JUEGA COMO CABALLERO

104 6 2
                                    

Con un simple parpadeo, Sabo se encontró de vuelta en el laberinto, que ahora se desmoronaba ante sus ojos.

Una voz rompió el silencio.

"Este laberinto fue diseñado para atrapar a cualquiera lo suficientemente tonto como para entrar", Era el fantasma de George, quien hablaba un poco desesperado. "Pero parece que fue en vano".

Sabo esquivó un proyectil, luchando por ver a través del espeso polvo. "Entiendo", respondió, captando su atención. George señaló hacia su bolsillo, donde Sabo
encontró la piedra de los sueños.

"Las extrañas ocurrencias en esta isla, tienen un origen." continuó George. "Un origen que tendrás que llevarte".

De repente, la mente de Sabo hizo clic.

El clima errático, los extraños cambios en el cabello de las personas, eran manifestaciones de la respuesta de los espíritus a la presencia de Peter. Sus sueños vengativos habían contaminado la piedra, sumiendo al reino entero en el caos.

"Creo saber como hacerlo…", susurró Sabo, sus dedos aferrándose a la superficie áspera de la piedra.

"Eres un caballero; sabía que lo entenderías", la risa de George resonó, etérea y desvaneciéndose, mientras se disipaba.

Solo, la voz de Sabo resonó por el laberinto mientras cantaba a la piedra, su súplica reverberando en las paredes, pero encontrando silencio.

Su mente divagaba, imaginando el frío y duro suelo bajo sus pies, levantándose poco a poco fuera del laberinto.

Una ráfaga repentina de viento acarició su piel y la picazón del polvo llenó sus ojos.

Se encontró parado en una roca desafiando la gravedad, elevándose sobre el laberinto que estaba siendo destruido.

En ese momento, visualizó cada trozo de escombros flotando, y sucedió.

"¡Tú!," grito Peter "¡Mi piedra! ¡Exijo que la devuelvas!".

Sabo permaneció en silencio.

"Dije..." Peter se irritaba cada vez más, haciendo un berrinche por la piedra en vez de una paleta.

"¡Devuélvela!" Mientras Peter gritaba, los escombros flotantes alrededor de Sabo comenzaron a moverse hacia el otro, que los esquivó sin esfuerzo alguno. Antes de ser arrojado al suelo por un ataque sorpresa de Hiroko.

"El juego aún no ha terminado, ¿recuerdas?" le recordó ella a Peter.

"Oh, hola, Sabo", balbuceó, sorprendida por su repentina aparición.

"Oye, ¿dónde están...?" Sabo comenzó, pero sus palabras fueron interrumpidas cuando la roca en la que estaba parado desapareció.

Rápido, se encontró volando, sus brazos ahora transformados en alas.

"Lo siento, mamá", pensó Sabo, rompiendo su promesa mientras miraba hacia arriba y veía caer a Hiroko. Sin dudarlo, la atrapó.

"Necesito llegar a las fronteras", Hiroko señaló hacia el otro lado.

En ese momento, los ojos de Sabo detectaron un colosal golem hecho de sombra, emergiendo de las profundidades del bosque, su forma amenazadora en curso directo hacia el reino. Las valientes mosqueteras luchaban para frenar su avance.

Comprendiendo la urgencia, la ayudó a llegar a su destino. Para luego regresar a donde estaba Peter.

Una vez frente al golem, Hiroko interceptó su ataque justo a tiempo para salvar a Hana de un final fatídico.

Cuando aterrizaron en el suelo, Hana exclamó: "Espera, ¿y dónde está Peter?" Hiroko le susurró algo al oído. "Oh, entiendo..." respondió Hana, recobrando la compostura.

Polluelos / ASL ONE PIECE FANFICUnde poveștirile trăiesc. Descoperă acum