Un viaje a las estrellas

Una explicación vacía.

Mi nombre es Yunho, con 21 años de una vida muy normal, sin nada importante que decir, de mi vida académica solo puedo decir siempre me he esforzado lo máximo que he podido y siempre la he puesto por encima de todo, lo que no dice que no salga de vez en cuando no salga a pegarme la fiesta hasta morir con mis amigos Yeo y San, quiénes son los que siempre me acompañan en mis travesuras, soy bastante sociable y amable o eso trato.

De mi vida amorosa prefiero no hablar, intento fallido tras intento fallido, en estos momentos no creo en el amor como tal, tuve un relación de más de 8 años en donde la verdad nunca fue algo oficial, con ese chico, nos veíamos cuando él quería, donde él quería y siempre a escondida, siempre estuvo en el armario y yo tenía que sufrir estar con alguien a escondidas durante mi vida, que no solo me daba lo poco que le quedaba de las otras múltiples parejas que tuvo y que yo hasta el final de la relación acepte que existían.

Tras tres años y medio de haber dejado el colegio y haber empezado la universidad, no he conseguido salir con alguien más, en una nueva ciudad a dos horas de mi lugar de crecimiento, la verdad, no es algo que quiera, que vuelvan a destruir lo poco que he logrado construir con mucho esfuerzo a pesar de sufrir de ansiedad y depresión.

Un curso semestre nuevo, primer día por desgracia, me reúno con mis amigos antes de entrar (odio entrar solo a un lugar), para luego toparnos con todos nuestros compañeros y saludarlos, vi algunas caras nuevas, lo cual me preocupa, a mucho costo logra exponer bien frente a los que ya conocía, soy el ser más torpe del mundo por lo que mientras caminaba hacia los asientos de atrás, ya que, mi altura solo me deja poder estar ahí. Por no fiarme en un escalón me doblo la pierna y caigo en las piernas de un completo extraño.

-Perdón, no quería golpearte- digo mientras me reintegro

-¿Estás bien? No te preocupes, no me golpeaste- no me responde.

-Sí, estoy bien, es normal, no hay día que no me caiga- digo y sujeto una risa un poco nerviosa, no soy el mejor para hablar con extraños. -Voy a sentarme atrás, de verdad lo siento- Vuelvo a seguir caminando hasta toparme con un pupitre vacío.

La clase empezó y yo no paraba de ponerle atención a todo menos a la clase, estaba con mucho sueño, me levante temprano para poder llegar a tiempo, Al salir, volví a tropezar, pero esta vez por dicha no golpee a nadie, por suerte San me ayudo a levantarme y fuimos al comedor, ya que, moríamos de hambre. Me pusieron al tanto de todas sus putadas y de como Yeo se terminó enamorando perdidamente de un chico que conocimos el semestre pasado e iniciaron una relación a final del año.

Caminaba con mi comida en la mano, hasta que por no andar con mis lentes puestos choque con alguien y le tiré mi comida en toda su camisa.

-¡No lo puedo creer! De verdad, lo siento mucho, no fue mi intención, de verdad lo siento mucho, ¿qué puedo hacer para solucionarlo? - Digo mientras intento recoger todo lo que había caído en el suelo.

-Dos veces en un día, algo obsesionado conmigo estás diría yo- me responde un chico alto, piel blanca y pelo castaño mientras sonreía.

-No, perdoname la vida de verdad, en mi mochila ando otra camisa, te la puedo dar para que te cambies y llevo a lavar esta- le contestó ignorando la parte de la supuesta obsesión de mi parte.

-Bueno, antes que todo, es un placer conocerte Yunho, mi nombre es Mingi- Me dice, lo cual m no me deja concentrarme en lo que sigue diciendo hasta el punto de interrumpirlo

-¿Cómo sabes mi nombre? Pregunto esperando con muchas ansias la respuesta

-Somos compañeros, hoy te presentaste, ¿no te acuerdas?- respondió

Le sonrió, ya que no se me viene nada a la mente hasta que decido decirle. -Es un gusto Mingi, discúlpame, soy muy distraído y no había notado que ya te había visto esta mañana.