ּ۪ ⊹ chapter eleven ── ❛ kiss me on
the side walk , take away my pain.❜Augustine se encontraba con los tres Pogues en Heyward's. August ya había terminado su turno y ahora ayudaba a su amigo. Pero aún se preguntaba dónde estaba John B. No lo había visto desde ayer y estaba preocupada.
John B. no había sido visto desde que volvieron tras buscar el Merchant, el cuál encontraron. Y August no podría estar más preocupada por él. Había un montón de ideas sobre lo que le haya pasado, desde estar en su cierto llorando, hasta que vinieran los de Servicios Infantiles por el. Y se sentía bastante culpable, porque había olvidado por completo a su amigo, debido a lo qué pasó ayer.
Tenía un moretón en la mejilla, cerca del ojo, pero nada que con maquillaje no pudiera ocultar. Dolía, pero al ver a JJ ayudando a Pope a ordenar algunas cosas de la tienda, supo que valió la pena.
August caminó por la tienda hasta estar a un lado de Kiara en la caja.
── Que no se te suba a la cabeza. Son tres y nosotros éramos dos. Es la típica mierda de Kooks ── comentó JJ ganándose una mala mirada por parte de August, mientras Kiara le daba cambio a Pope para que le entregara a un señor.
── ¿Qué hay de mi? Te salvé ── atacó August intentando no pensar en lo mucho que comenzaba a parecerse a su padre. Intentaba ser feliz.
── Y lo agradezco mucho. Estuviste asombrosa pero, llegaste después, así que se podría contar como dos contra tres ── explicó el rubio causando una mueca por parte de August, estando de acuerdo con él ── ¿Cuál fue tu idea al usar la cabeza?
── No sé, viejo. Actúe por instinto, ¿sí? Un animal acorralado ── respondió Pope antes de caminar hacia la caja ganando dos miradas divertidas por parte de Kiara y Augustine.
── Oye, Pope, alguien vino a verte ── avisó el señor Heyward haciendo que los cuatro pogues llevaran sus miradas al hombre, que apuntaba hacia atrás.
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✓ seven ✶ jj maybank.
Fanfiction˓ .❛ i keep on trying to 𝐥𝐞𝐭 you go. ❜ 𝒊. 𝐀𝐔𝐆𝐔𝐒𝐓𝐈𝐍𝐄 𝐖𝐀𝐋𝐊𝐄𝐑 era un ángel con un corazón roto, con una vida rota. Sin embargo, algunas veces los corazones se pueden reparar, y JJ estaba dispuesto a ha...