¿Cuál es el origen del amor?
¿Qué tal el origen del odio?
¿Son acaso los sentimientos los que nos hacen humanos o somos los humanos los que idealizamos los sentimientos?
Decir que era agradable tener que exorcizar maldiciones, era una mentira, cada que esa asquerosa bola pasaba por su garganta podía sentir como las náuseas y las lágrimas surgían, la constante preocupación por la respiración de la muerte justo a tu lado y el miedo de despertar mañana en un mundo vacío, era horrible, pero eso era lo que debía hacer él.
Esta bien cuidar al débil.
No es importante saber como el hijo de un matrimonio de no-hechiceros, termino siendo un hechicero y teniendo tal técnica maldita, de tan alto nivel, ni importaba recordar la primer maldición qué paso por su garganta, bueno, había algo que si le importaba recordar, a pesar de todo el tiempo, siempre recordaría aquellos místicos ojos azules qué le miraban divertido, que lo ponían en medio del cielo y le dejaban sentir la belleza de la vida, a él, quien solía vivir en medio de espíritus malditos, a él esos ojos le dejaban sentir el calor del cielo.
El primer día que llego a esta academia lo vio ¿Cómo no hacerlo? Si tenía una aura que pedía a gritos atención, acompañado de una maraña de cabellos blancos qué se iluminan con la luz del sol, una gran sonrisa tonta y una personalidad...desastrosa, ni nada más ni nada menos, ese era Satoru Gojo, ese que le encantaba desde el inicio y le encantara hasta el final.
Eso se sentía bien
Cuando el maestro les comento que (de nuevo) saldrían a una misión, escucho el suave suspiro de Shoko, linda chica, aunque rara, ocultaba su olor de alfa con los cigarros, siempre repetía lo mismo "ser omega o ser alfa en si es una maldición" y eso pensaba él, hasta que aquel chico de ojos como el cielo soltaba un poco de sus feromonas y sonreía casi opacando al sol, mientras decía que para él ser omega era una maldición divina, algo celestial, algo que la verdad no entiendo a la primera, hasta que las olio...aquel chico olía dulce, como un pastel recién horneado...olía delicioso.
Y siendo francos ningún dulce le intereso...hasta ahora
A mitad de su primer año se confeso, entre una fuerte risa y un sutil suspiro, consiguió poseer el cielo en su mano. Noto de golpe su felicidad cuando una mañana se despertó junto a aquellos cabellos blancos, sintió su pecho pesado y noto como uno de los brazos de su ahora novio descansaba sobre él, Satoru tenía una pésima postura a la hora de dormir.
En segundo año, dos noticias le llegaron por sorpresa.
La primera, una misión para aquel ser inmortal qué cuidaba las barreras, cuidar del plasma estelar y llevarla a salvo para la fusión, algo con lo que no estaba muy de acuerdo, más por esa chica, que por otra razón realmente valida.
La segunda, un embarazo inesperado por parte de su novio, quien no paraba de mostrar con orgullo su plano vientre mientras le decía al chico de primer grado Kento Nanami "¡Nanamin! mira Suguro lo puso en mi y será el ser más fuerte del mundo de la hechicería". Su voz simplemente sonaba tan hermosa, como un leve canto de ángeles antes del desastre.
Pero con ellos dos, todo estará bien ¿no?
Recuerda cuando fue con Satoru al doctor, vio una bolita deforme en el vientre de su pareja, parecía más una maldición, aunque bueno, el peliblanco decía que era lindo, como una haba y para él lo que Satoru decía era una realidad, casi como su maldición personal, uno que sabía tan bien.
Recuerda como Shoko miro la ecografía y luego le dijo que no fuera, lo recuerda bien, como él mismo le dijo que se quedara, en parte por el nerviosismo de la misma Shoko quien traía a MeiMei como apoyo, pero Satoru Gojo, quien desequilibro el mismo universo, es terco como el solo, decidido a ir en búsqueda de aquella niña y todo estaría bien, todo debió salir bien, nada malo hubiese pasado, nada estaría mal ahora, si tan solo ese del clan Zenin...no, ese ya no era su apellido, era Fushiguro, si, Fushiguro Toji, si tan solo él no hubiese aparecido con ganas de probar su fuerza, con ganas de poder, lo jura él mismo le habría entregado a Riko Amanai si se lo hubiese pedido.
Ya nada iba a estar bien
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susurros
FanfictionFic getoxgojo Namas porque Gege le dan miedo el éxito y a mí no Verdad ... Es ABO (omegaverse)