Jamás Hagas trato con una tramposa

Capítulo 13

Sisi se despertó en su cama con la sensación de estar olvidando algo importante, por algunos segundos no sabía lo que era, luego recordó la noche anterior.

El anillo que simbolizaba que su vida estaba a punto de cambiar, sabía que al momento de dar el sí en la iglesia sería el adiós definitivo a todo lo que se le podía llamar una infancia tardía.

Hace años Sisi vivía como una adulta independiente, pero eso nunca impidió que a su vida todavía alegraba con algunos tildes de infancia.

¿Qué sería lo siguiente, cuando se convirtiera en una señora?, estaba segura de que luego vendría los niños y eso significaba más responsabilidades, a lo mejor siendo madre tendría más libertades de ser una niña grande, porque podría poner de excusa a sus hijos, y así  explicar la cantidad de juguetes que almacenaba en su armario; si bien amaba su colección de juguetes, pero evitaba que alguien  viera esto, porque está manía podría traer grandes prejuicios. Así que quizás esto se podría ocultar siendo una mujer de familia,pero sabía que en realidad no deseaba ser madre. Lo que se venía era muy angustiante para ella, aun así al poner música logró relajarse y olvidarse de sus preocupaciones y arreglarse como cualquier otro día para ir a la oficina, antes de convertirse en una mujer comprometida, luego se subió a su auto y manejó rumbo a su trabajo, cuando disponía a sacar su laptop del maletero la saludó Angelo a lo lejos, dándole un fuerte  abrazo y felicitándole por su compromiso.

_Estoy tan contenta que la perra carísima se haya comprometido con su príncipe, siempre lamenté que Teodoro no fuera gay, porque sin duda, ya me lo habría merendado, es tan sexy._

_Yo también lamento que no es gay.

_Pero ahora será el esposo ardiente de mi mejor amiga y estarás en buenas manos._

>>En manos de un violador en potencia<<

_¿Cuándo irás por tu vestido de boda?._

_Aún no tengo pensado el día, tengo tanto trabajo, todavía debo cumplir con el desfile que ya es pronto._

  _ Solo tienes cinco días para preparar todo._

_Por qué crees que te digo que no tengo tiempo para ver los preparativos de mi boda. Ni siquiera hemos fijado la fecha de mi día de suicidio, digo del matrimonio._ Sisi sintió que se abría la puerta del ascensor, era Briggitti entrando al estacionamiento subterráneo. Saludó a Sisi.

_Hola Sisi, estaba pensando que tuviéramos el día libre en la oficina y así entre todos te ayudemos a encontrar tu vestido perfecto de bodas._

Con tanta presión Sisi se le había acabado paciencia y terminó explotando.

_Te dije que odio a Teodoro, ese imbécil tuvo que caerse de la cuna al nacer para no entender que no quiero nada con él, si dije ayer que sí, era para que las tipas que mojan el calzón con sus letras miserables, fue para que no se me vinieran encima, además resguardar el pellejo suyo, si hubiera dicho no, me hubieran asesinado antes de llegar a la puerta de mi carro._

Briggitti en ese momento le dio una bofetada que le bajó los humos a Sisi.

_Deja de hablar mal de Teodoro, él no está aquí para defenderse y debieras agradecer que un hombre así te voltear a a ver, no le dirás no, ahora que está tan feliz de poder casarse contigo, además ya te lo había dicho, su compromiso le benificiará a los dos._

  >>Hoy veremos el vestido y el banquete para su boda.

Sisi se sintió ridiculizada con el manotazo de Briggitti, legalmente no le debía nada al imbécil de Teodoro, pero le hacían sentir que estaba siendo una patética por no casarse con el mono cantor. Además de feo lo consideraba tonto, pero no había una alternativa, su destino era casarse con un mono y luego tener híbridos entre humanos y simios. La vida actual era tan decepcionante, nada fue real como idealizó su adultez a los doce años.