8 a.m., dos horas para la ceremonia de graduación.
Baekhyun apartó sus ojos del reloj en la pared por undécima vez en los últimos veinte minutos, para luego soltar un suspiro al mirar la carta de papel doblada a su lado. Todavía no terminaba de procesar cómo las cosas se habían dado vuelta para ellos en un abrir y cerrar de ojos; hacía tan solo unas horas que se encontraban charlando sobre la fiesta de graduación y, ahora, parecían más bien unos presos prohibidos de salir de su habitación.
Pasaron el último tiempo dando vueltas por la habitación, tratando de hallar alguna manera viable de escape. Primero, pensaron en salir por la ventana tal y como lo habían hecho en el palacio, pero resultaba que las ventanas tenían barrotes demasiado angostos como para poder atravesarlos. Luego, trataron de entablar diálogo con el guardia apostado tras la puerta, mas este los ignoró deliberadamente tal como si no existieran, permaneciendo con el rostro pétreo como una piedra, y sus fallidos intentos terminaron por desanimarlos a medida que las horas pasaban y seguían cautivos en la habitación.
—Debe haber algo que podamos hacer —insistió Kyungsoo desde su lugar, recostado en el suelo. El pelinegro llevaba alrededor de una hora contando el número de piedras en el granito —No hemos llegado tan lejos para quedarnos aquí, con los brazos cruzados.
—¿Y qué propones que hagamos, entonces? —inquirió Luhan desde el otro lado de la habitación, mirándolo con una ceja arqueada —¿Derribar a un guardia que pesa ochenta kilos más que nosotros y salir corriendo?
—Me parece una mejor opción que simplemente esperar a que llegue la hora de que nuestros padres vengan a sacarnos de aquí —contraatacó el pelinegro levantando el mentón desafiante hacia el otro —¿O es que acaso tienes miedo?
Los ojos de Luhan, que había comenzado a acercarse hacia el pelinegro, se abrieron de par en par.
—¿Acaso acabas de llamarme cobarde? —preguntó el rubio con tono ofendido.
—Pues si te queda el anillo, úsalo.
Baekhyun se levantó de un salto de su cama cuando vio las intenciones del rubio de abalanzarse sobre Kyungsoo.
—¡Ya basta, es suficiente! —exclamó Baekhyun interponiéndose entre ellos —¿Pero qué es lo que les sucede? Lo único que faltaba era que empezáramos a pelear entre nosotros mismos.
Ambos bajaron la vista con gesto avergonzado
—Lo siento, es solo que... —negó el pelinegro retrocediendo —Sigo sin creer que hayamos caído en la trampa de esas brujas.
—Lo entiendo, Kyung. Todos nos sentimos frustrados en este momento —consoló Baekhyun tomándolo del hombro —Pero tampoco es razón para que discutan entre ustedes. Estamos juntos en esto.
—Baek tiene razón —habló Luhan acercándose para abrazar al pelinegro —Yo también lo siento, Kyungie.
—¡No me llames así, ya no tenemos cuatro años! —se quejó Kyungsoo sacudiéndose para liberarse del agarre del rubio.
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The Royal Maiden ♕Chanbaek♕
FanfictionBaekhyun es huérfano. Poco conoce sobre la vida fuera de su orfanato, y en su lista de intereses lo último que figura es conocer a un príncipe. Todo cambia repentinamente cuando recibe una beca para asistir a la exclusiva escuela real Le Rouyaté, e...