Sentí una gran eyaculación dentro de Bella... ¡Por fin sentí la verdadera sensación del deseo sexual! Estar junto a Bella, jadeando, y sintiendo que está amaneciendo hace que me llene de paz, de tranquilidad, conformidad, de estar completo. Por primera vez en la vida me siento tan libre y liviano. ¡Es increíble esta sensación! Al terminar de eyacular dentro de Bella, saco mi miembro de su sexo para luego seguir en la cama abrazándola y a su vez masajeando sus bustos, mientras ella sigue en la misma posición y en silencio desde hace ya mucho rato... ¿Será que está tan cansada que ya se durmió?
Es increíble la cantidad de tiempo que he estado con Bella. Todo parece ser un cuento de hadas, nada parece ser real, pero aun así lo es. Se podría decir que ahora sí puedo confirmar que me quiere y la quiero...
- Bella... Siento que ahora si estoy preparado como para iniciar una relación. – Dije esperando su respuesta, pero todo fue silencio absoluto, quizás se siente extraña y no sabe que decir ahora mismo. – Estuve pensando mucho esta noche, a pesar de que estuvimos la mayor parte enfocados en la parte del deseo sexual y no en el amor... Y es que eme di cuenta que esto era lo que me faltaba como para poder saber que es lo que quiero en mi vida. Y quiero estar contigo de modo de relación seria... – Sigo esperando su respuesta, pero el silencio es mas grande que el resto de ruido del exterior y lo que genera los electrodomésticos de la casa. Que extraño...
Me asomo a darle ciertos golpecitos con la excusa de saber si estaba despierta o no. Y lo único que sentí al tener contacto con su piel, fue un frio impresionante. Como si tuviera hipotermia... Me preocupé, es raro que esté así y más cuando hicimos de todo anoche. Seria extraño y confuso. Así que me levanto rápidamente para encender la luz y destaparla por completo de la cobija que cubre todo su cuerpo.
¿Qué putas pasó anoche?
Su cuerpo pálido, sus gestos faciales incambiable y lleno de terror con sus ojos abiertos, su garganta deforme, como si alguien estuco a punto de sacárselo o por tanta presión hizo que en todo el medio de esta quedara un bulto más grande a comparación del resto del cuello, además de que por las mismas zonas se puede identificar como quedan algunas marcas asimilando que allí estuvo una mano... y coincidentemente es semejante al tamaño de mi mano.
Sin duda alguna, Bella está muerta. Muerta no de la emoción y satisfacción incontrolable de haber tenido una aventura sexual conmigo, sino muerta a causa de estrangulamiento.
¡¿Cómo es posible que yo haya logrado matarla inconscientemente?!
¡¡Soy un puto asesino!! No hay duda alguna que lo soy. Quizás si sea cierto lo de la enfermera del hospital mental... quizás yo mismo la maté y solo estuvo encargado mi inconsciencia, razón por la cual yo no sea capaz de recordar algo sobre esa noche, así mismo como acaba de pasar con esta noche con Bella.
Siento que ahora todo tiene sentido con mi forma de ser, de actuar, de pensar, en sí, todo. ¿Ahora que voy a hacer con su cuerpo? ¿Lo emparedo, así como lo hice con mi madre? Sí, eso mismo voy a hacer. No veo que mas hacer... Aunque su cuerpo me sigue llamando mucho la atención, nunca había experimentado todo esto, como si fuera la primera vez en probar el chocolate y después no puedes salir de ello por las ansias de seguir comiendo chocolate.
No entiendo nada de lo que ha sucedido. Tantas cosas, tantos sucesos, tantos actos que simplemente me sorprenden de mi mismo. Es raro este sentimiento de descubrimiento que tengo hacia mi mismo, ¿Colón descubriendo América? ¿Emilio descubriendo Emilio? ¡Que ilógico! Nada tiene sentido.
- Emilio... – Escucho una voz extraña que me llama repentinamente.
- Emilio...- ¿Qué esta pasando? ¿Por qué escucho esa voz tan extraña y arrastrada sobre toda la casa y mi mente?
- ¡¿Quién anda ahí?! – Grité como si en serio estuviera acompañado de alguien. Cuando en realidad estoy solo con tres cuerpos muertos. - ¡¿Quién putas anda ahí?! – Volví a gritar. ¿Así de loco estoy con esas tres muertes y un descubrimiento?
- Emilio... ¡Eres un bastardo!
- ¿Qué?
- ¡Eres un asesino!
- ¡No tienes derecho a llamarme así! ¡No soy un asesino! – Gritaba cada vez mas fuerte y paranoico.
- ¡Eres igual a tu abuelo!
- ¡No sabes quien es mi abuelo para que me señales de ese modo! ¡No soy un asesino! ¡N soy un bastardo! ¡¡Solo estoy viviendo!! – Grité cada vez mas fuerte a tal punto que los vecinos empezaron de dejar de hacer ruido para enfocarse en lo que grito. - ¡Malparidos vecinos chismosos! – Grité con dichosa intensión de que los vecinos volviesen a enfocarse en sus que haceres. ¿A caso eso de estar en silencio para escuchar a sus vecinos no es violación de privacidad? - ¡Chismosos!
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El fantasma de mi cuarto
Mystery / ThrillerLuego de trasladarme a un nuevo hogar, cerca del cementerio y centro de la ciudad, se me han estado perdiendo mis objetos personales en mi propio cuarto, donde nadie entra aparte de mi madre y mis amistades con mi autorización, y para rematar, desde...