El juego de amar sucio

Capitulo 3

Shen Qingqiu se había pasmado al ver el menor moverse, el sistema solo daba error y ninguna explicación, Shen Qingqiu no sabia si vivir o morir con la gracia del momento.

〖Error〗

〖Error〗

〖Error〗

〖Localizando sistema〗

➢...➢

"..."

­­-Shizun...-. ¿Había oído bien? Shen Qingqiu estaba desconcertado, se supone que no se conocen, ¿Tuvo otro shizun que solo fue un agujero sin rellenar?, no. Recordaba cada capitulo y solo tiene un shizun, era el, talvez solo estaba soñando, talvez, ojalá.

El menor se empezó a mover brusco, Shen Qingqiu solo pudo agarrar sus manos y decir cálidamente -Estas bien, no te esfuerces mucho-, Luo Binghe abrió los ojos rápidos y pudo observar a un joven que llevaba velo a mitad de cara, era él.

-Valla que eres un joven fuerte, me habías asustado- Shen Qingqiu estaba tratando de ser persuasivo con un niño, él había cuidado de su hermana pequeña y sabia que los niños quieren sentirse únicos y alagados, talvez a Luo Binghe le agrade la idea de pensar que es un joven fuerte. -Cállate. –

"Que" -Que-

〖Que〗

"Tu queee, que mierda", Shen Qingqiu quedo pasmado. No sabía que había hecho mal o talvez Luo lo malinterpreto. -Este, disculpa, ¿dije algo mal? – Shen Qingqiu miro a Luo Binghe, que lo miraba con seriedad, aun así, no podía evitar cuestionar que luo era muy hermoso, como el rostro de una muñeca, además su hermosa melena azabache con unos rulos tan tiernos, enserio estaba encantado con la vista del pequeño luo luo.

No hubo respuesta alguna, solo una mirada juzgadora, al día siguiente fue lo mismo, Shen Qingqiu había regresado de la reunión, total fracaso (*). También esa mañana se había levantado con horror, había salido de su habitación y se encontró a Luo Binghe sentado en una silla mirando fijamente en su puerta, que miedo.

-Iré a una aldea aquí abajo, ¿deseas ir? -, -...- eso dolía más que un visto en WhatsApp, cuando Shen Qingqiu agarro un sombrero simple y ya salía de la pequeña casa, sintió unos pasos atrás, Lou Binghe lo seguía. Ambos bajaban la montaña por un atajo entre los bambúes, - y como te llamas- Trataría de ser un poco más casual, quería que Luo Binghe ya soltara algo, solo lo miraba con una cara de "tu no eres quien pareces", "Todavía no puedo pensar que este lotito tendrá muchas florcitas en que compartir cariño", que envidia- Shen Qingqiu se golpeo con el abanico, no podía sentir envidia si es solo su discípulo, era mucho fanatismo. -Luo Binghe- Shen Qingqiu paro seco, había hablado, dios que emociooon, su facboy favorito le hablo. Sus gritos internos querían relucir, pero tenía que mantener su imagen ante el menor, Lou Binghe se había percatado del paro del mayor entonces lo miro a reojo. - Lindo nombre, soy Shen Qingqiu, Maestro de la cumbre Qing Jing- "Tu futura vara humana, no, yo no seré tu varita humana" Luo Binghe solo lo miraba, se fue tras Shen Qingqiu y lo siguió como un pollito hacia la aldea, al llegar, Shen Qingqiu le dio un poco de dinero a Luo Binghe por si quería algo de comer. – Espérame aquí, iré a comprar unas cositas, si gustas puedes ver algunos puestos cercas, pero no te alejes mucho­­-. Shen Qingqiu, aunque por el poco tiempo que llevaban, se acostumbró a los pequeños ojos desanimados de Luo Binghe a primera vista, pero no podía ir a comprar supresores con él, además muy pequeño y entrando a oler alfas pervertidos, esta vez no dañaría la infancia y manchar la inocencia Luo Binghe de ningún modo.

Shen Qingqiu siguió su paso hasta que sintió unos brazos rodear su cintura -Por favor no me abandone de nuevo...- La gente aun hablaba, pero Shen Qingqiu sintió que todos se quedaron callados hasta que cobro conciencia. -Luo Binghe, no te dejare, tranquilo todo estará bien- palmeo la cabeza del menor que aun sujetaba su cintura, sintió un aroma a cafecito, talvez en la línea del tiempo en el que estaba, el café no era muy reconocido, pero el en su vida antes de trasmigrar tomaba demasiado, aunque no tenia que hacerlo, siempre postrado en una cama de hospital por sus debidas enfermedades.