One Shots

Vendida - Elizabeth Olsen (2)

Me di una ducha en el baño que estaba conectado directamente con mi cuarto, luego me puse una pijama de short y camisa que había en una de las gavetas de mi closet.

Finalmente busqué mi cartera y me di cuenta de que no estaba en el cuarto, ¿donde carajos la había metido? Comencé a darle una revisada al cuarto y vi una caja fuerte y una tarjeta con un número que marqué y justamente la abrió. Habían unos cuantos documentos y pude ver que había todo lo que tenía que ver conmigo, apta de nacimiento, pasaporte y otras cosas, entre ellas un documento de emancipación, firmado por mis padres, ósea que legalmente soy mayor aunque aún tenga 17 años.

Mierda...

Habían mas cosas y cuando vi había un teléfono nuevo y una laptop. Las saqué y me maravillé, después de todo no está tan mal esta vida...

Abrí el teléfono y había un solo número de teléfono, decía "Elizabeth" y supuse que era ella. Intenté meterme a mis redes sociales, pero todas habían sido eliminadas, así que tuve que crear nuevas cuentas de todo.

No tenía mucho sueño, así que bajé a la cocina a ver si había algo de comer en el refri y me encontré en el comedor a Lizzie, quien tenía una taza de té en las manos.

— hey...— dije y ella sonrió

— ¿tampoco puedes dormir? — preguntó y yo negué — ¿té?— preguntó y yo asentí.

Ella se levantó del asiento y comenzó a hacerme una taza de té, luego me la dió y yo me senté a su lado.

— se que esto es algo raro para ti, y estoy consciente de que hoy ha sido un día muy cargado y no quieras hablar de esto, pero de verdad no creí que me encontraría con...esta situación cuando hice el contrato — dijo

— ¿ahora soy tu novia?...según el "contrato" claro — pregunté y ella asintió dudando un poco.

— si lo quieres llamar así — respondió

— ¿y aún tenemos que casarnos?— pregunté y ella empezó a jugar con sus dedos, lo que me hizo pensar que estaba nerviosa.

— solo si así lo quieres...no quiero meterte presión—

— ¿y porque decidiste comenzar esto? Teniendo en cuenta que eres millonaria...—

— multimillonaria...— corrigió mientras sonreía al igual que yo.

— multimillonaria, que me hayas "comprado" quiere decir que necesitas algo...¿lo haces por negocios? ¿Herencia? —pregunté y ella rió aún más.

— ¿te soy sincera? — preguntó y yo asentí.

— ¿me vas a prostituir?— pregunté y ella casi escupe su té de la risa.— era una suposición— dije y ella negó.

— es tan simple como que quiero algo de compañía...— dijo y esta vez fui yo la que me reí, pero su cara seria me hizo ver que no estaba jugando.

— oh...emmm, bueno — la vi nuevamente jugar con sus dedos y tomé sus manos entre las mías, notando que estaban congeladas— eres multimillonaria...debes conocer a muchísima gente, a demás...¿comprar a alguien? ¿Eso es legal incluso? — pregunté y ella se quedó pensativa.

— no es legal...pero solo quería aprovechar mi dinero para tener algo que de verdad necesitaba — dijo

— ¿pretendías casarte? ¿Conmigo?—

— es la primera vez que hago algo así, no sabía realmente lo que querías y tú madre te hizo ver cómo alguien que pedía hasta por los codos...— dijo y yo reí. Típico de mi madre.

— ¿qué tipo de compañía querías? — pregunté y rocé mis manos por sus brazos, viendo cómo su piel se erizaba.

— emm...como...— mis manos fueron a sus muslos y fueron acercándose cada vez más a su lugar sensible — como estés cómoda — susurró 

— creo...— me senté sobre ella, las dos manos sobre sus hombros y ella me miró sonriendo — que estaría cómoda en tu cama...— susurré y ella se veía más preocupada que otra cosa.

— ¿estás...estás segura? — preguntó

Me acerqué más a su rostro y besé sus labios, al principio fue algo lento, solo quería probarlos, pero no necesité mucho para volverme adicta a ellos. El beso se volvió más necesitado y yo quité mi camisa y ella aprovechó para quitar la de ella.

Ella comenzó a chupar mis senos, lo que me hizo gemir. Lo que no quería decirle es que esta estaba siendo mi primera vez, no mi primer beso, pero si esto iba más lejos, mi primero vez acostándome con alguien.

Decidí dejarme llevar, tratar de dejar guiarme por ella. Así que una de sus manos se metió debajo de mi pantalón y de mis bragas. Según me habían dicho, dolía o quizás siendo mi primera vez podría sangrar, me puse nerviosa dándome cuenta de lo que estaba haciendo.

— ¿estás bien? — dijo parando de hacer todo y quitando su mano de donde estaba, poniéndolas en mi cintura.

— emm...si si — no la podía mirar a los ojos o me pondría a llorar como niña chiquita y no sabía muy bien el porqué, seguro el nerviosismo.

— no espero que hagas esto...no necesitas hacerlo si no quieres...—

— si, claro que quiero...—

— t/n estás muy tensa, no se ve que de verdad quieras...—

— es que...— temía decirle, pero no tuve que decir nada a final de cuentas, ella solita entendió.

— ¿eres Virgen? — preguntó y esta vez si la miré a los ojos y asentí en silencio.— otra cosa en la que tu madre mintió— susurró

— yo no se como...nada...y solo tengo miedo a que duela— dije y ella asintió

— solo y bien digo, solo si quieres...—

— si...si quiero, lo juro — ella me miró dudando un poco, pero luego prosiguió.

— entonces hagamos esto bien desde un principio...—

Habrá tercera parte si eso quieren obvio.