𝑷𝑬𝑹𝑭𝑬𝑪𝑻 𝑳𝑰𝑨𝑹 [Aqua Hoshino x OC] oshi no ko

O1

POV Hana

—¡Mentiroso! ¡¡Maldito mentiroso!! ¡Imbecil hijo de...!—No digo el insulto por respeto a la memoria de Ai.—¡Idiota! ¡Lo odio!

El único testigo de mi ira era el computador, pausado en aquel momento donde los labios de mi amado y de la peli azul se juntaban.

—¿¡Como puede ser que el prefiera a esa copia barata de Ai antes que a mi!?— Golpee mis almohadones y lloré, esa noche lloré como nunca lo había hecho.

—Hana... ¿Puedo pasar?—Escuché la voz de Miyako a través de la puerta.

—¡No! No quiero ver a nadie.

—Hana...—Ignorando mis replicas, ella pasó hacia mi habitación, observando el desastre que había hecho en la noche.—Se que no estás de humor, pero hoy tienes que ir a la escuela y... Dios mío, tus ojos están más que rojos.—Me miró con pena y me abrazó, normalmente hubiera roto a llorar, pero la realidad es que ya no me quedaban más lagrimas.

—Miyako... ¿Es que yo no le soy útil a Aqua? La prefirió a ella solo por su imitación barata de Ai... Yo soy más bonita, tengo más de Ai de lo que tendrá ella por mucho que la imite, entonces ¿Por que la prefiere a ella? ¿Le gustan las suicidas o que?—Miyako me acariciaba mientras yo filosofaba.

—La mente de Aqua es algo que nadie jamás pudo entender, ni siquiera la propia Ai pudo. Pero si me preguntas a mi, estoy segura de que es por la relación que tiene Kurokawa con el mundo del espectáculo, tu ya eres muy conocida por actriz y serás idol dentro de poco, ya tienes una imagen hecha, mientras que Kurokawa apenas está empezando, no hay una imagen clara de ella aún.

—¿Entonces soy yo el problema?—Mi voz se quebró al decir esa pregunta, Miyako suspiró y susurró algo inentendible, seguido de eso se retiró de la habitación.—Creo que eso es un si...—Escuché un golpeteo en mi puerta.—Pase...

—Miyako me dijo que te trajera hielo para los ojos, te lo dejo en la mesa.

—Gracias Ruby, avísale a Miyako que no voy a ir a la escuela.

—Mira Hana, entiendo que estes enamorada de mi hermano, y se que el también siente cosas por ti, pero no me parece justo que te encierres aquí solo por una relación falsa entre Kurokawa y Aqua, se que sientes que el jugó contigo, pero si ese hubiera sido el caso, no es razón para estar así cómo estás, tienes una grave dependencia emocional hacia Aqua.—Dicho eso, se fue hacia su cuarto para terminar de prepararse para la escuela, pensé en lo que dijo, en parte tiene razón.

Escuché la puerta abrirse de nuevo, solo el entraba de esa manera a mi habitación.

—Deberías ir a la escuela...—Me tome unos segundos para observarlo, estaba diferente, tenia el cabello arreglado como lo usaba en el reality, su piel parecía más cuidada, y su uniforme por primera vez estaba completando planchado, evidentemente me volvía loca.

—No tengo ganas, tengo que escribir una canción para mi grupo, vete que se les hará tarde.—Me di la vuelta en mi cama y escuché como la puerta se cerraba, pero aún sentía el olor de su perfume, el seguía aquí.

Escuché como suspiró y sentí el frío en mis piernas, gracias a que Aqua las levantó para acostarse el en la cama conmigo.

Aquí es donde me avergüenzo por dormir en ropa interior.

Aquí es donde agradezco a Dios por hacer que compre ropa interior básica y no de corazoncitos u ositos.

Nota mental, comprar ropa interior sexy.

O bueno, quizá no.

—¿¡Q-Que se supone que estás haciendo!? ¡T-Tienes novia! ¡Infiel!—Intenté safarme de el abrazo que me estaba dando.

—Es una novia falsa, tu eres mi única novia real.

—Ni siquiera me lo pediste...

—¿Tengo que hacerlo?

—S-Se supone que si, pero si lo haces te diré que no.

—¿Quieres ser mi novia?

—No.

—Lo serás igual.

—¡Ash! Te odio Aqua.

—Me amas, si me odiaras no tendrías los ojos al rojo vivo por llorar por mi.—Lo siguiente que sentí fue un escalofrío en mi espalda, Aqua estaba besando mi nuca.—Date la vuelta

Y yo, como buena novia obediente que soy, le hice caso. Me besó, como solo el sabía hacerlo, me beso porque el estaba arrepentido, ¿Me beso por que me amaba? Esa era la pregunta que mi cabeza se repetía constantemente.

—A Kurokawa jamás la podría besar de esta manera, solo a ti, intenté pensar en ti cuando la besé pero me era imposible, ella jamás se podría comparar a ti.

Y así mis hermanos, yo caí ante los encantos del príncipe de hebras doradas y ojos color cielo.