Engullir

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¿Cómo se puede proteger algo que no sabía que podía perder? Cada que veo a geto siento que debo mantenerlo a mi lado, entonces ¿Que debo hacer para proteger su sonrisa?



Una vez que el ritmo cardíaco de geto se regula me levanto del suelo y observamos más a detenimiento el edificio, tenía al rededor de unas 20 plantas, estaba desgastado y viejo por no haberle dado mantenimiento en años, el hospital había dejado de funcionar hacia un buen tiempo, pero las maldiciones odiaban cambiar el lugar que habitaban y aunque ya no estuvieran personas cerca, la energía era lo suficientemente densa aún para que unas pocas maldiciones de rango menor se alimentarán, no suponía un riesgo grande para nosotros, así que comence a formar una barrera al rededor del hospital y me acerqué a geto.

- Quiero que hagas lo que puedas, necesitamos que seas más fuerte, así que tendrás que comer más maldiciones ¿Está bien?

Geto asiente un poco preocupado y se queda más cerca de mi, le indico con la barbilla que se siente en el asfalto y yo hago lo mismo.

- Muy bien, ahora comenzaré a atraer a las maldiciones y tú las tragaras, se que no es agradable pero lo necesitas.

Me presta atención mientras hablo y me sonríe un poco confiado después de mis palabras.

- Haré lo que pueda y verás que después pateare los culos de todas las maldiciones que vea.

Suelto una carcajada y le tomo por el cabello como si fuera un niño para después despeinarlo un poco, me gustaba usar cualquier excusa que pudiera para tocarlo.
Ahora que estamos los dos listos, comienzo a dispersar poco más de mi energía maldita por todo el lugar hasta que varias maldiciones pequeñas comienzan a acercarse peligrosamente a nosotros, estaba listo para interferir en caso de que algo saliera mal, pero antes de hacerlo observó como las maldiciones comienzan a perder su forma original y se reducen hasta ser del tamaño de una esfera de obsidiana, está esfera poco a poco se fue acercando a geto y cuando la tuvo en sus manos me lanzó una última mirada de confirmación para después tomarla y metérsela a la boca.

En los instantes seguido a esto no hubo reacción o expresión alguna en el rostro de geto, por un momento creo que deje de escuchar lo que ocurría a mi alrededor y cuando comenzó a vomitar algo del color de la brea o el petróleo, corri hacia el y lo mire preocupado.

- ¿Estás bien? ¿Quieres que lo dejemos?- el nego con la cabeza mientras se cubría con una mano la boca para evitar devolver de nuevo.

- Estoy bien- logro decir aquello después de unos minutos de intentar suprimir las arcadas que tenía cada tanto.

Lo observó más detenidamente, en el rostro tenía una expresión de incomodidad y asco, la piel pálida y todo su cuerpo era recorrido por espasmos leves, puse mi mano en su espalda e intente calmarlo.

Momentos después comencé a sentir un aumento en su energía maldita, si tuviera que adivinar diría que su energía ahora era la de cualquier hechicero rango B, eso para algunos puede ser desalentador pero al menos para mí era un progreso, uno muy grande puesto que cuando conocí a geto no tenía ni una pizca de energía maldita, me sentía raro, era un sentimiento cálido pero diferente a la sensación que tengo al verlo sonreír o cuando me toca, ¿Porque será?

Después de recuperarse le ayude a levantarse y lo mire un poco preocupado- ¿Seguro que quieres continuar?- era obvio que necesitaba hacerlo, era muy poco tiempo una semana para hacer que mejorara, pero tenía que hacerlo.

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