La Flor del Mar || One Piece [Sakura Haruno]

01.8

El par de ojos infantiles del niño rubio veían con atención a Sakura, quien se encontraba de espaldas.

"90, 91...", está se encontraba contando mientras ellos se escondían por el bosque, jugando a las escondidas por insistencia de Luffy.

Pero Sabo no podía evitar sentirse raro al estar con la mayor.

Los cuidaba y ayudaba con sus entrenamientos, marcando sus errores y fortaleciendo sus cualidades.

Además, les preparaba comida nutritiva que no sabía para nada bien y no le molestaba jugar con ellos.

Y eso le hacía entender porque a Luffy parecía gustarle pasar tiempo con Sakura, ya que era inevitable no sentirse seguro y protegido cuando estaban a su alrededores.

Pero era eso mismo lo que le hacía sentir raro.

Luffy y Ace no parecían estar en su misma situación, y el no saber que le estaba sucediendo lo frustraba.

"99 y 100", la cuenta había llegado a su fin. "¡Listos o no allí voy!"

La pelirosa comenzó a buscarlos por los alrededores y a su encuentro llegaron sus dos hermanos.

"¡Oigan!", les gritó en un susurro para no ser escuchado. "¿Qué hacen aquí? ¡Es mi escondite!"

"Luffy no dejaba de moverse, así que me largue de ahí", hablo de mala gana el pecoso. "Pero termino siguiéndome."

"Creeme que ya me di cuenta..."

"¡Shishishi!", el par de hermanos mayores fulminó al menor quien había reído escandalosamente.

"¿Nos escuchó?", cuestiono Ace ante la carencia de sonido alguno.

"Voy a ver...", con cautela, Sabo asomó su rostro de entre los arbustos para ver a su alrededor. "No está."

"¿Cómo que no está?, No puede desaparecer", fue el turno de Ace de asomarse de igual manera.

"¡Sakura es como un ninja!", Luffy imitó a sus hermanos sin medir el tono de su voz.

Los tres se quedaron a la expectativa intentado ubicar a la mujer de cabello rosa.

"¡¡Los encontré!!", fue inevitable no chillar al escuchar la voz de Sakura a sus espaldas.

"¡Corran o nos hará cosquillas!", exclamó Luffy quien de forma repentina cambio de juego.

Y sus hermanos mayores no lo pensaron mucho cuando sus instintos les decía que debían de comenzar a correr sin saber porque.

Al notar cómo el juego de las escondidas había terminado y los tres niños pensaban en huir de ella, Sakura saco su lado competitivo y atrapó al más cercano a ella, siendo Sabo.

"¡Atrapó a Sabo!", exclamó con horror Luffy viendo a Sakura como si se tratase de una villana.

"¡Sabo!", y Ace sin darse cuenta se había metido de lleno en el juego.

La adulta tuvo que retener para si misma la carcajada que amenazaba con salir, los tres niños se veían especialmente preocupados, como si ella fuera realmente un peligro.

"¡Gurarara!", soltó una vil risa con una sonrisa maquiavélica. "¿Así que ustedes son los infames piratas ASL? ¡¿Cómo se atrevieron a robar mi tesoro?!"

De manera instantánea los tres infantes se pusieron en papel.

"¡Si no quieren que su amigo pague las consecuencias consiguieran el doble de lo que robaron!"

"¡Eso es imposible!", vocifero el rubio. "¡Luffy, Ace huyan!"

"¡Ni hablar!", Ace optó una pose defensiva y el monito no tardó en imitarlo. "¡Te patearemos el trasero y recuperaremos a Sabo!"