¿Cómo Conquistar A Un Virgen En La Primera Cita? // Adaptación Emiliaco

37. Contra Todo

- ¡Dios, Joaco!... me has dado un susto terrible, ¿Dónde estabas?, ¿Porqué tardaste tanto? - El oji-café alzó la voz con un gesto lleno de preocupación mientras salía del cuarto de baño de su habitación.

Al despertar aquella mañana se sorprendió bastante al darse cuenta de que Joaquín no estaba junto a él en la cama. Joaquín había dejado una nota avisando que iría de compras y que no había querido molestarlo; pero obviamente aquello no tranquilizó ni un poco al mayor.

Emilio no entendía los motivos que harían que Joaquín saliera sin avisarle, pero claramente la excusa de "ir de compras", era muy poco convincente.

Así que de inmediato tomó su celular y le marcó al castaño en busca de una mejor explicación; pero no tuvo respuesta. No le quedó otra opción que entrar rápidamente al baño para darse una ducha rápida, con la idea de después salir por allí en busca de su novio.

Aquella era la tarde en que Óscar finalmente regresaría con ellos, y Emilio no entendía cómo había sido posible que Joaquín lo olvidara, y decidiera salir sin previo aviso.

- Tenía algunos asuntos que atender, Emi...- Joaquín se encontraba sentado en el borde de la cama. Había llegado breves minutos atrás, y estaba a la espera del rizado con expresión nerviosa.

- ¿Asuntos?, ¿Qué asuntos? - Emilio inquirió alzando una ceja. Al parecer no había logrado suprimir totalmente sus celos, y la respuesta tan vaga que Joaquín le estaba entregando, sólo lograba generar más incertidumbre. - En la nota que dejaste, dijiste que ibas de compras...-

- Lo sé, bueno... te mentí - Joaquín apretó sus labios, viéndose a cada instante algo más ansioso - Pero voy a explicarte...-

- Fuiste dónde Nelson para ver a Dominic, ¿Ó me equivoco? - El oji-café irrumpió con gesto serio.

- ¿Qué?...- Joaquín frunció el ceño - La verdad sí, te equivocas, y mucho...- El menor refutó mostrándose ofendido.

- Bien, ¿vas a decirme entonces que asuntos son tan importantes cómo para que tengas que salir sólo y a escondidas de tu novio?-

La mueca de molestia de Joaquín frente a las nuevas insinuaciones del mayor, dejaba en claro que tendrían una conversación muy sería cuándo llegara el momento. Pero ahora habían asuntos más importantes que resolver.

- Claro que voy a decirte... Más bien, tú mismo verás la razón por la cuál tuve que salir de esa forma...-

- ¿De qué hablas? - Emilio preguntó notoriamente confundido.

- Esperan por tí en la sala...- Joaquín murmuró mientras se ponía de pié y se acercaba al oji-café.

- ¿Por mí?...- Emilio volvió a inquirir frunciendo el ceño.

- Ven conmigo...-

La molestia que ambos mostraron segundos atrás se extinguió cuándo Joaquín extendió su mano a Emilio, en una señal que le indicaba que deseaba que lo acompañara.

Emilio se sintió confundido. No era habitual que Joaquín saliera sólo, sin previo aviso, y mucho menos que actuara tan nervioso. Estaba comenzando a preocuparse.

El menor lo guió lentamente fuera del cuarto, y mientras caminaban por el pasillo que los llevaría a la sala, Emilio se detuvo.

- Joaquín, ¿Qué está pasando?, ¿Porqué estás actuando de ésta forma? - Emilio miró a su novio con intriga, y lo vió ponerse algo más nervioso.

- Amor, sólo... confía en mí de una vez, ¿Quieres? - Joaquín respondió en un bajo murmullo, y observó cómo la expresión del rizado se suavizaba.