qué estás triste? —
— No estoy triste, solo estoy concentrada en algunas cosas que tengo que hacer hoy.
— ¿Segura?
— Sí... ahora iras a la cama — Bese su mejilla palmeando su espalda — Vamos — Él asintió correteando con esa risa traviesa.
Volví a tomar mi móvil leyendo los mensajes que tenía en el correo — Una reunión, un puto sábado... debe ser una broma — Mire el reloj viendo que ya eran las seis de la mañana.
Me encargué de incorporarme en la reunión, que acabo a las siete de la mañana, debía volver a llamar al puto seguro para resolver las cosas en el estudio, además de hacer el desayuno, entrar la ropa a lavar e intentar higienizarme. Sentía que me estaba volviendo loca, no probé ni un solo bocado en todo el desayuno, los niños estaban felices, Brenda se veía más relajada o eso creía, ya que no tenía ni idea.
— ¿Emma?
— Mju — Conteste mirando sus ojos.
— Los niños te están haciendo una pregunta.
— Perdón, necesito... me disculpan — Me levanté de golpe corriendo hacia el baño, devolví varias veces hasta sentirme mejor, tenía ese nudo en la garganta expandiéndose por cada parte de mi cuerpo — ¿Quién es ahora? —
— ¿Qué?
— Cariño, ¿y ese humor?
— De verdad, hoy no estoy para más chistes.
— Debemos pagar los daños causados por la falla eléctrica.
— Lo se...
— Emma, debemos cumplir los contratos.
— Lo haremos.
. . .
Brenda Blake
— Sé que amas el estudio y yo más que nadie he visto el esfuerzo que hiciste, pero debemos tomar una decisión.
— Intentaré pedir otro préstamo, pagaremos los daños, te marco al rato.
Me alejé de la puerta tomando un libro de la estantería, fingí leer observándola tomar asiento en la mesa.
— Los niños fueron a jugar — Comente mirándola de reojo.
— Bien — Contesto distraída mirando su móvil.
— ¿Tessa y Patrick van a venir?
— Veo que tu cercanía con Tessa sigue intacta — Dijo de golpe acariciando su rostro — Si vendrán a comer, deje todo en el horno, solo deben encenderlo — Ella se levantó tomando sus cosas y se marchó.
— ¿Qué le pasa a mama? — Cuestiono el niño cruzado de brazos.
— Solo está cansada...
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3° Siempre tú.
RomanceEl amor forjó mi corazón, mi cuerpo tatuó tu nombre en cada espacio de mi piel, conocí lo que es ser madre y esposa al mismo tiempo... han pasado cinco años, creí que lo arruinaría y tenerte conmigo significa que no lo hice. Quiero amarte con frenes...